Capitulo 12: 'Esto es extraño'

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El día hasta ahora a sido muy genial. Con Max primero fuimos a una heladería donde nos compramos 5 helados y todas las personas nos miraban raro, imaginen como nos reíamos al ver sus caras. Luego fuimos a la plaza a molestar a las "parejas felices" que estaban ahí. Siempre hacíamos eso el 14 de febrero y decidimos hacerlo ahora. Y ahora estábamos en un parque de diversiones, donde ya nos habíamos subido a los caballitos y a las tazitas. Eramos los únicos mayores ahí y luego iríamos a algún juego mas para nuestra edad. ¿Y saben que es lo mejor de esto? que, en todo el día lo eh visto con una sonrisa en su rostro.

- ¿A donde quieres ir ahora? - Le pregunte a mi hermano que miraba atento a una chica pasar por delante de nosotros. - Despégate Max.

- Lo siento. - Río. - Subámonos ahí. - Señalo la gran montaña rusa que estaba justo al frente de nosotros.

- Ah no, ni creas que me subiré a eso. - Le dije alejándome de él. - Sabes que odio las montañas rusas, no me hagas subir ahí.

- ¡Oh vamos! sera divertido. - Me agarro mi muñeca y me comenzó a llevar al juego. - ¡La fila no es larga! ¡vamos! - Seguía empujándome y yo seguía resistiéndome. - ¿Porque le tienes tanto miedo?

- ¿Es que no recuerdas Destino Final 3? - Trate de soltarme de su agarre. - ¡Ni muerta me subiré a esa cosa! 

- ¿Tienes visiones? - Lo negué. - ¿Has visto a alguien morir? - Negué nuevamente. - Entonces no hay de que preocuparse. - Me agarro nuevamente de de la muñeca y me hizo entrar al juego.

Ya estábamos arriba del juego, yo estaba apunto de desmayarme, además mis nervios no me servían de mucho. El juego empezó y mi miedo aumento. - Vamos, no estés asustada, no pasara eso que paso en la película. - Yo lo miraba enojada, el hizo que me subiera aquí. Estábamos llegando a la punta cuando siento que algo se mueve, grité. - No pasa nada, siempre suenan. - Dijo riendo.

- ¿Y CREES QUE ESO ME HACE SENTIR MEJOR? - Le grite ya que había música muy fuerte.

Ya estábamos en la punta cuando nos paran por un segundo, luego miro para abajo y el carro... callo.

El viento me pegaba muy fuerte en la cara, todo daba vueltas y mi estomago se revolvía cada vez más. Mis nervios subían, la adrenalina llegaba a mí. Mi miedo siguio aumentando, mi pelo cada vez estaba más desordenado y mi lengua cada vez más seca. Miraba a mi lado y Max gritaba feliz, mientras yo quería morirme. Sentí como agarraba mi mano para que estuviera más tranquila, pero no consiguió que me calmara. Sentía que en cualquier momento me daba un paro cardiaco, o algo trágico. Sentía como el carro comenzaba a parar, cada vez iba más lento, pero mis nervios no paraban. 

Ya habíamos bajado del sufrimiento. No entendía como Max podía estar tan feliz, ¡casi morimos!

- Vez, te dije que no pasaba nada. - Se sentó en una silla que estaba al lado del puesto de palomitas.

- ¿Me estas jodiendo verdad? - Le dije sentándome a su lado. - Casi me muero por tu culpa, sentía que era mi fin, creí que me iba a caer, creí que mi corazón se pararía. - Suspire, para calmarme porque sí no, nunca pararía. -  Nunca más te hago caso.

- Vale vale, lo siento. - Lo mire de reojos y empecé a mirar a todas partes, localice un puesto donde vendían bebidas

- Ire a comprar una Coca-Cola, aún tengo mi lengua seca. - El asintío. - ¿Quieres alguna?

- Sprite por favor. - Asentí y fui al puesto. Al llegar vi que no había nadie. Espere unos segundos pero nadie aparecía así que comece a irme devuelta donde mi hermano y buscar otro carrito.

- ¿Puedo ayudarte? - Escuche una voz ronca a mis espaldas. Al darme vuelta quede completamente embobada. Era un chico hermoso, mierda. Ojos azules, piel blanca, oyuelos hermosos, su sonrisa era hermosa, era... perfecto.

Little me {fan ficc}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora