Día lluvioso.

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Habían pasado dos meses desde que las vacaciones habían llegado a su fin, eran las siete de la mañana, había un clima demaciado frió, se podian escuchar los quejidos de fastidio por parte de los estudiantes que partian a sus respectivas aulas y todos parecian que eran actores trabajando en cual seria seria el mejor zombie para the walking dead, si, así de emocionados estaban por el regreso a clases.

Era un dia terrible en todo su explendor para una chica de pelo azul a la cual comenzaban a verse aquellas raíces negras, señal de que devia volver a aplicar el tinte pegajoso y con horrible sensación al tacto y no, no era el clima, tampoco su tinte o aquella llovisna que habia comenzado hace diez minutos, pues ya habían pasado veinte minutos desde el comienzo de su primer clase y no había rastro de peridot, blue e inclusive su adorada perla. Estaba sola.
Sin embargo el sonido de una voz gangosa al punto del resfriado la sacó de sus pensamientos. Peridot. Pensó. Busco con la mirada a algun otro acompañante, pero no tuvo exito, solo se encontraba el pequeño dorito rubio disculpandose con la maestra de lenguas y explicando el porque de su retardo.

Cuando peridot se sento a su lado, pregunto sobre blue, cosa que peridot le dijo que no se preocupara que ella estaba bien solo tenia un pequeño resfriado, lapis se sorprendio un poco pues hace tiempo que blue frecuenta la casa de peridot e incluso duerme en ella. Pero no le dio importancia, y antes de que por fin nuestra querida lapis pusiera atención a la bendita clase la sensacion de su celular vibrando en el bolsillo derecho de su falda la alejo del conocimiento, retiro y desbloqueo el aparato de una manera sutil y que no fuera sorprendida por la terrible maestra agata. Una sonrisa apareció en su rostro después de leer el nombte de perla en su bandeja de textos. Pero se desilusiono un poco cuando su querida novia le explicaba que no prodria asistir a clases devido a algunos asuntos con la empresa, pero le prometia una sorpresa para el día de mañana cosa que hizo sonrojar a la peli azul, despues de una comprensible y amorosa respuesta, lapis bloqueo su teléfono y presto atención a las siguientes clases.

El día había sido entretenido gracias a la compañia de jasper con sus tonterias y otros de sus amigos. Sin embargo ya era la hora de salida, devido a que le tocaba la limpieza del aula lapis fue la ultima en salir. Tenia prisa de ir corriendo a casa para degustar ese pastel de chocolate que su madre le había prometido, pero como si dios la castigara estaba lloviendo, realmente lloviendo y ella pues, ella como siempre olvido su paraguas.

No podia correr bajo ese granizado, agua y viento frío. Así que se resigno y espero a que la lluvia pasara, al poco tiempo se dio cuenta de que la escuela estaba decierta y eso era un poco escalofriante hasta que el sonido de pasos lentos aproximandose a ella le comenzaron a subir los nervios incluso sentir miedo. Pero ella era fuerte y sea quien sea y se atreviera a hacerle daño lo pagaria, atenta y con mochila en mano lista para golpear espero y espero, hasta que aquella figura paso delante de sus ojos lapis se lanzo al ataque, despues de varios golpes aquellos quejidos gangosos le parecieron conocidos. Cuando por fin se aventuro a abrir sus ojos se dio cuenta de que tenia debajo de si a la dueña de aquella desordenada cabellera rubia que habia visto por años.

¿peridot?!! Hablo alterada. ¿Que haces aquí aun no te vas a casa?.

No. Agata me pido cerrar el taller de mecánica y justo hiba de salida cuando me percarte de la llovisna y recorde que olvide mi paraguas y para acabar la loca de la mochila me golpeo y esta sobre mi. Respondo sobando su cabeza.

Lo..lo siento, jaja yo tambien olvide mi paraguas. Sonrio divertida.

Supongo que tendremos que esperar hasta que pare. La miro confusa. Por cierto no te quitaras de encima mío?

Lapis lo penso por un segundo.

Naah, eres comoda. Sin embargo una risa y un empujón de la rubia la derribaron.

Había pasado mas de una hora y la lluvia parecia que no querer parar. Lapis habia comenzado a tener frio y periodot le habia ofrecido su chaqueta. Parecia que al igual que  perla peridot pereferia el uniforme masculino. Sin embargo solo usaba la parte superior de este y como pantalón usaba uno cualquiera de su closet ella odiaba las faldas.

Sin embargo a lapis le gustaban tanto las faldas como los pantalones aunque preferia los vestidos frescos o pantaloncillos cortos.

Las raíces comienzan a notarse.

La voz de la rubia llamo su atención.
Y sintio las calidas manos de la rubia sobre su cabello.

Sabes con el cabello azul o negro te vez linda. Pero con el negro siempre me has parecido hermosa.

Y su respiración se corto por un momento. Miro fijamente a peridot.

Perfil delicado, pecas sobre la piel blanca y suave, cabello rubio y revelde, la delgada y pequeña figura y aquellos ojos esmeralda felinos que durante años siempre le atrapaban.

Volvió su mirada a la lluvia y
Sonrió.

Sabes. Llamo la atención de la rubia quien la miraba espectante.










Los días de lluvia no son tan malos despues de todo.

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