Todo cambió. (2a TEMPORADA de ¿Los sueños se cumplen?) [ElRubius y tu]

Capítulo 4:

Noté que su mirada era nerviosa.

-          Ehhhh, no, nada, nada. Buenas noches, ___ - me besó la mejilla y se metió en su cuarto.

-          Pero Tel… - dio un portazo. – Aquí está pasando algo…

Fui a mi pequeña habitación y encendí el ordenador. Tecleé el nombre de “Rubioum”, creo que así era el nombre que me dijo Rubén, pero no me salía nada de nada, sólo que era un mineral de algo extraño. Entonces puse la palabra youtuber detrás de ella y en las sugerencias me salía un canal de YouTube llamado “elRubiusOMG”.

“Entré a Youtube, buscando nuevos vídeos de los youtubers que estoy suscrita. “elRubiusOMG” ha subido un nuevo video.

-          Wiiiii genial. – pensé.

Pinché en el video y empecé a verlo. Era un Chatroulette. El rato que duraba el vídeo me lo pasé riendo como nunca y mis pensamientos desaparecieron.”

Sacudí mi cabeza rápidamente. ¿Qué narices había sido eso? Parecía que mi cabeza se había trasladado en otra época… Y pensé, “Chatroulette”. Vi un video de él que recibía el mismo nombre, bueno no, uno no, había 25 aproximadamente.  Pero había uno en concreto que se llamaba “Troleando con mi salchicha y moar hamijos”, en ese me fijé. Su título me sonaba mucho. Lo pulsé y me quedé pasmada. Me sabía TODO lo que pasaba pero sin saberlo.

-          Esto lo vi antes del accidente… - Me tapé la cara con las manos - ¿Qué fue de mi pasado?

Seguí viendo todos los videos más modernos. Terminé a las 3h de la madrugada rendida por el sueño, así que me acosté.

***

Mi móvil, que estaba debajo de mi almohada, me despertó por su vibración. Rechisté un poco y vi que me habían enviado un mensaje. Sonreí al ver de quién era.

Luke: Me tienes abandonado :( te echo de menos, little princess.

___: Yo también a ti D: ¿quedamos hoy? xx

Luke: Obvio ^^ Te paso a buscar en una hora <3 a ver si me acuerdo de la dirección hahaha

___: vale <3 haha espero que sí ;)

 

Allí terminamos. Me apresuré en levantarme, eran las 10h de la mañana. Me duché rápidamente y me vestí con algo sencillo, no quería ir muy arreglada porque no me apetecía. Cogí una camiseta de tirantes de Nirvana y unos shorts y el pelo suelto para que se me secara, sin maquillaje.

11:03h tocaron al timbre. Me miré al espejo, una manía mía.

-          Estel, ¡me voy! – le grité porque seguramente estaba durmiendo.

-          Vale… - dijo flojito pero la escuché.

Cogí las llaves y mi bolso azul. Abrí la puerta y abracé a mi Luke. Besé su mejilla y entrelazamos nuestros dedos. Bajamos las escaleras juntos y empezamos a caminar por esas calles de Madrid con tanta gente. Nos paramos a algunas tiendas sólo a mirar el escaparate. De vez en cuando nos mirábamos de reojo y nos reíamos.

-          Te quiero – soltó y me sonrojé.

-          Y yo a ti.

Seguíamos con las manos cogidas y empezamos a hacer pequeños saltitos como dos idiotas, pero nada nos importaba. Finalmente, después de caminar tanto, nos sentamos en un banco y descansamos un poco.

-          ¿Te apetece un helado? – preguntó Luke inocente.

-          Siiiiiiiii – dije cómo una niña pequeña.

Él sonrió y se fue a comprarlos. En ese momento revisé mi móvil. Ningún mensaje ni llamada. Me encogí de hombros y lo guardé, pero justo antes, éste sonó. Lo desbloqueé y vi que era un mensaje.

???: Mira delante.

No sabía quién era pero le hice caso.

RUBÉN P.O.V.

-          ¿Quiereh’ un helao’? – me preguntó Mahe.

-          Valep.

Mangel y Thous me dejaron sólo en un banco. Me dispuse a mirar a mí alrededor y vi a ___. Ella estaba con todo su pelo rojo y puntas rubias que le tapaban la cara, pero sabía que estaba con el móvil, así que le envié un mensaje.

Rubius: Mira delante.

Dudó un poco pero observó todas las partes hasta que dio conmigo y sonrió. Me levanté del banco y me acerqué a ella. La saludé con la mano.

-          Hey.

-          Hola Rubén – sonrió.

Me hizo un hueco a su lado y me senté.

-          ¿Cómo tú por aquí sola? – apoyé mis brazos en el respaldo del banco.

-          Estoy esperando a… - pareció pensárselo. – Luke.

-          Oh, entiendo.

Hubo un minuto de silencio muy incómodo. Cambié de posé poniendo mis codos en las rodillas y apoyando mi cabeza en las manos.

-          Roji… - carraspeé - __, ¿qué me cuentas?

Ella me miró con el ceño fruncido.

-          ¿Cómo me ibas a llamar?

Tragué saliva. ¿Qué pasaba si la llamaba Rojiza? Estel y Vegetta me lo prohibieron, ¿les haría caso?

-          Ro…

-          Hello? – fui interrumpido por el chico rubio del otro día.

Mierda.