Impredecible.

Capítulo 13

Sus ojos sus jodidos y hermosos ojos cafés, con aquella agua cristalina, yo sabía que me decía la verdad así que correspondí el abrazo y le di un beso en la mejilla.

-Te perdono..
-Gracias ojitos.
-Tranquila, yo estoy bien.
-Te cuidaré lo prometo, ya no te pasara nada. Sobre mi cadaver permito que te hagan algo.

[...]
Ni yo misma sabía que lo había dicho, pero ya no podía dejar que le pasara algo, ni yo misma lo soportaría.

Días después...

-Despierta tonto, ¿qué se antoja de comer?
-La verdad no tengo idea, pero sí me acompaña la chica de negro, comería lo que fuera.
-Espera, ¿qué es eso de la chica de negro?
-Bueno pues te contare, lo que pasa es que mis amigos y yo el día que te conocimos o bueno más bien el día que te vimos como ibas toda de negro y para mi fuiste un misterio, una chica impredecible, como no sabíamos tu nombre mis amigos te mencionaban como la chica de negro.

-Buen apodo la verdad.-dije sonriendo.
-Yo sabía que te quedaba muy bien, el color negro te viene tan bien a ti.
-Abraham.-dije bajando la cabeza.-No digas eso.
-Es la verdad.

[...]
No se que tenía, era ese tipo de chico que normalmente no conoces a diario. Me sentía tan diferente a su lado, no me sentía normalmente la chica que torturaba personas. La rencorosa. La odiada. Me sentía frágil. Tan frágil.

-Valla aparte de guapo, ahora detallista.
-No, no te equivoques, soy romántico al decirte estas palabras, sí quieres que sea detallista pídemelo y veras que lo soy.