¡Bienvenida a mi mundo princesa!

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Christopher hijo no es momento para acobardarse ya date prisa y corre por su bolso, o mi nieta nacerá aquí...

- ahhh duele... Grité

- lo sé hija lo sé, pero tienes que ser fuerte ... Vamos agarrate a mi mano tenemos que ir hasta al coche...

Donde diablos se metió christopher... Decía alex desesperada girando su cabeza de un lado para otro

-aquí estoy!! gritó saliendo de la casa con él bolso de maternidad colgado en el hombro y corriendo hacia nosotras

Christopher conducía a toda velocidad mientras mis gritos se resonaban con fuerza dentro del coche...

- Víctor al fin resp... Un fuerte grito salio de mi garganta.. Interrumpiendo a alex...

-si Víctor así es ya se puso de parto estamos llendo al hospital...
..... Ok, allí te esperamos..

- por dios hijo conduce mas despacio o acabaremos estrellandonos dijo alex tras dar un salto en él asiento del coche..

-si christopher conduce más despacio o con tanto salto nuestra hija nacerá antes de llegar al hospital..

- poco tiempo después entrabamos en él hospital los enfermeros y enfermeras me llevaron a la sala de partos allí un ginecólogo estuvo comprobando mi dilatación...

- aun solo tiene 7 cm tenemos que esperar un poco.. Dijo él ginecólogo sacando su mano del interior de mi vagina...

- nos subieron a un cuarto donde cambie mi ropa por uno de aquellos horribles camisones de hospital, mis contracciones eran cada vez mas seguidas y dolorosas, unas ganas de empujar se apoderaban de mi, christopher aviso a la enfermera y esta se presento en él cuarto con otro ginecólogo que volvió a comprobar mi dilatación y con rostro alarmante ordenó que me bajaran rápidamente

Mis gritos acompañaban al ruido que hacían las puertas que abrían a toda velocidad las enfermeras con ayuda de christopher mientras otro enfermero empujaba la silla de ruedas en la que estaban moviendo..

- no empujes gritaba una de las enfermeras que corría delante de mi.. Llegamos a la sala de partos, me tumbaron en una cama colocaron mis pies en alto y una voz apenas audible para mi, me pidió que empujara...

Unos cojines que una enfermera colocó sobre mi espalda consiguieron que mis ojos pusieran rostro a aquella voz que venia de entre mis piernas, christopher estaba a mi lado tan nervioso que hasta tuvieron que atenderlo las enfermeras., colocaron cerca de él una silla ya que se negó a soltar mi mano...

- dul como sigas apretando mi mano de esa forma me la vas a partir - dijo retorciéndose del dolor...

No hizo falta mas que una mirada para saber que si volvía a abrir la boca lo que le apretaría seria otra cosa...

- muy bien mi amor! lo estas haciendo genial!! aprieta mi mano todo lo que necesites..

De verdad no sabia si reírme o matarlo de una vez...

Gotas de sudor empañaban mi rostro, mis labios estaban secos y mis fuerzas cada vez eran menos ...

- vamos dulce! dos empujones mas y tendrás a tu hija entre tus brazos - decía él ginecólogo

Mis gritos se hacían más audibles debido a que él dolor era cada vez más intenso...

Christopher rodeó uno de sus brazos por detrás de mi cuello y dejo un tierno beso en mi cabeza mientras yo daba el último empujón

-él llanto de mi hija impregnó aquella sala, yo caí desplomada sobre la cama soltando la mano de christopher que corrió a conocer a nuestra hija..

Eclipse de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora