Amores Traicionados

CAPITULO 2

Desperté mas temprano que de costumbre y salí de mi casa acompañada de una de mis criadas Dafne, ella no era muy discreta por lo cual trataba de mantenerme callada cuando iba con ella, tenia que visitar a muchas personas hoy, así que  entre mas pronto lo hiciera seria mejor,  no pasaría la vergüenza y me alejaría de las habladurías primero, durante toda la noche no logre conciliar el sueño, tenia que pensar en algo y era una locura pero era mi única opción debía ingresar al convento aunque eso me constara la libertad, sabia que la madre no me podria negar la oportunidad, después de todo era una chica muy católica y cumplía con mis obligaciones con la iglesia como correspondía

Cuando llegue al convento, la madre tardo un momento en recibirme

- Charlotte – dijo la madre superiora sorprendida al verme – que haces aquí muchacha hoy no te toca servicio en la capilla

- No madre – dije apenada – podría hablar con usted

- Ven, pasa hija – dijo, su despacho era frió y lujubre con muebles de madera pintado de blanco y con un cristo enorme en la pared – dime que necesitas Charlotte

- Madre quiero unirme al convento, lo he pensado y he descubierto que mi vocación es servir al señor, por favor permítame ser parte de esta comunidad

- Pero Charlotte de que hablas tu muy pronto te vas a casar, no tienes cabida en esta comunidad

- Madre he decido cancelar el compromiso debido al inmenso deseo que tengo de unirme a ustedes por favor no me lo niegue, puedo ingresar mañana mismo si me lo permite o adaptarme a las normas que usted quiera 

- Pero Charlotte – su mirada reflejaba la confución que le causaba mi petición, ademas no dudo que yo misma pareciera confundida en ese mismo momento 

- Madre por favor - estaba dispuesta a suplicar de ser necesario 

- Esta bien, pero debes hablar con nuestro consejero espiritual, el padre Josep si el te acepta y dice que estas preparada para comenzar tu noviciado entonces así será, pero él decide que no, debes respetar dicha orden 

- Gracias madre – dije con una sonrisa en mi rostro, no era la afirmativa que deseaba pero era una esperanza y en ese momento eso seria lo que me salvaría de ser la burla 

Me dirigieron a la capilla en Padre Josep estaba dando una misa, así que espere a que este terminara, la madre le había notificado mi decisión me miró sorprendido pero sonrió y me guió a su despacho mientras el comenzaba a acomodar sus cosas, no me miro en el fondo sabia que el no aprobaría mi decisión pero tendría que respetarla después de todo era una buena cristiana y cumplía con mis obligaciones no tendría por que oponerse

- Hija dime quieres que hablemos en confesión o solo como platica - sabia que trataba de persuadir el tema

- Solo como platica padre – le dije, no tenía tiempo que perder – padre quiero unirme a la iglesia

- Dime por que estas tomando esta decisión, te conozco desde pequeña hija, eres buena cristiana, cumples con las normas de la iglesia pero nunca has tenido vocación de religiosa, ademas tus planes eran otros

- Padre deme una oportunidad , puedo convertirme en una de las hermanas mas devotas de estas congregación, por favor deme la oportunidad de servir

- Pero hija casándote también es una manera de servir a Dios, dando el ejemplo de buenas cristiana también se puede servir al señor, no necesitas estar encerrada siendo monja para servir 

- Padre – dije en tono de suplica – permitame ser una novicia

- No Charlotte, por el momento no, puedo ver en tu cara que algo te angustia, pero te niegas a decírmelo, pero te ayudare – dijo, mi cara fue de decepción – vas a cumplir con las normas como si fueras una novicia pero no lo seras hasta que yo apruebe, me escuchas, solo sera un retiro espiritual

- Si – dije con una pequeña sonrisa - eso me basta de momento

- Puedes ingresar mañana mismo y utilizaras la vestimenta de novicia, seguirás nuestras normas pero seras novicias hasta que yo lo apruebe esta bien, pero hija estoy segura de que este no es tu lugar 

- no lo se padre, pero de momento esto es todo lo que necesito, muchas gracias por ayudarme 

- Bien ahora ve y prepárate, te veré mañana durante la mañana para que ingreses y que quede claro hija te lo permito por que veo en tus ojos tu alma atormentada, no por que crea que eres capaz de llevar los hábitos

Las palabras del padre se habían quedado grabadas en mi cabeza, era tan transparente para que el padre supiera mi dolor con solo verme a los ojos, bueno eso ya no importaba, ahora el me había dado una oportunidad de ingresar a un refugio del cual nadie podría sacarme, ahora tendría que enfrentar a mi padre y estaba segura de que el no me permitiría lo que estaba pensando pero el debería de entenderme 

Salí rumbo a casa con mucho más ánimo, debía preparar mis cosas pero no tendría que llevarme casi nada después de todo el convento me proporcionara todo lo que necesitara, ahora tendría que darle la noticia a mi padre y tratar de tranquilizarlo para que se de cuenta de que esto es lo que quería hacer, era malo mentir pero no podía dejar que mi papa se recayera en su salud por una preocupación que yo le diera

Cuando llegue a casa al primero que vi fue a mi padre el cual sonrió al verme creo que salio a tomar aire se veía un poco desmejorado, pero mi padre era un hombre fuerte se que no me dejaría sola en mucho tiempo y que por supuesto todo estaría bien, supe que quiso retar a Albert y yo lo tenia que evitar después de todo si el no deseaba casarse conmigo, no había razón para obligarlo, de lo contrario lo único que ganaría seria su odio 

- Pequeña – dijo mi padre mientras abría las brazos para recibirme – donde estabas metida te busque toda la mañana, pero nadie supo darme razón de donde te habías metido 

- Fui  al convento - pude ver como la sonrisa de su rostro se desvanecía, parecía enfadado y tal vez decepcionado 

- Por dios Charlotte, sigues con esa tontería –  papa sonó un poco molesto – mi cielo si quieres casarte yo te conseguiré si es necesario al príncipe heredero para que te cases con el, pero por favor desiste de esta tontería, no soportaría ver como tu hermosura de marchita en ese horrible lugar 

- Papa – dije seria – yo no me quiero casar con nadie, si acepte la propuesta fue por que su familia te presto algo de dinero, me vi obligada a aceptar, pero ahora me siento libre para tomar una decisión por mi cuenta 

- Pero princesa – dijo en tono de suplica – por favor, te lo ruego, piensa bien las cosas 

- No insistas papa ya tome mi decisión, pero no te preocupes, solo me aceptaran de momento para un retiro espiritual, eso no significa que este cambiando de opinión, solo que me puedo tomar el tiempo que necesite para meditar 

- esta bien, cuando ingresaras - me dolía verlo con el animo caído, pero de alguna manera tenia que hacer que respetara mi decision 

- mañana, antes del medio día, iré a empacar mis cosas, pero por favor ya no insistas en que cambie de opinión - sin mas que decir le di un beso en la mejilla y me fui a mi recamara 

Subí a recoger mis cosas, bueno a acomodar mis habitación mejor dicho por que no me llevaría prácticamente nada, pero bueno eso no importa, mama debe estar planeando la boda de Jane tal parecía que no le afectaba esta situación y tal vez ella tenia por que tomar tan enserio yo siempre dije que amaba a Alberto  y si es así pues debo ser feliz si el es feliz