Daimondios

capitulo 6

CAPÍTULO 6: Adiós.

-No quiero que se termine así.-

-Nadie quiere que termine así, trix.-. La abracé por los hombros con un brazo, mientras caminábamos a los autos con las maletas hechas.

-De cualquier forma nos visitaremos, tardemos lo que tardemos.- Ordenó Jess, quien iba de la mano con Félix.

-Es increíble pensar que hace 1 año dijimos que nunca nos separariamos, y aquí estamos.- Comentó Rex

-También dijimos, que no había manera de cambiar de resistencia sin que el resto del grupo vaya.-Concluyó Hens.

-Esto no se termina acá chicos.- todos giraron su cabeza hacia mi.-

-¿A qué te refieres?- Pregunto Trina.

-Tantos años de amistad para que termine con un simple "adios" lo lamento chicos, pero no puedo.-

-¿Como quieres pararlo? Félix y Jess se van a Washington tu, Amanda y Hens se van a California, y Trina y yo nos quedamos aquí. Vamos a estar en 3 diferentes resistencias, dudo que podamos reunirnos todos los viernes.- Completó Rex, melancólicamente.

-No lo sé con exactitud, pero tenemos que encontrar la forma. Digamos que todos los viernes o sábados o lo que sea, arreglemos para las 7 de la noche, meternos en skype, o lo que sea, y que cada uno cocine las mismas pizzas y compre las mismas bebidas.-

-Will tiene razón, no podemos dar por terminada una relación de tantos años. Además no es como si alguien se quedara solo, somos tres y ustedes dos por cada lado.- Mi amigo me apoyó.

Decidimos que esto no se iba a acabar tan rápido, y todos votamos por mí propuesta, y que después, dependiendo las situaciones futuras íbamos a arreglar horarios y días.

Nos pusimos en círculo hombro con hombro, como si fuéramos un equipo de futball americano planeando su jugada, pero a diferencia de ellos, nos quedamos callados.

-Los voy a extrañar mucho.- Habló, por primera vez en un largo, Amanda.

Todos asentimos y respondimos casi lo mismo.

-¿Les parece una ronda de gracias?- Asentí.

La ronda de gracias, era mas que nada, una simple ronda en la que todos daban las gracias y decían porque las daban y cómo se sintieron en esos momentos donde recibieron ayuda de cualquiera en el grupo.

Empezó Trina. En orden, estábamos, Trina, luego Rex, Jess, Félix, Hens, Amanda, y yo.

-Rex, te quiero dar las gracias por haber estado ahí cuando te necesité, y por haber cuidado de mis sentimientos con total compromiso. Jess, eres una de mis mejores amigas, y te agradezco por todas las veces que me ayudaste a salir de mi pozo negro, y le diste felicidad a mí vida.

Félix, me volviste loca, pero gracias a vos me mantengo firme, me ayudaste en todo, sea colegio, o sea familia, siempre estuviste para mantenerme derecha. Hens, gracias por ser vos mismo, porque siempre fuiste alegría y diversión, porque con vos me olvido de mis problemas, me ayudas a seguir adelante.

Andy, gracias por tu fidelidad, gracias por haberme aguantado en todas, y siempre ser completamente sincera, aunque la verdad sea que eres un extraterrestre.- Noté como Andy se tensaba por las palabras de Trina.

Ella no había sido completamente sincera, pero nadie podía saberlo.

-Y Will,- continuó Trix. - Gracias por estar a mi lado. Me diste todo lo que necesitaba. Un hombro donde llorar, una persona en quien confiar, un amigo en la soledad, un hogar cuando no tenía a dónde ir. Gracias a todos chicos, muchísimas gracias, porque ustedes fueron mis columnas, mis razones para vivir, lo son todo para mí. Y separarme de ustedes es lo más duro que me haya pasado.-

-Chicos, no voy a ser tan descriptivo como Trina.- Reímos.- Pero tengo que decirles que ustedes son mi todo. Acá tengo 6 bancos que estuvieron siempre para sostenerme, que son fieles, y sinceros, los quiero demaciado, y no se que voy a hacer sin todos ustedes, gracias por todo.

