Worst Kind Of Love

Capítulo 67: Modern Way

-Gracias-

Estaba desesperado por ver a Skyler, tenía más de 15 días de no verla y la extrañaba. Salí del pasillo y la vi de pie sonriente. Al verla sonreí, me sentía aliviado.

-Hola.- dijo, su voz era una melodía, esa chica era mi veneno y antídoto, a pesar de los constantes viajes que tenía que hacer, lo habíamos logrado. La abracé.

-Hola muñeca, te extrañé tanto.-

-Lo sé, yo también te extrañé mucho.-

-¿de verdad?-

-Sí, tanto que voy a hacer que me acompañes a mi viaje.-

-¿vas a viajar?-

-Sí, voy a ir a Nueva york con mis hermanas, pero quiero que vengas conmigo.-

-¿Y Gigi?-

-¿qué tiene ella que ver en esto?-

-Dijiste que no querías que se enterara.-

-No me importa, no quiero estar ocultándome más, y cuando regresemos, le diré a mi padre, así tenga que irme a la calle a vivir.-

-No lo permitiré.-

-¿qué? ¿Qué le diga a mi padre o que viva en la calle?-

-Ambas.-

-¿estás muy cansado?-

-Se me quitó al verte-

-Ahaha, no seas payaso.-

-Haha, vamos.- tomé mi maleta y caminé con ella de mi lado. Recordé que traía una bolsa de regalo para ella y me detuve.

-¿Qué pasa?-

-Te tengo un obsequio.-

-¿Si?-

-Sí, nunca me olvido de ti en los viajes, lo sabes.-

-Ok.-

Tomé la bolsa y se la entregué.

-Mmm, ¿qué será?-

-No lo sé, descúbrelo sola.-

Ella tomó el regalo y lo abrió, sabía que le iba a encantar.

-Wow... Dan... es increíble.-

-Estuvimos en Pompeya, estábamos en un descanso y caminé a ver las artesanías, lo encontré con un vendedor y de inmediato me dije, este es para Sky...-

-Es hermoso, ¿Cómo sabes que me gustan las cuffs?-

-No lo sabía, solo imaginé que se vería bien en tu muñeca.-

-Es preciosa.-

-Quizá no sea una joya cara pero...-

-Para mí vale más de lo que imaginas, gracias cariño.-

-No es nada.-

-Vamos, te llevo a casa, estás con cara de cansancio.-

-¿hoy no trabajaste?-

-Sí, pero me tomé unas horas libre, quería venir por ti.-

-Gracias, esto es lo más...-

-¿Cursi? Hahah puede ser, pero a veces recuerdo que mi hermana se la pasa trabajando y todo eso y que o disfruta su vida, quiero ser diferente a ella y no dejarme arrastrar por el trabajo.-

-¿Cómo te fue en la graduación?-

-La pospusieron, y menos mal que lo hicieron, porque me la habría perdido, y mi familia también, es la temporada de caza y todo eso.-

-Oh...-

-Además, también me alegro, porque podrás estar conmigo ahí.-

-Me halaga que me permitas compartir este logro.-

-Daniel, yo no pretendo cambiar nada de ti, ni pretendo que todo tu tiempo sea para mi.-

-Basta, te escuchas como Carrie Bradshaw-

-Hhaha, lo siento. Te he hecho ver mucho Sex and The City ¿cierto?-

-en este negocio se es inútil si no sabe quién es Carrie Bradshaw o si no ha salido en Vogue.-

-Ahora entiendo cómo es que...-

-¿Cómo es que me sabía la situación de algunos episodios? Estoy acostumbrado, en los camerinos, en las emisoras o en las revistas...-

-¿Que otras conoces y no lo sé?-

-Casi todas las que ves, las conozco. Te llevaré un día a que conozcas a alguien.-

-¿Si?- preguntó incrédula.

-Desde luego, si quieres que te acompañe a Nueva York, podremos conversar con un par de algunos colegas.-

-Mmm... Me parece prefecto.-

-Aunque creo que Jamie te habrá presentado a varios.-

-Mmm, algunos, conocí a un chico que es modelo.-

-¿A quién?-

-A uno que por ahora es la imagen de Burberry.-

-Jaja, tramposa.-

La nuestra era la nueva manera de llevar una relación. Nuestra relación era moderna en comparación a lo que ella me platicaba de lo que su padre quería para ellas. A decir verdad una parte de mi necesitaba ser serio con ella, no por su padre sino porque ella en el fondo... Ella en el fondo quería eso aunque ella misma no lo supiera.

-¿Qué te pasa?-

-Nada, es el cansancio.-

Ok, entonces puedo llevar algo de comida, quizá podemos ver una película y...-

-Me parece genial.-

Paramos en una tienda de comida, mientras ella bajó por lo que cenaríamos, cerré los ojos me sentía cansado por el cambio de horario. Pero quería pasarlo con ella hasta que tuviera que volverse a casa. Abrí los ojos cuando sentí que me besó. Cuando lo hice, me percaté de que estábamos en mi casa.

-¡Diablos!-

-Jaja, estás muy cansado cariño, vamos adentro.-

-¿Cuánto tiempo dormí?-

-El tiempo suficiente como para que me comiera un mantecado, y condujera por todo Westminster y diera un paseo.-

-Debes estar enfadada porque la cena se enfrió.-

-En realidad, no. Compre frío.-

-Siempre piensas en cosas que...-

-Sabía que vienes cansado, debo entender eso. Anda entremos.-

Entramos, cada vez que la miraba me sorprendía más. Era de un estilo independiente, pero a veces me daba cuenta de que necesitaba ser mimada, me encantaba que era divertida, directa y rebelde, eso fue lo que más me enamoró de ella y hacia unas semanas, antes de irme, me hizo darle una llave de mi apartamento. Quizá iba rápido, pero no lo sentía así.

-¿Te digo algo?-

-Dime, escucho.-

-Voy a visitar a mi abuela a ver si me puede ayudar a comprar un apartamento.-

- Mmm, me parece un gran paso, ¿estas segura?-

-Sí, es de lo que más segura me siento, quiero irme de casa, no quiero que me pase lo que a Jamie, y termine odiando a toda mi familia.-