Capítulo 23: Just Because It's Not Boring

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Mi vida era solitaria, pero al menos siempre podía ser parte de algún lugar, incluso así, extrañaba a mi familia, así que luego de salir de la oficina tomé el primer avión a Dublín y le daría una sorpresa a mi mamá y a mi hermana.

En la espera me dedicaba a observar y a encontrar nuevas historias para la emisora, compartía crédito de editor en jefe con Jamie y Shane, pero no me hacía cargo de ello, ellos eran el cerebro de la revista, a mí me gustaba ser más la voz. Mientras esperaba que el avión partiera escuché a una chica hablar por teléfono.

-no puede faltar el beso de medianoche. No dar ese beso asegura 365 días de soledad.-

Reí, era una manera muy patética de asegurar a alguien para el año. No besar a cualquiera.

-¿Te parece gracioso?-

-La verdad sí, es una tradición muy... patética.-

-Ah ¿Si?, en Estados Unidos no lo es, de hecho es bastante efectiva.-

-¿De qué parte de Estados Unidos eres?-

-DC... ¿tú de que parte de Inglaterra?-

-Irlanda... Dublín.-

-Oh... no se nota...-

Tomé mi tablet y comencé a escribir lo que acababa de escuchar.

-¿qué haces?-

-Lo lamento, ya son gajes del oficio... soy periodista y locutor y quizá tu me diste algo de qué hablar en un par de días en la radio.-

-¿Por qué lo haces? Digo... escribir.-

-.Porque solo así no me aburriré en este vuelo.-

-¿qué programa tienes?-

-Flying Meteor... BBC radio-

-¿Tu eres...Nicky Byrne?- dijo preguntando en voz baja.

-Si.-

-Oye yo leo tu artículo en 'Unstoppable'-

-Oh, gracias, pero eso no sería un buen artículo sin mis compañeros, solo hago la investigación y uno de mis amigos lo edita. No todo el crédito es mío, eso dicen los artículos...-

-¿Harás nueva columna?-

-No, hablo de la columna de siempre.-

-No sé quién te dijo esa mentira, pero yo siempre veo tu nombre en la columna.-

-No, es que es una colaboración, siempre hay dos e incluso tres, el nombre de mis otros compañeros editores y amigos.-

-Jaja, creo que te vieron la cara...- dijo y sacó su ejemplar anterior y me mostró. Mi columna semanal 'Meteor' escrita solo por mí, y no entendía, yo no pretendía ser el principal en esa columna, pues a veces Shane o Jamie editaban y mejoraban esa columna, pero yo veía en el libro sus nombres junto al mío. Era increíble.

-No lo sabía.-

-Pues tienes un buen editor o muy buenos amigos o demasiado talento para que no te hayan dicho esto.-

-Creo que sí... después de todo... parece ser que les debo mi carrera en la radio.-

-No seas así, escribe un artículo para ellos, agradéceles en la radio.-

-Tienes razón, y tu ¿eres...?-

-Laila Alexander.-

-¿Vas a Dublín?-

-Sí, de trabajo... ya me harté por Navidad, pero ni modo...-

-¿En que trabajas?-

-Diseño de interiores.-

-Que tengas un buen viaje y una buena estadía...-

-Gracias Nicholas.-

-Diviértete...- luego de un par de horas de Londres a Dublín, y no estaba ni extrañando ni aburrido, la chica me hizo darme cuenta de la clase de compañeros y de que a veces no era el redactor adecuado. Resolvería esto una vez que regresara a casa, llamé a Shane, pero su máquina me mandó directo a los mensajes, quise dejar alguno, pero nada como decirlo de viva voz.

Llegue a casa, mi madre solía adornar la casa como si todavía fuéramos niños.

Regresar a Dublín, era tanto bueno como malo. Malo porque me recordaba lo mal que la pase en la universidad y bueno porque recordé a Gina. Fue la última chica con quien tuve algo serio. 2 años de noviazgo y luego me fui a Londres.

-¿Nicky?- escuche mi nombre y gire la cabeza en dirección opuesta y sentí una mano en mi hombro. -Nicky-

-Cielos ¡Gina! ¿Qué haces aquí?-

-trabajo enfrente recién llegó mi nueva compañera-

Volví la cara y la vi, era como el destino que intentaba decirme algo...

Quizá yo había dejado demasiado pronto a Gina, quizá estaría casado y con hijos, quizá solo era que debía salir con ella.

-¿Estarás mucho tiempo?-

-No, me voy el lunes temprano-

-oh... Imagine que podíamos... no se... Ponernos al día...-

-dalo por hecho... Te busco mañana en tu casa-

-suena genial-

-me voy, quiero darle la sorpresa a mi mamá-

-adiós... Fue lindo verte-

-en serio lo fue- me acorde y le di un beso en la mejilla, y la abrace. -Feliz Navidad-

-Feliz Navidad- dijo y me aleje. Sentí que ese ciclo no estaba cerrado, y en verdad no lo habíamos cerrado, pero incluso no se sintió incómodo. Caminé el resto del camino y llegue a casa justo cuando comenzaba a nevar, con maleta en mano y algunos productos que mi madre suele olvidar y que normalmente se la pasa gritando a Ivonne para que los compre, llame a la puerta.

-¡Dios mío Ivonne abre la maldita puerta!-

-¡Mamá! Para con la histeria-

-te dije que los encurtidos son para hoy-

Mi hermana abrió.

-¡Ahhhh!-

-¿Qué demonios te para ahora? ¿Se te rompió la...? ¡Nicholas!-

-Hola mamá-

-qué bueno que pudiste venir.... ¿Que no tienes una llave?-

-Si mami, llegue bien... Por cierto en el camino compre lo que te falta.

Dije y levanté las bolsas

-Pasa, pasa...-

Me abrazó y luego yo hice lo mismo con mi hermana.

-¿me trajiste algo?-

-Si... ¿puedo sentarme primero?-

-claro... Nicky...-

-Ahora no.- dije, sabía más o menos a lo que se refería, pero no podíamos hablarlo frente a mi madre.

-Voy a terminar la cena, ahora vengo... Ivonne sirve ponche a tu hermano.-

-Si mamá.-

-¿Cuándo te vas?-

-El lunes por la mañana-

-Oh, nos da tiempo de hablar.-

-Sí, lo sé. Pásame la maleta.- dije y lo hizo, cuando la abrí le entregue una bolsa. –Esto es del agrado de mi amiga en la oficina, de lo que nos llega de productos, a ver si te queda, y esto... es tu regalo de Navidad.-

-Gracias Nico.-

Q

Worst Kind Of LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora