Un amor casi imposible

Selección de casa

Todo el trayecto a Hogwarts Albus, se la paso hablando de lo molesto que estaba con James por haberse ido a Durmstrang, mientras Scorpius, Rose, Lysander, Lorcan y Ellen solo lo escuchaban, los únicos que estaban atentos en escucharlo eran Scorpius y Ellen ya que Rose ya había escuchado a Albus el mismo día que James se marchó y no estaba interesada en volver escucharlo así que fingía que le prestaba atención, Lysander por su parte se alegraba de que James se hubiera ido a Durmstrang y Lorcan estaba perdido en sus propios pensamientos.

Cuando por fin llegaron a Hogwarts cada uno tomo lugar en la mesa de su casa correspondiente en la espera de que entraran los nuevos alumnos de primero.

Cuando entraron los pequeños que ingresarían a primero Albus y Rose se emocionaron al ver a sus pequeños hermanos en la espera de su turno para ser seleccionados.

Lentamente los pequeños magos y brujas fueron pasando hasta que por fin llegó el turno de Hugo Weasley el cual camino con nerviosismo hacia el sombrero seleccionador, el cual lo coloco como a casi toda la familia Weasley a excepción de Albus en Gryffindor, para dar paso a los aplausos de la mesa de los leones que recibían muy gustosos a su nuevo integrante.

Después de Hugo fue el turno de Lily Potter la cual a diferencia de su primo no estaba nerviosa para nada de a qué casa pudiera mandarla el sombrero seleccionador, en cuanto el sombrero se posó en su cabeza grito Slytherin, formando una escena parecida a la que años atrás se había formado con la selección de Albus, hasta que Albus y Scorpius empezaron a aplaudir junto con toda la mesa de Slytherin y ella fue a sentarse muy feliz entre Albus y Scorpius.

Enterarse por Albus que James se había ido a estudiar a Durmstrang había tomado por sorpresa a Scorpius, James era totalmente impredecible para él, no podía evitar sentirse triste por la partida de este, Scorpius albergaba en el la esperanza de que en ese curso James lo volviera a tratar como lo había estado tratando antes de san Valentín, pero nuevamente se había equivocado.

Rose y Ellen parecían ansiosas por hablar con el respecto a James, pero el siempre evadía la plática no quería hablar de James.

Sin embargo después de pensarlo durante mucho tiempo había llegado a la conclusión de que ya no quería seguir enamorado de James, el amor que sentía por James solo lo lastimaba, tenía que madurar ya no era aquel niño de 9 años que vio por primera vez a James en el callejón Diagon, ahora era casi un chico de trece años que cursaba su tercer año en Hogwarts, tenía que aceptar que por mucho que él quisiera a James, eso no significaba que este sintiera lo mismo por él y que nunca lo haría, su amor era imposible.

Así que decidió dedicar toda su energía y pensamientos en volverse un mejor mago, no era que le fuera mal sus notas eran buenas pero concentrarse en sus estudios lo hacía no pensar en James y eso era lo que necesitaba, necesitaba olvidarse de James.