Capítulo 24

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Derek tuvo que correr todo el camino desde la casa de Stiles hasta su loft, el humano se había ido en el jeep sin ni siquiera mirar atrás.

Durante la carrera Derek se tomó su tiempo para poder pensar bien y aunque no logró ver claro el comportamiento del castaño supo que para un adolescente como él aquello habría sido normal, debía remediar cuando antes aquello.

Llegó al loft y subió las escaleras con ritmo ya que el ascensor estaba siendo tomado y cuando llegó a su piso las puertas de este se abrieron mostrando a un Stiles molesto que prácticamente estrangulaba la almohada entre sus brazos. Le mandó una mirada asesina a Derek antes de entrar al loft, ignorándolo por completo mientras dejaba las cosas en uno de los sofás.

-¿Y esa cara? -preguntó Lydia pero solo recibió una mala mirada- ¿Stiles?

-Déjalo -habló Jackson acercándose a Lydia para abrazarla por detrás- créeme, huele a tantas cosas que ni se como va a reaccionar.

Stiles murmuró algo por lo bajo que ni los lobos pudieron entender pero todos supusieron que sería algún insulto para Jackson. Pero Derek supo que seguro serían para él, se rascó la nuca y dio unos pasos hacia Stiles, viendo como este apretaba más los labios, ofuscado.

-Derek -llamó Cora- ¿Me ayudas a mover unas cosas?

El nombrado asintió extrañado, no es como si le molestase ayudar a su hermana sino que esta con su fuerza lobuna podía hacer las cosas sin ayuda. La siguió escaleras arriba hasta el que sería el cuarto de las chicas donde Erika estaba colocando un colchón, esta al ver el gesto de Cora salió de la habitación con rostro curioso.

-¿Para qué me necesitas? -se cruzó de brazos el hermano mayor.

-Para nada -se encogió de hombros- pero tu si necesitas mi ayuda -ante la ceja alzada del otro siguió hablando- ¿Qué te ha pasado con Stiles?

-Algo raro -gruñó- se supone que esta molesto porque no le muestro afecto cuando estamos en manada, pero si lo hago.

-Querrá algo más que solo cogerse de la mano -se sentó en una de las camas.

-Ya, y yo también -se sentó al lado de Cora- pero me preocupa que a la manada le de por pasarse con él.

-Oh, entonces solo golpea a Peter. Aunque ese no aprende ni con golpes.

-No es solo él, no se si todos en la manada lo aceptan, ¿sabes? Hay veces que... no se como explicarlo -bufó- en ocasiones me da la sensación que la manada lo ignora.

-Tu también lo hacías al principio. Y créeme no lo hacen, bueno solo cuando tiene esos monólogos tan raros -Derek suspiró ante el gesto de su hermana- Aun así, todos lo aceptan, algunos más otros menos pero todos tienen presente que Stiles esta ahí.

-¿Desde cuando eres capaz de hablar así? -se burló.

-Bueno, tarde o temprano tenía que madurar -se puso de pie- y en ello ayudo Stiles -le guiñó el ojo antes de salir.

Derek no tardó mucho más en bajar nuevamente, viendo a la manada cada uno en lo suyo y a Stiles sentado en una esquina del sofá, aun de morros. Se acercó a el con paso tranquilo para tirarse con total calma en el sofá apoyando su cabeza sobre el regazo de Stiles provocando no solo sorpresa en el rostro del castaño sino también un rubor que se le extendió hasta las orejas. Stiles balbuceó unas cuantas palabras nervioso, más el solo lo miró a los ojos, viendo los mieles brillas.

-Solo por esto no te voy a personar -murmuró cruzándose de brazos al no saber donde colocarlos.

-¿De verdad? -alzó una ceja mientras ladeaba la cabeza para verlo.

Stiles asintió pero Derek no se movió de su sitio, no apartó la mirada del humano ni un segundo, notando como este se ponía más y más nervioso, provocandole una sonrisa disimulada que terminó por hacer ceder al otro.

-Esta bien -medio gritó- deja de mirarme.

-Quiero un beso -Stiles tuvo que parpadear un par de veces para salir del Shock.

¡El gran Derek Hale acababa de pedirle un beso! La mente del castaño había explotado con esa frase y sus engranajes no podían girar bien. Negó con la cabeza rápidamente, ganándose una de las tantas cejas alzadas de Derek.

-¿No me vas a dar un beso? -murmuró con malicia a lo que el otro negó con la cabeza nuevamente- Entonces... ¿Quieres que te lo de yo?

Stiles tembló por completo ante las palabras y su corazón se desbocó cuando la mano de Derek acarició su cuello, haciendo una ligera presión señal de que bajara su cabeza, ante aquello Stiles suspiró y Derek dejó relucir sus ojos rojos. Alzándose un poco el Alpha gruñó mirando los labios finos de Stiles, reclamándolos.

Tras tanta tensión ambos por fin juntaron los labios y Stiles relajó su cuerpo de golpe, siguió el movimiento de labios de Derek mientras este volvía a su posición inicial, liberando los labios tras un ligero mordisco.

Con las miradas aun conectadas, Stiles recuperó su respiración mientras Derek se deleitaba con la imagen y el olor del chico, soltó un gruñido bajo, más parecido a un ronroneo, mientras la mano que estaba en la cabeza del otro descendía hasta el cuello de este, notando la sangre pasar acelerada por su yugular, se relamió los labios y trago saliva ante las ansias de morder ahí, sobre aquel pulso acelerado.

Y podría hacerlo, debía hacerlo si quería marcar al humano y tenerlo por fin solo para él porque eso es lo que quería, un Stiles completamente suyo que solo le mirara a él, que solo sus manos pudieran rozar aquella piel. Solo él.

Solo él.

-¿Derek? -la voz de Stiles le despertó del trance- ¿Estas bien?

El nombrado solo alcanzó a tragar saliva con esfuerzo y levantarse hasta quedar sentado, notó la mano del humano acariciando su espalda y jadeó notando como perdía el control. Sintió sus manos temblar al clavarse las garras, como la herida sangraba y se sanaba con las mismas, los nervios en la boca del estomago mientras un sudor frío le recorría toda la espalda.

Stiles extrañado por el comportamiento de Derek se pegó a él, apoyando su cabeza en el ancho hombro y mirándolo desde ahí, le acarició la espalda con cuidado esperando a que este dijera algo. Cora apareció frente a ellos con algo en las manos y Derek estiró su brazo sin decir nada y su hermana le inyectó algo que llamó mucho la atención del humano.

-¿Qué es eso? -preguntó pero Cora negó.

-Ya estoy bien -murmuró Derek.

Cora asintió y se alejó con Peter e Isaac a sus espaldas, Stiles los observó con cuidado y supo que algo estaba pasando, miró a su alrededor y los vio a todos tensos y con rostros preocupados, incluso Lydia.

-Voy a ir a descansar -se puso de pie- llevaré de paso tus cosas al cuarto.

Stiles solo atinó a asentir y verlo marchar, debía descubrir que demonios le pasaba a Derek.


Aquí otro capítulo más, espero les guste porque a mi me pareció un poco raro pero bueno, tengo que hacer sufrir un poco a Derek para que mis planes funcionen (mentira, no se que estoy haciendo) 

Gracias por leer, hasta el próximo capítulo.

I want to bite youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora