Capitulo 9

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Eileen apenas pudo dormir por la noche, se encontraba en su cama con su mente hecha un torbellino de emociones y pensamientos, se sentía traicionada lo cual era molesto pero lo que la molestaba más era sentirse traicionada, no es como si él fuese algo para ella... Y con todo había soltado una lagrima. Sentía unas ganas irracionales de gritar a más no poder de pura frustración, ¿cómo podía haber sido tan tonta? Seguro que se pasó toda la noche burlándose de ella, la humillación será demasiado grande que lo mejor sería olvidarse del juego e intentar empezar otra actividad, esta vez un poco más edificante para su futuro.

Con todo su cuerpo aún recordaba la emoción de cuando logró hacer sus primeras skills... esa sensación de emoción excitante al sentir su cuerpo moverse, saltar y golpear, sin duda alguna fue muy divertido y por lo que había visto eso solo era la punta del iceberg, con skills muchas cosas que parecían irrealizables pueden ser experimentadas por ella misma.

Decidido, lo que ese traidor estúpido que se dedicó a ayudarla para luego estar con su archienemiga haga no es asunto suyo, será la mejor de MyL a partir de ahora y no volvería a juntarse con nadie, ella sola se bastaba para llegar a lo más alto, siempre había sido así y así seguirá.

Al día siguiente tras acabar sus habituales tareas mañaneras volvió a conectarse al MyL, tal y como se esperaba apareció en un templo. Era una norma que si te desconectabas en una capital o en una ciudad lo suficientemente grande para tener un templo, automáticamente aparecías ahí, evidentemente eso se hacía para tener un orden y evitar incidentes.

Eileen ya había trazado una serie de objetivos a seguir, su último objetivo era ser la número 1 del juego, pero para ello debería realizar objetivos a más pequeña escala, su objetivo más inmediato era mejorar al máximo posible la espada que le resultó linkeada, había hecho una serie de investigaciones en la red y era un objeto único añadido en la última actualización, los encargados de comunicación habían difundido que se trataba de un objeto legendario pero ni una pizca más sobre sus stats o sus habilidades. A pesar de desconocer eso, un objeto legendario sin duda alguna era uno de los mejores ítems del juego, muchos jugadores se enzarzaron en su búsqueda, el motivo por el que no fue encontrada antes es porque la habían escondido en una zona demasiado low como para tenerla en cuenta, a consecuencia de ello muchos jugadores habían perdido buscando en las zonas más peligrosas y probablemente aún seguirían haciéndolo, casi sentía pena por ellos, casi.

Tras comprar unas cuantas pociones y una nueva espada (por muy objeto legendario que fuese ahora mismo era solo basura) y lo más importante un caballo, los caballos eran una montura básica en el juego para recorrer grandes distancias y generalmente demasiado caras para los jugadores novatos como ella pero sin pensárselo demasiado compró uno por 20 oros y gastó otros 5 en conseguir la skill que permitiría montarlo.

Al principio tenía miedo de caerse o de hacer algo mal, pero sus miedos se demostraron infundados ya que con solo poner un pie en el sillín su cuerpo automáticamente se montaba grácilmente en el y para manejarlo básicamente bastaba en usar las riendas como controles y el caballo sin duda alguna obedecería la indicación. Por supuesto, la facilidad de aprendizaje era debido a lo básico de su montura, una montura de mayor valor sería más difícil de dominar. Sin más preámbulos salió de la ciudad en dirección norte.

Su objetivo inmediato era conseguir ácidos pétreos y así desbloquear la primera mejora de su arma, para ello tenía que ir a la montaña despedazada donde se encontraban una serie de babosas verdosas, el nivel de la zona era 25 por lo que necesitaría subir al nivel 20 cuanto menos. Normalmente ella era partidaria de hacer las cosas poco a poco, pero cuanto más pensaba en ello, más se daba cuenta del poco tiempo que tenia, por lo que tendría que tomar decisiones arriesgadas una detrás de otra y un solo paso en falso sería catastrófico, pero Eileen no estaba asustada de su reto sino más bien todo lo contrario, era un desafío a su altura y no pensaba perder.

Mi aventura en un nuevo mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora