Tenía sudor frío recorriendo cubriendo mi cuerpo, necesitaba salir y tomar aire, vi si tenía una llamada perdida pero no tenía nada, solo vi una notificación de candy crush al igual que la hora, eran las 11:30. Pasaron bastantes horas desde que llamé a Kai y Touka me llamó. Necesitaba tomar algo de aire. Así que salí de la cama, tenía la ropa de esta mañana, agarré mi teléfono, un poco de dinero y lo lleve todo a mi bolsillo trasero de mi jean, me puse la sudadera verde azulada que Kaneki había dejado aquí hace bastante tiempo y salí de mi casa
Empecé a correr sin destino por las calles vacías de Tokio, tenía lágrimas en mis ojos, deje salir a algunas, pero me maldecí por haberlo hecho. Trataba de tragar el nudo de mi garganta pero me era imposible. Y mientras corría, aturdida tropiezo con algo o alguien. Pero me agarró del brazo suavemente para no caer al piso.
-Eso hubiera sido un golpe muy fuerte. ¿Estas bien?- dijo el chico mientras me incorporaba y recuperaba el sentido.
-Sí, estoy bien, gracias- dije, pero no lo mire a los ojos, solo tenía su mano sosteniendo mi brazo.
-¿Qué haces a estas horas por aquí?- no preguntó tan enfermamente como todos los adultos borrachos que pasan, sino más bien preocupado.
-Salí a caminar, pero ya voy de regreso a casa.
-Uh...- masculló curioso el chico.- linda sudadera- sentí como estiraba sus comisuras de los labios formando una sonrisa.
Quería correr de nuevo, pero antes de hacerlo mire a los ojos al chico, era un chico como de mi edad bastante atractivo, con ojos avellana y un pelo café desordenado, y esa sonrisa tierna le iba muy bien. Tuve suerte de que no fuera un borracho violador. La verdad si me atrae... pero borré ese pensamiento cuando recordé a Kaneki.
-Gracias.
-¿Estas bien?- sacó su sonrisa tierna de su rostro.
Él notó mis lágrimas...
-Sí... me lastime un poco, pero estoy bien- mentí.
-No veo ninguna lastimadura, no caíste al piso.
-Me torci el tobillo, me duele bastante...
El sonrió de nuevo, al ver que no era nada grave.
-Oh... - tomó una pausa antes de volver a decir algo- Vaya... eres demasiado hermosa para llorar de esa manera.
-¿Me estás lanzando piropos?- dije con cara de poco amigos, era otro idiota que cree que las mujeres son un juguete.
-No, es solo que me sorprende. Seamos sinceros- señaló con la barbilla a una chica bastante atractiva con un vestido llamativo y corto por el otro lado de la calle- tú eres más hermosa...
Esas palabras me hicieron sacar una torpe sonrisa, estaba olvidando a Kaneki cada vez más, probablemente él ya me olvido por una barbie perfecta, yo no soy perfecta, hay miles de razones para abandonarme. Mire el piso decepcionada de nuevo.
-¿Sucede algo?- preguntó preocupado
-Absolutamente nada. Tengo que irme- me solté de su mano y salí corriendo de nuevo.
-¡Espero encontrarte de nuevo!- gritó detrás de mí. Pero no me voltee ni respondí nada.
Esta vez me decidí a donde iba a correr, estaba corriendo rumbo al cementerio, justo en donde enterré a mis padres, y justo cuando quise entrar la puerta estaba cerrada, me moleste mucho, pero simplemente trepé la reja, una vez dentro recorrí un largo trayecto hasta una esquina, en donde había un árbol de cerezo apenas floreciendo, en los costados de ese árbol se encontraban mis padres, demasiado alejados de las otras tumbas, pero era el lugar más bonito del cementerio.
-Hola, papá, mamá. Hace mucho que no los vengo a visitar, lo siento demasiado, es simplemente que estoy ocupada, de hecho, les conseguí un yerno, o algo así, sé que me lo prohibiste hasta que tuviera 30 años- reí por esas palabras llenas de nostalgia- pero ya soy una mujer...
