En Busca de la Felicidad

Capítulo 2x16: La audición.

Capítulo 2x16: La audición.

Cada uno decide su destino y este se forja de una manera firme a través de nuestras decisiones y nuestros actos, así como solo nosotros tenemos la libertad de escribir, elegir y decidir como seguiremos en el camino… Alessandro Mazariegos.

 

El pasillo era estrecho, apenas dos metros y medio de ancho, y a ambos lados había jóvenes nerviosos, con temblores de piernas y mordidas de uñas, pero sobre todo eso, solo había jóvenes que parecían recién salidos del instituto, llenos de acné y con las miradas tiernas de gente que había sufrido poco y había visto poco en la vida.

¿Qué hacía yo aquí? Los veía con sus auriculares puestos, estudiando sus partituras y con más callos en los dedos de los que tendría yo nunca. Estaba segura que todos estos chicos llevaban estudiando música desde antes de aprender a andar. Lo mío tan solo fue un entretenimiento hasta que empecé a cobrar por ello. Era imposible, no iba a tener ninguna posibilidad.

- Hola, - le dije a la chica que había justo a mi lado. Sus rizos y su pelo abultado casi me tocaban la cara a pesar de estar a varios centímetros de distancia. Ella se giró para mirarme esperando a que dijera algo más que un hola. – me llamo Anne.

- Ya. Pues muy bien. – contestó dándome a entender que su intención no era pasar un buen rato.

Un chico que debía de ser de la misma edad que la estúpida de mi lado, empezó a reírse de ella. Aunque parecían tener la misma edad, es decir, los diecisiete o dieciocho con los que se termina el instituto, el chico no tenía esa mirada de rivalidad que parecían tener todos.

- Es una ciencia que dicen que si eres tonta del culo, eres capaz de entrar en la Julliard. – se acabó burlando. – Me llamo Joey. – me dijo ahora a mí.

- Un placer Joey. ¿Eres de aquí? – pregunté para interesarme un poco.

- No, que va. De Dakota del sur. – dijo con un suspiro dando a entender lo lejos que estaba. – Tengo pocas esperanzas de entrar, pero no quería perder la oportunidad de coger experiencia en hacer audiciones. Esto está muy por encima de mis posibilidades.

- Empiezo a pensar que de las mías también.

- ¿Qué instrumento tocas?

- El piano. – y tras decirlo, suspiré al ver la cantidad de partituras para piano, de chicos moviendo los dedos tocando pianos imaginarios y de la sonrisa de la estúpida de mi lado, que fijo que lo tocaba también.

- Yo toco el chelo, pero siempre me he visto más montando mi propio bar de Jazz y tocando para mis clientes con algún amigo trompetista o algo así.

- ¿Tienes algún amigo trompetista? – pregunté con sincera curiosidad.

La verdad es que el chaval me estaba entreteniendo y quitándome los nervios, parecía que con tan solo dieciocho años, tenía más esperanzas en la vida que yo con mis veinticuatro años ya. Pero sobre todo, parecía estar describiéndome a mí hace como siete u ocho meses. 

¿Cómo había llegado a apuntarme a la audición de esta escuela? ¿cómo había podido dedicar estos últimos meses a entrenarme para esto? Sentía que había perdido el rumbo de mi misma, yo no quería esto.

- No, por eso vengo a estos sitios, a ver si conozco a alguien con el mismo sueño que el mío.

Y a pesar de que me había contestado a una pregunta que yo le había formulado, en ese momento no tenía ni idea de que hablaba. En mi cabeza solo cabía incredulidad por mi misma y por mi comportamiento en estos últimos meses. Pero aún así, necesitaba corroborar que este no era mi camino, necesitaba oírselo decir a alguien.