Risk It All. {h.s}

Capítulo 42.

Ángela

—¿Estás seguro?— pregunté e hice lo mejor posible para que en mi voz no se notara lo afectada que estaba por la noticia que me habían dado.

—Si...lo siento mucho.— Dijo el investigador privado que había contratado. —Su novio está con otra mujer.

Agarre las fotos que estaban en la mesa y observe detenidamente a Rose y Harry. En casi todas las fotos salían ellos sonriendo o riéndose de algo. Casi siempre cerca de un edificio de una parte de la ciudad que era peligrosa para mi y que nunca he estado.Antes de que las lágrimas caían por mis mejillas, le pague al detective y lo obligue a irse de mi casa. Mientras más veía las fotos, más fuerte era el dolor de mi corazón.

¿Cómo es que él podía hacerme esto?

Me reí con ironía por la tontería que había dicho. Yo lo había engañado con un compañero de su empresa, no tengo nada que reclamarle.

Pero lo que yo le hice a él, solo paso una vez. Me sentía sola y los problemas con Harry cada vez eran peores, a veces solo sentía que éramos felices cuando teníamos sexo, que solo usaba mi cuerpo y que realmente no me amaba lo suficiente. Fui demasiado estúpida como para caer en la trampa de Logan y sus malditos encantos, nunca me llamo la atención, pero cuando Harry empezó a ignorarme por trabajar o darme cuenta que él no me veía de la misma manera, me hizo enojar, quería herirlo y quería que sepa que es lo que yo siento en mi corazón. Probablemente uno de los peores errores de mi vida, porque después (a pesar de que Harry dijo que me había perdonado) ya nada era lo mismo. Harry se había distanciado de mi. Su corazón ya no me pertenecía, pero era demasiado cobarde como para quedarme sola, demasiado estúpida como para ignorar que él ya no me amaba.

Lo primero que pensé cuando vi a Rose por primera vez fue que era hermosa. Hería mi ego al admitir eso a mi misma y me carcomía los celos el solo pensar que ella esta trabajando tan cerca de mi Harry. Así que solo hice lo que mejor sé hacer en situaciones como estas: ser mala con ella. Podía ver como ella ya no me daba sonrisas sinceras, sino eran forzadas, pero prefería eso a que ella se haga mi amiga y Harry me diga que pase más tiempo con ella, porque sabe que yo no tengo muchas amigas mujeres. Siempre estuve muy pendiente cuando ella hacia su trabajo, para verificar si ella es realmente buena en lo que hace. Pensé que ella solo era una cara bonita, pero cuando Harry me contó que ella realmente había ido a una de las mejores universidades de Londres y que su currículo era casi perfecto, me sentí peor. No había nada que podía hacer para que Harry la despida, ella era buena en lo que hacia.

No estaba muy contenta cuando Harry me dijo que le había dado la llave de su casa para que le lleve los informes, ya era muy celosa como para pensar ahora que ella podía entrar a su casa en cualquier momento. Lo único que me tranquilizaba era que Rose o era muy inocente o estúpida como para ignorar la forma en como Harry la miraba, a pesar de que su tono de voz era demandante. Yo me encargaba de ir todos los viernes a la casa de Harry para que ella se de cuenta que él sigue siendo mío y que no debería meterse con él. Por un momento pensé que ella no lo haría...tal vez fui demasiado ingenua.

Cuando averigüé que Harry y Rose se habían ido a New York solos, casi me da un infarto de solo pensar en lo que harán ellos allá, pero como la cobarde que soy y no quería quedarme sola, hice el único recurso que sabía que Harry no podía rechazar: use su situación en la empresa y su relación económica con mi padre. Sabía que estaba mal y quise retractarme muchas veces pero cuando veía a Harry sonreír a Rose, coquetearle abiertamente y reírse con ella, me hacia detenerme y decirme a mi misma que era lo mejor para todos.