Muchos recuerdos me invadieron mi mente llena de recuerdo y tristeza junto la nostalgia que se mezclaba con lágrimas.
-Papá, tú me habías dicho que jamás los abandonará, a Ryuhikari, pero lo hice, se que te he decepcionado, pero no pude quedarme ahí, seguí lo que me había dicho mamá... pero tal vez era lo mejor para mí, ya lo veras. Y mamá, no me arrepiento de haberte hecho caso, de hecho- reí irónica por lo que iba a decir- el yerno que había mencionado antes, es muy guapo, pero no sé si me ama en realidad, hace mucho que no lo veo, pero espero poder volver verlo.
Un escalofrío pasó por mi cuerpo, el frío de la noche era más intenso cada vez.
-Los extraño mucho. De verdad- pero ese fue el momento en el que mi corazón se congeló, ¿por qué mi padre me dijo que me quedara y mi madre que me fuera...?
¿Mi madre vio el asesino? Ella fue la que estaba más conciente ¿El asesino era alguien de Ryuhikari? ¡¿Por eso me dijo que me fuera?! Sabía que no eran las palomas. ¿Pero quien fue de Ryuhikari...? ¿Takeshi? Suspiré con el corazón hecho un ovillo. Me limpie mis lágrimas y caminé lejos de la tumba de mis padres.
Chiyoko Fujibashi, Hiroko Takehira y muchos otros nombres tallados en la lápida me hicieron un nudo en el estómago, sobre todo esos dos nombres en las lápidas no tenían nada sobre su fecha de muerte y ninguna frase conmemorativa. En cambio había un tumba con muchas flores, que egoísta de esas familias, tal vez fueron criminales, pero la familia es la familia, regresé a donde estaba el árbol de cerezo y arranqué dos ramas pequeñas, di una reverencia de disculpa al árbol, sé que no es muy agradable haberle cortado una parte de él y la puse en esas tumbas.
Salí del cementerio volviendo a saltar la valla. Me dirigí a la tienda 24 horas más cerca y saque un café frío de las máquinas de afuera, y al primer sorbo mi teléfono sonó, esta vez saqué el teléfono y miré atentamente el nombre de quien me llamaba; Mi idiota favorito. Brillaba en letras grandes y blancas en la pantalla de mi teléfono.
Conteste, con una sonrisa en mis labios por el nombre que le había puesto hace mucho tiempo.
-¿Kai?
-Te mandare por mensaje la dirección y la hora exacta en donde estarán, apresúrate.- y colgó
A los pocos segundos me llego la dirección y la hora , miré detalladamente el mensaje, su plan empezaba en 5 horas, lo suficiente para detener a las palomas de detener el plan de Aogiri, me apresure a tomar mi café y salí corriendo hacía mi casa. Ya allí, me vestí con ropa de combate, negra claro y la máscara que solía usar en Ryuhikari. Y salí de mi casa, y use mi kagune para llevarme la dirección que me mandó.
Me paré en un farol muy alto y alejado de donde estaban las palomas, viendo como llegaban sus camiones llenos de explosivos y armas. Y a lo lejos se podía notar una construcción en forma de hexágono.
-Con que esto es Cochlea...- susurré y me coloque bien mi máscara sobre la parte superior me mi cara.
Hola lectores, lamento si tarde demasiado son problemas personales, sé que no viene al caso pero ¿Army's ya vieron el nuevo video de la versión japonesa de Blood sweat and tears? No por nada pero me dió una hemorragia nasal nivel 8 junto una especie de experimentación sobre la droga más potente que fuma Bit hit.
¡Recuerden, vota si les gustó! Un kokoro es un kilo de ayuda y nos vemos hasta la otra, chau! Por cierto; #YoongiIsPerfect
Ahora sí.
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Maravillosos Psicópatas [Kaneki y Tu]
Фанфик-Te odio- murmuré enfadada, mirando a otro lado, esperando a no encontrarme con sus ojos grises. Arqueo las cejas mientras se cruzaba de brazos. -¿Me odias?- preguntó indiferente. -... no... Los personajes y parte del trama son especialmente del...