2016 Pt. 4

29 3 4
                                    


Me pegué a la ventana mientras lloraba. No, no, Rhodey. Estaba sentada en una de las filas de sillas de atrás, Bucky estaba arrodillado enfrente mío calmándome.

-Debí quedarme, yo pude haber distraído a Vision y...

-No, te necesitábamos aquí. –me acaricio la mejilla y me miró profundamente a los ojos, esos ojos que me volvían loca. –Todo va a estar bien. Te lo prometo.

-Okay. Pero tienes que prometerme otra cosa.

-Lo que sea. –me acarició la mejilla.

-Cuando todo esto termine, déjame devolverte todas tus memorias y sacar todo lo que HYDRA metió en tu cabeza.

-¿Vas a empezar con eso de nuevo? –desvió su mirada.

-Sí, Bucky, quiero que estés bien, te necesito bien. Tus pesadillas te destruyen, no creas que no sé de eso. –me miró apenado. –Yo puedo hacer que paren.

-Tú siempre estás en los sueños buenos. –me sonrió con los labios sellados.

-Por favor, James. –se me quedó mirando y luego asintió lentamente.

-¿Por qué yo? –me preguntó después de una pausa. –¿Por qué me esperaste todos esos años?

-Porque cuando te vi la primera vez, vi que eras perfecto y te amé. Luego vi que no eras perfecto y te amé mucho más.

(...)

-¿Qué va a pasar con tus amigos? –le preguntó Bucky a Steve estaba sentado atrás de él. Se suponía que yo estaba dormida. Luego de un largo silencio, el Cap habló.

-Sea lo que sea...lidiaré con eso.

-No sé si valgo todo esto, Steve. Ni siquiera se si valgo lo suficiente para ella.

-Lo que hiciste todos esos años...no eras tú. No tuviste opción.

-Lo sé. Pero lo hice.

(...)

Las puertas del Quinjet se abrieron dejando ver el "paraíso" helado de Siberia.

-¿Recuerdas esa vez cuando volvimos de Rockaway Beach en un camión frigorífico? –le preguntó Steve a Bucky. Yo lo miré sonriendo de lado.

-¿Fue cuando usamos el dinero para el tren en hot dogs?

-Gastaste tres dólares para ganar ese oso de peluche para la pelirroja.

-¿Cómo se llamaba?

¿Es en serio, Bucky?

-Dolores. –le respondió Steve. –Tú le decías Dot.

-Ella debe tener como cien años ahora. –dijo Bucky.

-También ustedes, amigos. –dije y salí del Quinjet.

(...)

-No pudo estar aquí más que unas pocas horas. –dijo Steve.

-Lo suficiente para despertarlos. –dijo Bucky.

Entramos a la fortaleza y bajamos por un ascensor.

-¿Puedes sentir su presencia? –me preguntó Buck.

-Pregúntale a Dot. –fue mi respuesta cínica.

Fruncí el ceño segundos después y miré arriba y sonreí de lado. Sentía la presencia de mi padre cerca, también sentí su arrepentimiento. Llegamos al piso y yo volteé ya que le estaba dando la espalda a la entrada. Steve levantó la reja y salimos rápido. Bucky iba primero, luego el Cap y yo atrás de él. Comenzamos a subir las escaleras pero entonces el elevador sonó y volteamos bruscamente. Steve y Bucky se pusieron en posición y yo de lo más normal me fui acercando al ascensor, ya sabía quien era.

A True AvengerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora