Cada día.

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Incluso los deseos de lujuria que habían acordado no contraer estaban precentes de nuevo, a pesar del vivido clímax con su amante, si es que se le puede llamar así, el hueco parecía cada vez mas profundo, la excitación creciente con forme a los movimientos la hacían sentir insegura, los alientos robados por su contraria la hacían sentir avergonzada.
Ella jamás pensó que la primera vez sería así.
Ella jamás pensó que las marcas dolerian después de la ducha.
Ella jamás pensó que el gemir su nombre la haría sentir asqueada.
Blue se sentía... miserable.
Pero ella aún la amaba...

¿Qué estamos haciendo mal?. El sonido de aquella voz, la atrajo de nuevo.

No, lo se. Su mirada se clavó en los ojos verdes apagados.

El dolor en mi pecho a crecido.

Con el tiempo eso se irá a tu garganta. Hablo sen apartar la mirada.

La rubia la observó detenidamente.

Y dolerá aún más, cuando el nudo termine de formarse. Dibujo un trayecto con su dedo desde la barbilla de la rubia, para luego pasar por su cuello, contando las pequeñas marcas que su boca había dejado.Y créeme vas a llorar, más sin embargo eso no te ara sentir mejor.

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El sonido de su despertador por toda la habitacion hizo que un quejido de molestia saliera por sus canales auditivos. A pesar de que era lunes por la mañana, ningún signo de desagrado por tener que acudir a clases apareció, de hecho estaba impaciente, se tomó el tiempo para ducharse, de pues de salir renovada de la ducha optó por cambiarse, el olor de la comida, le recordó que stevonnie estaba en casa. Bajo por las escaleras saludando a su amiga.

Buenos días stevonnie. Bostezo un poco.

Buen día perla. Le sonrió animada.

Stevonnie, ¿sabes donde a quedado la chaqueta de mi uniforme?, no la encuentro por ningún lado.

Mm.. No, el viernes por la noche llegaste sin ella.

Perla se sonrojo de inmediato al recordar lo que había pasado con lapis, sin duda alguna su chaqueta se habia quedado en casa de lapis.

Ese rubor exagerado en tus mejillas me dice que algo esta pasando. La de piel canela la miro divertida mientras servía el desayuno.

Jaja, de que estas hablando. Trató de disimular pero por favor, su cara la delataba por completo.

Es la chica de azul ¿cierto?.

Noo.

Si.

No es verdad.

Por favor perla te conozco desde hace bastante, no me puedes ocultar nada.

Mierda. Ahora mismo se maldecia así misma.

¿Quieres hablar sobre ello?

La miro curiosa.

Stevonnie.

Si?

¿Alguna vez te haz enamorado de alguien?.

La morena escupió su café después de escuchar cierta pregunta.

Este..yo, si lo hago. Respondió sonrojada.

Lo haces?, espera!, estas enamorada ahora mismo!!?.

Bu..bueno, desde hace ya un tiempo en realidad.

Quien es?, que hay entre ustedes?, se lo haz dicho ya?. Perla parecía un niño pequeño.

O..oye, tranquila, bueno lo primero aún no te puedo decir, en segundo sólo somos amigas por el momento y en tercero ya se lo dije, pero me bateó por decirlo así. Su ánimo bajo después de lo último.

El amor parece complicado, stevonnie, me enamore de lapis, pero no se si ella se siente igual.

Stevonnie noto el ánimo apagado de su amiga.

Por favor, yo misma las e visto en el Instituto.

Perla la miro confundida.

Es más que obvio, las dos se miran de esa manera tonta que tienen los enamorados.

Perla se sonrojo por completo, estaba a punto de decir algo cuando llegó un mensaje a su teléfono, su ánimo cambio por completo después de leer el mensaje, comenzó a ponerse algo nerviosa, stevonnie sabía perfectamente que había pasado, perla solamente se ponía así cuando recibía noticias de su padre, se paró y abrazo a perla.

No tienes que hacerlo. Stevonnie le habló en susurros.

Estoy obligada a ello. Hablo un poco más calmada.

¿Cuando tienes que ir a verlo?.

El miércoles.

El día de tu madre.

Si, sabes que siempre es así.

Te acompañare.

Gracias.

Ahora vamos que se nos hace tarde.

Stevonnie salió casi corriendo, perla acomodaba rápidamente su uniforme y colgaba su mochila.
Cuando estaba a punto de salir, giro su vista hacia uno de los retratos sobre la pequeña mesilla que tenian por el pasillo, la miro con melancolía y apenas en un susurro mencionó aquellas palabras que la rompían todos los días.











Mamá.















Esta algo corto, pero esto era necesario :)










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