Todo cambió. (2a TEMPORADA de ¿Los sueños se cumplen?) [ElRubius y tu]

EPÍLOGO:

*AGRADECERÍA QUE LEYESES LA NOTA QUE HE DEJADO AL FINAL. SÍ, TÚ, UN LECTOR, PUES ERES MUY IMPORTANTE PARA MÍ Y LO NECESITO :) AHORA… MATADME CON ESTE EPÍLOGO:*

 

Narrador omnisciente

 

“

-          Siempre vas a ser MI Rojiza – finalizó.

 

FIN. “

Se estiró cuando dejó de teclear el ordenador. Bostezó y miró la hora: las 21:36. Se encogió de hombros y se levantó para ir a buscar una taza de té verde, su favorito.

-          En nada cenamos – le informó su padre cuando pasó por el comedor.

-          Está bien.

Volvió a su cuarto y repasó por última vez ese capítulo, intentado corregir las faltas y hacerlo a la perfección. Nunca lo hacía, pero era su último capítulo; uno especial. Cuando vio que estaba correcto, abrió su cuenta de Wattpad y subió el capítulo con una sonrisa.

Esa novela, que la empezó a finales de agosto, le trajo sólo felicidad. Era la primera que terminaba y se sentía genial. Creó un personaje llamado ___, para que las lectoras pusieran su nombre en la raya, pero de sobrenombre era Rojiza. La protagonista sufría, por eso fue trasladada a Madrid, para rehacer su vida. Allí conoció a uno de sus ídolos, su youtuber favorito.

Ella escribió esa fanfiction para evadirse de la realidad y dejar que sus dedos escribieran sus sueños y deseos. Escribir era una manera de expresarse, de sentirse libre y, sin duda alguna, hacer algo que, por primera vez, hacía medianamente bien. Se sentía bien escribiendo porque sus lectoras la halagaban, aunque le estuviesen mintiendo, pero le alegraban el día.

-          ¡La comida está lista!

Se levantó perezosamente  de la silla de su escritorio y dirigió sus pasos hasta el comedor. Con sus padres y hermano comieron en silencio una tortilla hecha por su progenitora.

-          ¿Cómo ha ido todo? – preguntó el padre para sacar un tema de conversación.

Miró a su hija castaña con medio pelo teñido de rojo.

-          Bien, ha sido entretenido. – le contestó sonriente.

-          Me alegro – le devolvió el gesto - ¿Y tú?

Ella desconectó completamente mientras todos menos la chica hablaban animadamente con su pequeño hermano. Le enviaron un mensaje, así que con disimulo intentó leerlo, pues su madre les prohibía comer con el móvil delante. Era de su amiga Mariona, diciéndole que el capítulo estaba genial y que le daba pena que se terminase. Ella sonrió y le contestó. Poco después de terminar su plato e irse de nuevo a su habitación, otro sms le llegó. Esta vez era de Estel.

-          “¡Oh my god! ¿Cómo puedes terminar la novela así? ¡Me encanta!” – leyó en voz alta y la chica se rió. – Esta Estel… - susurró para sí misma y le respondió.

Dejó el móvil y se conectó en la red social que subía todas sus obras y contestó todos los comentarios, dejando algunas lágrimas de emoción por lo bonitos que eran. En un momento, le llegó un mensaje extraño por la misma plataforma. Lo abrió y miró el usuario: @Rubiuslover5

“¡Hola! Soy una de tus lectoras y adoro como escribes :). Este mes estoy por Barcelona y me gustaría quedar contigo, ¿podría ser posible?”. Éste era el mensaje.