Una Búsqueda

1.1K 189 13
                                    

—Gracias por tu ayuda Videl —Dije al momento que tomaba la hoja de papel que surgía de la impresora y la guardaba en una pequeña mochila que llevaba en mi hombro

—De nada Gohan-kun —Bajó la mirada con un tono rojo en sus mejillas

Tenía un pie en el marco de su ventana, a punto de salir. La llamé, le volví a agradecer y deposité un beso en su mejilla. Después de todo, su ayuda me era necesaria.

Necesitaba una casa con internet para algo demasiado importante que necesitaba investigar, sólo conocía dónde vivía ella y necesitaba que no dijera ni una sola palabra de dónde me encontraba pues al fin tenía un plan y no pensaba fallar.

Habían pasado dos días desde que fuí al departamento de Goku. La noche en cuestión no pude dormir pensando en lo que sucedería, atormentándome la idea de que mi madre pudiera estar esperando un hijo de Goku; me lavé la boca unas treinta veces intentando quitar esa desagradable sensación que sentí después del beso de aquella mujer, y tras pensar y pensar, y ver una fotografía de mí de pequeño con mi mamá me hizo reaccionar. Recordé aquel día que Goku nos llevó a Le gâteau au chocolat. Ese día mamá dijo: Hace tiempo que no venía a este restaurant, y cuando probó su rol de canela dijo: No comía uno así desde que era niña.

Hasta donde sé, no tenemos el dinero suficiente para pagar esos lujos, y esa franquicia tiene casi mi edad o menos. Lo que nos lleva al punto de que ella solía ir a ese restaurante cuando era niña, mucho antes de que se mudara a estudiar su universidad aquí y sucediera todo lo demás.

No fue tan difícil buscar en internet todas las franquicias de la cafetería, únicamente aparecían tres, una cerca de la playa, donde yo vivía y una en un pequeño condado cerca de los campos.
Mamá siempre amó la naturaleza, y la única opción lógica, era la tercera franquicia.

Con el dinero de mis ahorros y guardando lo que supuse necesitaba en mi mochila, pagué un pasaje de autobús para ir hasta el condado donde supuse que mamá creció, y digo suponer porque ella me contaba muy poco sobre su pasado y tampoco me enseñaba fotografías.

¿A que voy con todo esto?
Necesitaba encontrar a mi abuelo.

Mamá dijo que huyó de él, temiendo que la reprendiera por lo qque sucedió con Yamcha, y para no darle desilusiones y ser independiente. Nunca dijo que él no estuviera vivo, necesitaba un consejo.

Ver a alguien que realmente fuera de mi familia, de sangre, y era demasiado difícil hablar con mamá del asunto. Además de que tenía un plan para ella. Sabía los riesgos que corría. Un rechazo, una agresión, una decepción. Pero tenía que enfrentarlos, y así lo iba a hacer.

Todo el camino estuve pensando en lo que sucedería y todo lo que sucedió mientras observaba los árboles a los costados. Fuera de la ciudad, un ambiente limpio en el cuál hubiera deseado vivir, cerca de los campos, el clima sorpresivo y sin escuelas donde hubieran niños que hacen maldades.

Comenzaban a caer pequeñas gotas de agua cuando el autobús se detuvo, abordé a las 8:45AM, llegué una hora después del mediodía. Básicamente escapé de casa ese día. Cientos de personas me veían extraño, pero ponía la excusa de que mi mamá me había enviado, y fingir hablar con la inteligencia de un adulto ayudaba mucho. No me fue demasiado problema llegar hasta ahí.

Era una pequeña ciudad y se podía oler la tierra húmeda por la lluvia, aspiré hondo y entré a una cabina telefónica.

Buscando un solo apellido en el directorio, deteniéndome en el único nombre que lo llevaba.

Ox Satan




Dad? «GoChi» [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora