PERDIDA.

Capítulo 8.

Al fin era lunes la junta sería  a las 10 de la mañana, tuve que posponer el turno con William no quería cancelar necesitaba verlo aunque sea de esa forma médico  - paciente, tenia un día bastante fuerte no solo ayudaría a papá sino que también enfrentaría a dos personas que bastante mal me hicieron en el pasado estaba muy segura de lo que estoy por hacer y era momento de enfrentar a todos.

Mi abogado y mejor amigo acepto acompañarme este día no tengo miedo sino que me encontro eufórica con ganar y mostrarle a ellos que cambié  para ser su peor enemiga.

- ¿Estás lista Ally? - el Doctor Andrey Strovlos llama mi atención estábamos parados en la entrada de la empresa agradecía contar con su presencia.

Sonreí. - Claro Andrey - conteste tranquila todos pensaran que es un hombre grande pero no apenas tiene 30 años y es muy apuesto muchas mujeres mueren de amor cuando lo ven es uno de mis mejores amigos igual que Eric ademas de ser socios en nuestra academia de danza en Rusia.

- Sino te sentís segura o incomoda con una simple mirada salimos de ese lugar ya tengo pensado el plan de escape le prometí  a Eric cuidarte y eso haré -

- Gracias por estar acá - me acerco a abrazarlo, Eric y el son todo lo que tengo en Moscú.

- No es nada para algo están los amigos y vamos a entrar a patear sus traseros - dice de forma graciosa para tranquilizarme para que ría  un poco.

Eramos los últimos que faltaban entrar en la reunión  solo quería hacerlos esperar para cabrear a mi madre más  de lo que ya está, entramos a la sala de juntas más de 20 pares de ojos están puesto en mi persona sonreí coqueta y miré a mi padre que me hizo señas para que me acomode cerca suyo tomamos nuestro lugar con Andrey no voy a negar el clima estaba tenso visualice a mi madre nuevamente que envía dardos con sus ojos.

Como dueño de la empresa papá empezó la reunion explicando porque debían votar por él  y que no tenía  problemas de acatar lo que votara el comité de socios luego fue el turno de mi madre  expuso su porque que eran las típicas excusas que nunca iba a poder cumplir. Así cada socio comenzó a votar la muy perra tenía una ventaja mínima yo era la ultima esperaba ansiosa mi turno.

- Allison Miller eres la ultima, no creo que sirva mucho tu voto - el desgraciado Stefan Meyer gozaba de la supuesta perdida de mi padre, era la primera vez que hacia contacto visual con este señor porque cuando entre lo ignore olímpicamente.

Sonreí con arrogancia este hombre no sabia lo que le esperaba. - Señor Meyer no cante victoria antes de tiempo como heredera Miller tengo el 10% como mis hermanos - comencé a explicar.

- Todo eso ya lo sabemos puede ir a su punto muchas personas de está sala tenemos mejores cosas que hacer - contesta con frialdad tratando de que mis palabras no tengan valor.

- Señor Meyer no me interrumpa - odio a este hombre. - Por favor Andrey entrega los papeles - mi abogado les dio a cada uno las carpetas. - Como dicen eso papeles hace seis años mi padre había incorporado al nuevo integrante de la familia a nuestra empresa que estarían a mi cargo hasta que Dylan - un nudo se me forma en la garganta al nombrarlo.    - cumpla su mayoría de edad estoy segura que casi todos saben lo sucedido pero esas acciones siguen a mi nombre lo que en mi poder tengo el 20%, mi voto vale doble -

- ¿Qué? - chilla mi madre molesta. - Eso es imposible no estaba enterada de eso - 

- Señora Sander esto es legal de echo acá esta su firma y la de la señora Miller que avalan  estando de acuerdo con esto - dice Andrey muy seguro y agradecía que este acá porque las caras de varios es épica Allison 1 - Enemigos 0.

- Muy espantoso usar esa artimaña con algo tan doloroso como la muerte de Dylan ambas familias siguen mal por la perdida - el viejo se hace el compungido nunca le importo nada. - Creo que no hay que tener en cuenta estos papeles -