-Jae...Jaebum- Titubeo al pronunciar su nombre. Me siento tan confundida por su sorpresiva visita, ni siquiera entiendo cómo puede haber llegado a mi departamento.
- ¿Cómo sabes donde vivo?- Fueron las primeras palabras que salieron de mi boca, pero él se negó a contarme.
-¿Estabas llorando?- Suelta de la nada y yo abro mis ojos sorprendida secando todo rastro de lágrimas.
- Eso creo que no es importante en estos momentos ¿qué haces acá?- Insisto y el aclara su garganta.
- ¿Puedo pasar?- Pregunta desde el marco de la puerta y asiento algo tímida, me muevo para que pueda pasar y luego cierro la puerta detrás de él.
Ingresa y observa el lugar inspeccionándolo con la vista, algo bastante incómodo debido a que tengo demasiadas fotos junto a Yoongi colgadas por todas partes.
-¿Quieres un café?- Le pregunto algo nerviosa y él acepta. Me dirijo a la cocina y pongo el hervidor mientras toma asiento en el sofá color negro que decora mi departamento, mueve sus pies algo nervioso y juega con sus dedos intentando calmarse.
Lo observo y me vuelvo algo torpe al saber que está tan cerca. El ambiente es tan denso que podría cortarse con una navaja mientras mi cerebro no ayuda mucho ya que hace que miles de cosas invadan mi mente, intento actuar "normal" a pesar de no saber que hace él aquí.
Lo observo de reojo y noto que recorre el lugar con su mirada, en un momento se detiene en un punto fijo, levantándose de su lugar y caminando hacia la pequeña biblioteca que arme con mis libros favoritos, toma uno en específico y sonríe.
-Este es el libro que te dió Youngjae cuando te fuiste a Busan ¿cierto?- Exclama mientras me lo muestra. No logro divisarlo a esa distancia y me acerco hacia donde él estaba. Lo veo y está en lo cierto.
-Si, tienes razón. Ese es el libro que Youngjae me obsequio hace años- Sonrío al recordar algunos momentos buenos que pasamos en Seúl. Sin darnos cuenta ambos nos encontramos sonriendo inmersos en esos recuerdos, pero al notarlo ambos desviamos nuestra vista y mi garganta carraspea para poder aclarar mi voz. Me dirijo a la cocina y tomo el café ya preparado entregando la bebida a mi inesperada visita.
No sé que hace acá, pero quiero averiguarlo. Es por eso que me siento frente a él y lo observo fijamente mientras toma un primer sorbo de café.
-Gracias, está delicioso- Dice sonriendo amable y le sonrío de vuelta.
-__(Tn) he venido, ya que necesito pedirte algo- Comienza a decir y mi teléfono empieza a sonar.
Lo observo y es Yoongi, lo miro asustada y me muerdo las uñas del nervio. No sé si contestar estando él en mi departamento.
-¿Es Yoongi?- Pregunta y lo miro asustada asintiendo.
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El Príncipe Azul...No Existe #3 [FINALIZADA]
FanfictionLa última temporada de un triángulo amoroso donde nada es tan blanco y nada es tan negro.