Kitta y yo estábamos juntos en la veranda. Appa aparcó el coche y periappa descendió con un turbante cubriendo su cabello desgreñado. Se estiro la chaqueta que llevaba encima del panchakacham la prenda tradicional. Era una forma de vestirse a la antigua; la chaqueta era una concesion a los británicos mientras que la prenda de abajo y el turbante eran propios de la tradición india.
Appa cogió las maletas de periappa y subió las escaleras. Parecia as elegante y músculoso que nunca comparado con su hermano mayor, que hiba contoneándose como pato tras el. Periappa resoplo y se quito el sudor de la frente, como si subir los 5 escalones hacia la veranda requiriera un esfuerzo enorme. Hizo una pausa a unos pocos pasos de nosotros y su estomago se bamboleo. Enjugo su carnosa nariz en la manga de su chaqueta y después se nos quedo mirando con los ojos llorosos. Yo intente no fijarme en los pelos que brotaban de sus orejas ni en el gran lunar de su labio superior, que parecía una mosca aplastada.
Kitta se postro ante periappa y amma hizo lo mismo. Cuando ambos terminaron yo empeze a hacer una reverencia ante periappa con tanto respeto que amma se mostraba agradablemente sorprendida.
Por lo general, yo no era capaz de ejecutar ese ritual sin esbozar una mueca: periappa era de las últimas personas de quien yo quisiera recibir bendición.
En la comida, yo estaba demasiado preocupada para responder a los comentarios de periappa. Cuando me dijo:
- ah! Vidya por fin haz aprendido a estar callada. Quizá te encontremos un marido a pesar de tu tez morena- no objete que el no tenia que ayudar a casarme, sino que mezcle el arroz y la salsa dorada rasam con los dedos hasta conseguir una pasta pegajosa con la que forme una bola que me metí a la boca.
Mi silencio lleno la felicidad de amma, que me acarició la mano y me dijo en un susurro:
- te estas volviendo tan bien educada vidya...
Me alegre de que no se diera cuenta de que finalmente había entendido que la mancha que traía appa en la kurta era de la sangre de otro. Intente mirarla con dulzura, como si realmente ya fuera lo bastante mayor como para no molestarle con periappa.
Me quede sentada tranquilamente toda la tarde. Cuando los adultos se retiraron a hacer la siesta fui a mi habitación, cerré la puerta y pensé en la conversacion que había mantenido con Kitta. Yo había visto policías con lathis esas estrechas porras de madera con punta metálica de aspecto inofensivo. ¿podrian golpear tan fuerte como para rasgarle la piel a alguien? No podía imaginarme lo que debía sentirse ser golpeado con un lathi. Nunca nadie me había levantado la mano.
Hable muy poco incluso después de que nos sentaramos a la mesa pata cenar. Permanecí callada mientras amma servía el curry añadiendo después con el cucharón un sambhar marrón y humeante que coloco sobre los montones de arroz que había en nuestros platos de plata.
Ya se ha fijado la fecha de la boda de Malati- anuncio periappa- fue elegida la primera vez que la vieron lo cual no es de sorprender por supuesto, con esa piel clara y sus dulces modales. Un partido excelente, también. Hijo de Diwan Bahadur A.V. Ramalingam Aiyar. El hombre que construyo la presa de Periyar.
-¿Diwar Bahadur?- dijo appa- ¿todavia utiliza ese titulo?
- por supuesto-contesto periappa- ¿porque no había de hacerlo? Es el ingeniero en jefe de la provincia de madrás
- nuestros lideres nos piden que renunciemos a los títulos otorgados por los británicos, que no hagamos ostentación de ellos-arguyo appa.-nuestros lideres nos piden muchas cosas- dijo periappa con indiferencia- di hicieramos todo lo que nos piden, no llevaríamos mas que tela tejida en casa.
Kitta y yo nos miramos. Appa había dejado de llevar las telas de manufactura británica hacia 3 años en protesta en contra la mala práctica británica de recoger el algodon en rama de nuestros granjeros y vendernos después la tela tejida a precios exhorbitantes. Nos había explicado extensamente las hambrunas a causa del índigo, pues los británicos obligaban a nuestros granjeros a cultivar índigo para teñir los tejidos en lugar de permitirles plantar alimentos para dar de comer a sus familias.
- yo lo que hago es llevar khadi-comento appa. He de decir que hacia un esfuerzo considerable por no subir el tono de su voz- los británicos destruyen sistemáticamente nuestras industrias y artesanía. Dejan sin trabajo a nuestros tejedores. Expolian nuestra riqueza. Creo que lo menos que puede hacer cada indio es boicotear los producto extranjeros.
- tu vives en una burbuja Venkat-dijo periappa- tienes tu propia clinica- se quedó morando a appa con su doble mentón temblando- los demás tenemos que trabajar en este país. Trabajamos para los británicos. Si yo no llevara chaqueta, no me permitirían entrar a mi despacho.
Amma se paso los dedos de la mano izquierda por el cabello y apoyo el codo sobre la mesa.
- tenemos que mostrarles el orgullo que sentimos por nuestra herencia cultural. De alguna manera, por pequeño que sea el gesto, todos tenemos que hacerlo.
- tu puedes permitirte ser idealista Venkat- continuo periappa- pero la mayoría de nosotros no puede permitirse ese lujo.
Los músculos de la cara de appa se crisparon, pero antes de que pudiera decir nada, periappa continuo.
- de todos modos, los británicos nos han aportado cosas buenas, ya sabes. El ferrocarril y el sistema educativo.
- destruyeron nuestro antiguo sistema educativo y lo reemplazaron por uno que nos enseña que todo lo occidental es bueno y todo lo indio es primitivo y malo. ¿tu lo crees así?¿tu crees que lo hicieron para ayudarnos?
La voz de appa era trémula, casi gritaba. Los ojos de Kitta brillaban y yo Sonreí abiertamente. Appa casi nunca reprendia a nadie menos aun a su hermano mayor. Era curioso observarlo. Periappa de quedo mirando a appa anonadado. Pero antes de que aquel pudiera recuperar el habla, amma poso su mano en el brazo de appa e interrumpió.
- nuestras mas sinceras felicitaciones por concertar ese matrimonio. ¿cuando es la boda?
Appa le dirigio una sonrisa forzada.
Periappa se sintió aliviado cuando amma cambio de tema. Le respondió rápidamente.
- del 1 al 3 de diciembre, según el calendario británico. Unos 10 días después de la festividad de Karthigai- Periappa sorbió ruidosamente el sambhar que chorreaba por sus dedos- este sambhar esta bastante aguado, me parece a mi. La próxima vez que vengas a Madrás, tienes que aprender la receta de mi esposa- eructo y se rasco la barriga.
Kitta me pillo mirándole. Arrugo la nariz, hizo ver que eructaba y se restregó la barriga. Yo vontuve una carcajada.
-¿vais a casar a Malati antes de que acabe la escuela?- pregunto appa.
-si,si- respondió periappa.
- pero...empezó a decir appa. Vi que amma le daba un tirón del extremo de la kurta. Se callo.
-cuentanos mas cosas de la familia del novio- dijo amma- ¿tiene muchos hermanos y hermanas?¿donde viven exactamente? ¿y que ha estudiado el?
Perdí el hilo de la conversación hasta que llego el momento de ayudar amma a recoger los platos...
ESTÁS LEYENDO
La Escalera Prohibida
Historical FictionEsta novela desarrollada en la India narra la historia de una chica de 15 años que hará lo posible por cumplir su sueño que es asistir a la universidad. Escrita por Padma Venkatran