Misterios Profundos [Completa]

Capítulo 13

La criatura sobrevuela el cielo, buscando otra presa a la cual asesinar. Crystal cae en la cuenta de que la criatura ni siquiera bajó a alimentarse del incinerado cuerpo de Landon, sino que lo mató por satisfacción, pues al caer el avión, el monstruo vuela lejos de la vista de los chicos.

—Landon—susurra Crystal mientras sus ojos se cristalizan de forma exagerada y comienzan a rodar lágrimas por sus mejillas.

—¿Qué pasó? —Dían está despertando de forma lenta, aunque se nota que se fuerza a sí mismo a entrar en razón lo antes posible.

—Landon—susurra Amber, mientras se abraza a sí misma para resguardarse del frío—, se ha ido.

Dían levanta las manos de la nieve que poco a poco se derrite, el calor está llenando la zona nuevamente, pero aún el frío no se despega del cuerpo de los jóvenes.

—No puede ser—Feith apoya su cabeza en el tórax de Mason, mientras suelta unas cuantas lágrimas.

Amber se dirige a Crystal, que está arrodillada en el suelo, mientras mira desconcertada como el sol sale, y como las nubes negras que la explosión del avión dejó cubren gran parte del cielo, mientras se pierde en las escazas nubes que se dispersan para dar paso a un calor abrazador.

—Nena—Amber deposita una mano en la cabeza de Crystal—¿Estás bien?

—No puedo creer que se ha ido—Crystal siente como sus lágrimas caen desconsoladas por sus mejillas, incluso algunas se abren paso para llegar hasta su pecho.

—Lo sé—completa Amber abrazándola—. Lo extrañaremos mucho.

—Me siento como si hubiera perdido a Max—Crystal mueve sus ojos lentamente hasta encontrar los húmedos ojos de su amiga—. Amber, quiero despertar pronto de esta pesadilla.

—Lo siento, nena—Amber deja caer sus lágrimas—, no es una pesadilla.

—Pero...

Crystal no termina de articular su oración, cuando un sonido gutural los hace sobresaltarse. Es uno de los erguidos, los que tiene visión, los que corren más rápido que un gato, pero que afortunadamente son muy torpes corriendo. Los observa, esperando a cualquier movimiento brusco para atacar y degollar. Sus rasgados ojos se pasean por todos los integrantes, por las carnes vivas de las heridas que se ven apetitosas para un carnívoro. Crystal siente que su corazón se detiene al hacer contacto visual con la criatura, sus dedos se aprieten, y lentamente aprieta el mango de su cuchillo de caza. Al mirar hacia al lado, se percata que Amber tiene el mango del machete de Landon apretado fuertemente, esperando para sacarlo y cortar.

—No muevan ni un músculo—susurra Greg que disimuladamente se ubica en frente de Amber y Crystal, protegiéndolas en caso de que la criatura ataque.