Cruce de miradas [JiKook] 2T: Decisiones.

.Corazón criminal.

Luego de varias semanas de práctica, los chicos se estaban preparando para el próximo concierto, pero el día antes de dar su presentación, algo hizo preocupar a Jimin. El mismo se dirigía hacia la entrada del departamento, iba directo hacia la dirección de los casilleros donde se colocaba la correspondencia, pero antes de siquiera dar un paso más, se detuvo en seco, ya que una persona encapuchada se encontraba justo frente al casillero de Jungkook.

—¡Oye! ¿Qué crees que haces?

La persona, la cual por su complexión física parecía una mujer, salió inmediatamente corriendo. Jimin comenzó a perseguirle, hasta que en un momento, la joven intentando mirar si continuaban siguiéndole, se dio la vuelta, dejando ver en su rostro un barbijo con un corazón y el nombre de Jungkook, además de sus cabellos largos y rubios, al ver esto Jimin se detuvo, era inútil seguir ya que posiblemente era una fan, por lo que la dejo irse. Sin más tardar retomo a los casilleros, yendo principalmente al de Jungkook. Una vez que lo abrió, con una cara de terror inmensa, se alejo rápidamente, luego dudando se acercó nuevamente, viendo detalladamente el contenido del casillero.

—¿Acaso...eso es un corazón...?

Luego miro hacia el fondo del mismo, y allí pudo notar letras de revistas pegadas.

—"Tu corazón será mío, por las buenas o por las malas..." ¿Pero qué clase de maldita enferma haría algo así? No puedo dejar que vea esto—dijo para luego alejarse unos centímetros.

—¡Oh! Jimin, ¿también viniste por el correo? Me hubieras dicho— dijo Jungkook, acercándose por la puerta principal.

—Maldición...— susurro, para luego ponerse de espaldas contra el casillero—.  ¡Kookie! ¡Mira! ¿¡Qué es eso!?— gritó señalando para la dirección contraria a donde estaban.

El menor rápidamente se dio la vuelta, dándole la oportunidad a Jimin de cerrar el casillero y luego correr hasta él para así poder abrazarle por detrás.

—Yo no veo nada— respondió inocente.

—¿Sabes? recordé que necesito urgentemente unas maquinitas para afeitar, ¿me harías el favor de comprarlas por mi?— dijo dándole dinero.

—Pero el correo.

—Yo lo retirare, ahora ve— dijo empujándole.

—¿Sucede algo?— preguntó mientras se daba la vuelta.

—Para nada, ahora ve— respondió, despeinándole.

—Está bien, en seguida vuelvo— dijo volteándose, pero mientras empezaba a caminar, Jimin recordó a la extraña de la mañana, la posible causante de esa horrible acción, ¿y si andaba suelta por ahí? Jungkook debía estar fuera de peligro hasta que el pudiese hablar el tema con alguien más.

—¡Jungkook! ¡Espera!

—¿Qué sucede? ¿Te olvidaste de algo?— preguntó mientras volteaba.

—Recordé que tengo maquinitas en mi cajón, no hace falta que compres, pero necesito otro favor— dijo juntando sus manos y poniéndolas frente a su cara— ¿Me prepararías un café con leche?

—Si quieres te compro de la cafetería que está a un par de cuadras.

—¡No! Digo...quiero uno hecho por ti, por favor. ¿Sí? 

—Está bien, te estaré esperando arriba.

—Gracias.

Una vez que Jungkook desapareció tras las escaleras, Jimin automáticamente se dio la vuelta, y pudo ver como la sangre se escurría por afuera del casillero, dándole escalofríos. En seguida tomo su teléfono y se comunico con Namjoon, pidiéndole que bajara, y que sea lo más disimulado posible.