Carretera part. 1

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La negra cabellera entró en la habitación desde el baño personal de nuestro cuarto mientras se sentaba a los pies de su cama – ¿Hoy es el día?

–Así es, hoy es el día. –aquellas últimas palabras se repetían en mi cabeza una y otra vez mientras terminaba de empacar lo necesario.

Hoy sabríamos el verdadero estado de mamá.

Era viernes, lo que significa que podía permanecer en el hospital sin tener la preocupación de volver a la hora que Tabatha me había indicado luego de contarle lo sucedido.

–Por favor solo vete, de los quehaceres del cuarto me ocupo yo. –dijo Jolie mientras me giñaba un ojo.

Fruncí el ceño al escuchar su oferta, no me apetecía rechazarla ahora cuando más la necesitaba – ¿Hablas en serio? No creo que este bien –dije de todos modos tratando de que cambiara de opinión.

Afirmó con los labios apretados, lo que entendía era que no cambiaría de parecer –Anda ve, seguro Justin te espera para llevarte al hospital. –

–Te debo una Jolie. –me acerque sin saber muy bien que hacer. Rodee su cuerpo con mis brazos por varios segundos.

Un intento de abrazo.

Me correspondió el abrazo mientras acariciaba mi nuca, tal como mamá lo hacía –Cuando vuelvas quiero que me cuentes ese rollo con lujo de detalles. –dijo con esa tan sonrisa pícara que solo ella sabía hacer –Suerte con lo de tu madre.

–No hay ningún rollo, y gracias. –tome mi bolso con lo necesario y alguno que otro apunte para los trabajos.

Trabajos de los cuales tampoco había tenido que preocuparme demasiado, ya que mis compañeros insistieron en que no debía hacer mucho en él. Entendían que me encontraba en una situación completa y yo estaba dispuesta a recibir la ayuda que me daban todos a mí alrededor. Con mi mayor esfuerzo, ya que no me parecía del todo correcto.

Bajando las escaleras mi móvil vibró con un mensaje.

"Por favor no demores, me estoy congelandoL".

Justin sabía conseguir una sonrisa aunque fuese con una estupidez, algo que esta semana había sido lo más reconfortante, igualmente los avances que ha tenido mamá.

Hoy viernes, por fin, terminaría ese coma inducido.

Solo espero que reaccione, que reaccione para tener un chance de hacer las cosas bien. Pensando positivo me he llevado la semana y así la terminare.

"Todo saldrá bien", pensé una y otra vez antes de salir por la puerta y ver a Justin apoyado en el auto con las manos escondidas entre sus brazos.

Hacía bastante frío para ser un día de Octubre.

Me acerqué depositando un beso en su fría mejilla –Lamento la demora. –

A lo que él respondió con una sonrisa –No te has demorado, yo llegue antes. – observo mi pesado bolso y la dificultad que tenía para sostenerlo –Dame eso–

–Yo puedo sola–dije reusándome a entregárselo, no me agrada que me traten como alguien débil. Y él lo tenía claro.

Llevo las manos a la altura de su pecho y mirando al cielo repetía –Paciencia, solo un poco más paciencia. –

Me indigné al escuchar sus suplicas al cielo – ¿Disculpa? –

–Te disculpo–dijo palmeando mi hombro y abriéndome la puerta para sentarme.

Instantáneamente rodé los ojos –Tu eres imposible–

–Quizás paso mucho tiempo con Chase–asentí otorgándole la razón.

–Seguro es eso–volteó con asombro dejando la boca entre abierta. No esperaba esa respuesta.

Solo rei ante su gesto mientras me ponía el cinturón de seguridad.

Al subir al auto recibí una llamada de papá para platicar sobre lo expectante que estaba con las condiciones de mamá, en su trabajo le habían dado autorización para salir antes y así estar presente en el hospital.

Además de coger una llamada de mis amigos avisándome que se dirigían en camino para estar junto a mí.

–Emily me ha llamado hace un momento, van camino hacía el hospital –dije, frotando mis manos por el frío que sentía.

Justin al notarlo estiro su brazo libre para coger una manta del asiento trasero y ponerla sobre mis piernas –Tienes muy bueno amigos, ¿sabes? –

Sonrei ante su gesto, este chico me hacía perderme por un instante de la cruda realidad –Tú también eres mi amigo–

–Y tú la mía–dijo, antes de poner en marcha el auto.

La música sonaba opacando cualquier silencio, pero para mi sorpresa no se trataba de un silencio incomodo, solo era tranquilidad.

Llevaba ya rato sin mirar a Justin, logré concentrarme en el paisaje mientras me arropaba con aquella manta que parecía ser de Eleanor por su color rosado.

Mi móvil se removió dentro de mi sudadera.

Emily me había dejado un mensaje.

"En una hora estamos allá, besos.

Pd. Con Trey nos preguntamos, ¿Cuándo admitirás que te gusta Justin?"

Bloquee el aparato sin responder. Estaba harta que me vincularan con este chico.

¿Es que acaso no se pude tener amigos? Amigos guapos, inteligentes, interesantes, esforzados y con buen cuerpo. Al parecer era pecado.

De todas formas era imposible que un chico como él se fijara en mí, siendo... siendo como soy. Él debe estar acostumbrado a delgadas chicas rubias de claros ojos con cuerpos de modelo.

Porque sí, aunque se luche contra el estereotipo los chicos de todas formas prefieren a las muchachas extrovertidas, lindas y por sobre todo, sociables y simpáticas.

Yo pues, no tengo el ego por las nubes pero si logro reconocer que tengo gran capacidad para los estudios, me esfuerzo por lo que me propongo y el color de mis ojos es atractivo. Aun así sería imposible, imposible por diversas y muchas razones como... pues... los estudios, sí, los estudios.

Aun así tendría un novio, pero solo con fines investigativos. ¿Cómo sería tener novio? ¿Cómo se sentiría?

En el fondo de mi corazón, me gustaría ser querida. Querida de la forma más bonita y pura, de esas que lees en los libros. De esas que te inspirar y te hacen pensar por un momento que anda alguien por ahí en las calles destinado a estar contigo, para amarte y hacerte feliz, tal como tú lo harías hacia él.

Definitivamente he visto muchas series en Netflix y he leído muchas novelas.

Me dedique a contar arboles para dejar de pensar en esto, porque simplemente tenia claro que no llegaría a una conclusión. 


Now or Never ➳ j.b.Where stories live. Discover now