Los poderes de un séptimo hijo

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Habíamos salido del palacio y ahora caminábamos por las abarrotadas calles de Brin, para ser más exactos en el mercado de la ciudad. 

El mercado de Degenhart es nada comparado a éste, hay desde pequeños puestos vendiendo baratijas hasta grandes tiendas de renombre.
Gale, Seth, Ursula y yo caminábamos sin preocupaciones por el mercado, pero al parecer Gale buscaba algo en especial ya que miraba todas las tiendas en busca de algo.
–¿Pero qué hacemos aquí?– preguntó mi primo de mala manera–, deberíamos estar ya en camino al gremio.
–Guarda silencio– respondió el chico rubio-castaño que nos guiaba–. Aquí está.
Nos detuvimos frente a un pequeño puesto de armas, no era más que un estante de madera con varias armas en él. Había arcos, espadas, la vas, hachas, cuchillos y todo tipo de armas sobre el estante.
–¿Qué es lo que se llevarán?
Un viejo enano apareció y se colocó detrás del estante, era un típico enano que siempre llevaba su armadura y su larga barba.
–Venimos a buscar un arma– Gale me miró–, para ella.
El enano me miró por unos segundos antes de asentir y comenzar a mirar todas sus armas, murmuraba cosas inentendibles mientras miraba las armas. De nuevo me miró y sonrió.
–Eres algo especial, ¿no?– miró a Gale–, para que alguien como él te haya traído a comprar un arma debes de ser muy especial.
¿Alguien cómo él?, ¿de qué habla?
–Bueno, entonces creo que te puedo dar esto.
Puso frente a mi un pequeño arco, era un arco corto evidentemente, era azul con detalles en blanco, pero no solo era el arco, también me mostró un cinturón negro con dos dagas y una alijaba negra.
–Esto es algo especial–, sonrió al verme–, cómo es para alguien de ese gremio lo dejaré en veinte piezas de oro.
¿VEINTE?, debe de estar bromeando no cargo esa cantidad solo la mitad...
–Bien– Gale le lanzó una bolsa negra que el enano cogió sin problemas–, ahora tenemos que irnos.
El enano me dio mis armas mientras que los demás comenzaban a caminar.
–¿Qué tan especial eres para que un asesino te traiga a comprar un arma y en especial que la pague por ti?– me preguntó el barbudo enano.
¿Asesino?, Gale no tiene pinta de asesino..., o debe de haberlo confundido, los asesinos son sólo un mito.
–Pero sobre todo, ¿qué tan especial eres para que un asesino de esa categoría haga esto?– me dio una última mirada y me sonrió–, no desaproveches esta oportunidad, niña.
Yo seguí mi camino sin decir nada, ¿asesino?, pero ¿cómo es que alguien se transforma en asesino?, no tiene ningún sentido..., Gale... ¿Es verdad eso?
–¿Así que aún no lo sabes?– Usrula se acercó a mí, ella se había retrasado un poco para poder hablar conmigo, al menos eso creo–, ya te lo debió de haber dicho a estas alturas.
–¿Decirme qué?
Ella cerró los ojos y suspiró.
–¿Cuándo dejará de dejarme todo el trabajo a mí?
¿Qué les pasa a ellos?, son tan raros...
–¿Cuáles son los gremios?– me preguntó.
–El de los caballeros, el de la magia blanca, el de la magia arcana y el de los jinetes. Son los cuatro gremios que existen.
–¿Sólo esos?– un brillo apareció en sus ojos–, ¿no hay otro?
Yo me quedé en silencio, hasta donde yo sabía sólo eran cuatro gremios, pero había escuchado algo en las calles de Degenhart, algo sobre un quinto gremio, uno donde existían personas, no, soldados con habilidades superiores, tan silenciosos como el viento y tan letales como mil espadas... Asesinos.
–Bueno, he escuchado sobre otro gremio..., el gremio de los asesinos, pero sólo es un mito.
Ella me sonrió, nunca pensé que Ursula fuera capaz de hacer eso, siempre se veía tan seria e intimidante.
–Siempre hemos sido un mito, pero no lo somos. El gremio de los asesinos es real– hizo una pausa mientras miraba a Gale que caminaba muy adelantado–, fuimos creados para mantener la paz, incluso entre naciones y casas nobles, nosotros podemos aniquilar a los nobles que amenacen la paz de ReveHult si es necesario. Ahora eres parte de nosotros, como séptima hija de la séptima hija de la familia Leblanc tú debes estar en este gremio.
¿Parte de ellos?, ¿del gremio de los asesino?, ¿qué tiene que ver que sea séptima hija de una séptima hija..., esperen..., ¿también tiene que ver con los Yaman?, esto me está confundiendo, se que mi madre es una séptima hija y yo también pero no entiendo en que afecta eso.
–Debes estarte preguntando como eso te afecta, ¿cierto?
Yo asentí con la cabeza. 
–Verás, los séptimos hijos o hijas de un séptimo hijo del mismo sexo tienen cualidades "especiales", habilidades superiores a los demás– Ursula me sonrió de nuevo–, ahora, tú eres la séptima hija de una séptima hija lo cual te da una o más habilidades.
¿Habilidades?, yo no tengo ninguna habilidad.
–Pero cómo es de esperarse aún no la has descubierto. No te preocupes, pronto lo harás.
–Maldición, son unas tortugas– gritó Gale molesto–, moriré de anciano antes de llegar al gremio.
–Silencio– dijo Ursula mientras alcanzábamos a los chicos.
–Tssk, que molesta– Gale pasó su brazo por los hombros de Ursula y comenzó a hacer un drama–, eres muy molesta conmigo, yo sólo quiero cumplir mi misión para que el sabio Regault se sienta satisfecho y...
Ursula lo golpeó haciendo caer de bruces.
–Deja de decir tonterías, tú nunca piensas en la misión– Ursula continuó con su camino mientras Gale se levantaba.
Me miró y me sonrió con calidez..., debo de aceptarlo Gale no es para nada poco atractivo de hecho es muy atractivo y..., ¡deja de pensar en tonterías!

