-Valla hasta que lo matas, que sino más recuerdo dije ayer y no hoy, estúpida.
-Bueno ya no te quejes. Vamos pasa a la habitación quiero que lo veas. Fue tardado, pero es una imagen que se te quedará guardada para siempre.
-Oye Sam pero aquí no hay na...
-Vas a pagar todo lo que me hiciste maldito.-dije apuntando con un arma.
-Baja eso. Yo te he dado todo. Y así me pagas. Que asco me das.
-¡CÁLLATE IDIOTA! Abraham, atale las manos.
-Enseguida.
-¡AH! AHORA ENTIENDO. Este estúpido fue el que te convenció que hicieras esto, que no recuerdas que resives órdenes mías y no de este niñito estúpido. Por favor, ¿de verdad crees que alguien como él puede amarte? Das asco, repugnancia, abre los ojos el lo único que quiere es salir de aquí, el no te ama.
-No fue solo el, sino también todo los años de rencor que te tengo guardado.
-Listo.-dijo Abraham.
-Ahora sí te llego la hora.-dije mientras sacaba mi navaja.-vas a sufrir lo que sufrieron todos a los que he torturado.
-SAMANTHA NO, ENTIENDE, SOLO QUIERE SALIR DE AQUÍ EL AMOR NUNCA TE TRAE NADA BUENO.
-Demasiado tarde...
No podía creer lo que estaba viendo, había tanto odio en ella, que lo torturo de una manera horrible, paso el cuchillo por toda su piel como sí fuera un color rayando una hoja, y al final sacó la pistola de nuevo.
-LO SIENTES, LO SIENTES IDIOTA.
-Ya Sam ya por favor, juro que si salgo de esta, te voy a matar.-dijo Roberto con poco aire.
-No saldrás, te lo prometo. Hasta nunca imbécil.-dijo Sam y le dio un tiro.
-Se acabo ya no más..-dije aliviado.
-Vámonos Abraham, vámonos.-dijo Sam con aquella sonrisa en su rostro.
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Impredecible.
Ficção AdolescenteEl pasado de Samantha Walker, no la deja vivir, ella se la pasa torturando traidores, todo cambia cuando le piden que mate a Abraham Chamorro, un chico que por una confusión llego ahí, sin más no lo piensa y va decidida a hacerlo. Lo que no pensó...