Noté como Trina derramaba lágrimas silenciosas, Jess tenía los ojos rojos, y Hens gimoteaba, pero la que me preocupaba era Amanda, tenía la cabeza gacha y el suelo debajo de ella tenía unas cuantas gotas, esperaba que ella llorara por no querer separarse y no porque crea que nos falló.

Jess, decidió hacer una descripción tan larga como la de Trina, y Félix también, pero a diferencia de ellas, usó todo su vocabulario de diccionario para demostrar más cómo se sentía.

Estábamos todos llorando para cuando Amanda habló, pero creo que fue por ella que ninguno pudo dejar de llorar a cascadas.

-Los quiero, los quiero tanto, los adoro. Los adoro con todo mí ser, y mí alma, y dejarlos ir es lo peor que me paso. Todos acá saben de mis habilidades, que siempre destaqué en muchas cosas, pero intenté ocultarlo por miedo. Y ustedes... ustedes me liberaron. Recuerdo la primera vez que los conocí, habré tenido por lo menos 8 años y era nueva en la escuela.

Ese día estaba más asustada que ningún otro, y no se imaginan la vergüenza que me dió cuando la comida se me callo en el medio del comedor, y todos se empezaron a reír de mí. Pero después, 6 ángeles aparecieron, me rodearon y me ayudaron a limpiarme, las dos chicas, parecían tan tiernas que me hicieron sonreír por primera vez en 2 semanas, 4 chicos me hicieron sentir segura, y aceptada, gritandole a todo el que se encontraba en el lugar que se deje de reír y que se vayan a ustedes saben dónde.- Todos reímos.

Tenían nombres tan raros para mi que me daban risa, porque además como soy latina, nadie se me quería acercar, y no es como si dominara el idioma a los 8 años. Pero ustedes fueron mis razones para seguir adelante, para sacar mis inseguridades, para sentirme mejor conmigo misma. Fueron mis ángeles guardianes, y lo siguen siendo, es una pena que solo me pueda llevar 2 a California, pero a los demás, les doy las gracias por haberme cuidado, querido, y acompañado.

-Les voy a ser sincero chicos, si sigo hablando voy a llorar como nunca antes.-Rieron todos por mí chiste.- Pero tengo que hacerlo, porque se lo merecen, merecen saber en todo lo que me ayudaron. Cuando papá se fue...- bajé la cabeza, para evitar mirarlos a la cara. - Ese tiempo, fue demasiado duro para mí, aunque haya tenido 9 años, fue una gran marca. Yo creía que él se había ido por mí, creía que yo era una basura, yo creía que no era útil. En casa éramos dos, pero parecía que no éramos nadie. Mamá lloraba todo el día y yo me culpaba a mí mismo por su partida, me lastimaba y castigaba a mí mismo por ser mal hijo.-

Dirigí la vista a mis brazos para recordar el pasado. Trina me tomo la mano y la bajo, para que no siguiera viéndolas.

-No Trix, no hay que taparlas.- Miré a mis amigos a los ojos, ellos también miraban mis cicatrices, pero ahora me miraban a mí.- Esto que ven, esto, no es un recuerdo oscuro, esto es un recuerdo de luz, de vida. Esto me recuerda a como ustedes me ayudaron a pasar esos momentos de desesperación. Me recuerdan como ustedes invitaban a sus mamás a casa para que la mía no estuviera sola, y claramente venían ustedes también, para hacerme sentir mejor. Hens eres como un hermano para mí, nos ayudamos entre los dos, Trina, eres una motivación para cada día, Rex, eres como el doctor sentimientos que siempre me cuida, Félix, eres el maestro, amigo, de cada cosa, no solo del colegio, si no también, me enseñaste como vivir mi día a día con una sonrisa, Jess, eres como una prima para mí, una de esas que cada vez que viene el mundo se da vueltas y todo es diversión y locura, y Amandy, tu eres un espejo para mí, tienes todo al revés de como yo lo veo, pero me muestras la realidad, eres completamente sincera conmigo, y lo agradezco, porque me haces sentir como si no estuviera solo. Gracias a todos chicos.-