                         *****

Esto me da tanta flojera, ahora tendré que hacer otro día de viaje para regresar al gremio. Tengo lo que Regault me había asignado e incluso encontré a mi hermano, pero aún no estoy listo para pelear con él, no es como yo creía, al parecer mi hermano si es un asesino de alta categoría...
Pero eso no es lo que más me preocupa, la aparición de estos Yaman me ha estado dando vueltas por la cabeza por un buen rato, los he visto antes, incluso esos miembros que aparecieron se me hacían conocidos, será lo primero que le diré a Regault al llegar al gremio, seguro que él sabrá que hacer, mientras tanto no debería preocuparme y en vez de eso debería enseñar a Victoria a utilizar el arco que le dieron, si no me equivoco no sabe como usarlo y aun no descubre sus habilidades de séptima hija..., creo que será un largo entrenamiento el que tendremos.
Caminamos hasta llegar a las caballerizas donde habíamos dejado el carruaje, Ursula dijo que debíamos mantener el perfil bajo pero al parecer eso me fue imposible de lograr.
En fin, pagamos lo que debíamos y subimos al carro, el viaje sería largo, lo mejor es aprovechar el tiempo y entrenar el control de mi energía interna.

                         ******

Salimos de Brin en el carro, Seth y Ursula iban al frente manejando las riendas del caballo se escuchaba que tenían una conversación aunque Ursula siempre respondía con su tono serio mientras que el idiota de mi primo sólo decía estupideces.
Mientras tanto Gale y yo íbamos dentro del carro, en cuanto entramos el cerró los ojos y comenzó a ¿meditar?, tal vez.
–¿Qué haces, Gale?
Abrió sus ojos, el brillo zafiro de sus ojos de inmediato apareció.
–Entreno mi control y flujo de energía. Esto es algo que debes aprender ya que es algo básico para hacer magia.
Él extendió su mano dejando su palma directamente hacia mí.
–Verás, cada persona tiene energía dentro de su cuerpo que funciona para crear magia– Gale cerró la mano formando un puño–, magia de todo tipo.
Cuando abrió de nuevo su puño brotó una pequeña esfera azul de su mano. Había visto ese hechizo antes, es un hechizo de hielo y recuerdo que a es capaz de congelar todo aquello que toca.
–Colmillo de hielo– dijo Gale mirándome fijamente–. Este hechizo se llama así.
–¡Quiero intentarlo!
Él simplemente asintió.
–Cierra los ojos y siente como tu energía fluye por todo tu cuerpo– así lo hice tal como lo ordenó, al principio no lo pude sentir pero poco a poco pude sentir como si agua corriera por todas las partes de mi cuerpo–, ahora imagina que puedes crear algo con esa energía. Algo como una llama o una esfera de agua, incluso una esfera de relámpagos, o tal vez una esfera o cuchilla de energía blanca o arcana.
Traté de imaginarlo pero no podía crear nada de eso, en cambio me imaginaba una esfera reluciente, sólo eso.
Fue entonces cuando sentí que mi energía salía de mi cuerpo y entonces...

                          *****

Ya veo, entonces ella puede hacer eso, interesante, este poder que posee es algo que se ve muy rara vez, había escuchado a Regault hablar de algo así, una forma de manipular la energía en su estado más puro, ella tiene el potencial de aprender a dominar todos los elementos, la magia blanca y la arcana. Sí que es algo especial.
–¡Lo hice!– gritó feliz Victoria.
En sus manos había una esfera de energía verde formada a la perfección, no tuvo dificultades al crearla, tampoco en controlar su energía, pero creo que no debo sorprenderme, es algo normal ya que su habilidad de séptima hija es el control perfecto de la energía.
–¿No es increíble, Gale?
–Creo que sí– respondí restandole importancia al asunto, aunque en realidad estoy feliz por ella, más por lo que ha logrado, a pesar de que hace dos días sólo era una niña la cual se molestaba cuando la subestimaban ahora ya ha logrado controlar su energía.
La energía desapareció de sus manos y la sonrisa de su rostro, entonces fue cuando me di cuenta de mi error: ¡era la primera vez que hacia esto!
Ella se desmayó y por un segundo pensé que no lograría pero la atrapé antes de que pudiera hacerse daño.
–Lo hiciste bien, Victoria– yo me quedé mirándola fijamente, ahora que lo pienso ella tiene unos rasgos muy hermosos y..., no, no puedo pensar en eso, no puedo permitirme que pase lo de la última vez, no aceptaré ese dolor de nuevo. La acomodé sobre el sillón del carro para dejarla descansar, deberá descansar ya que desde mañana comenzará su entrenamiento, ella es lo que busca Regault y si de algo estoy seguro es que algo malo se aproxima a ReveHult, por eso ha pasado todo esto, por eso la he conocido, por eso incluso han aparecido los Yaman...
Puede que sea sólo una corazonada pero contando lo que ha sucedido antes, no será la última vez que vea a los Yaman, sobre todo a ese vampiro, Draven, algo me dice que él tendrá algo que ver con Victoria. Pero no importa lo que venga, yo la protegeré incluso con mi vida, a ella no la puedo perder.

Rolling Star [Saga ReveHult]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora