Avoiding Feelings. ||Terminada||

An idea not ideal

{Justin}

—Jay llegará a Boston mañana o no lo sé, pero envié con él tu regalo de cumpleaños.

Sonrió—¿Mi regalo? Qué lindo eres.

—Cállate—rodee los ojos aparentando molestía—No le creas si te dice que ayudó en ello porque él no tenía idea hasta hace unos días.

—¿Fue algo que me hiciste?

—Es en lo que he estado trabajando todo este último año, zoquete—respondí obvio.

Abrió su boca y volteo hacía un lado, seguramente Trix estaba por ahí—¿ESO de lo que me decías, es para mí?

—Ya sé, soy increíble—sonreí altanero.

—Nah, aún ni lo veo, no cantes victoria, compadre—rió—¿Y por qué no vendrás tu? ¿no piensas nunca venir aquí? Pensé que volverías con Jay y papá—se quejó.

Acomodé la tablet bien contra mis piernas mientras me recostaba de la cama y negué—Tuve que quedarme otro par de días porque Jayden metió la pata con uno de los socios.

Estúpido Jayden.

—¿Jayden metió la pata? ¿desde cuando Jayden mete la pata?

Resoplé—No lo sé, hombre, está ciudad como que tiene algo que te hace hacer tonterías—me encogí apretando mis labios.

Brend levantó una ceja—Ya veo, ¿Qué tonterías te hizo hacer a ti?

—No hablaba de mi—negué rascando mi cuello.

Eso no lo convenció y decidió preguntar más al respecto, justo como temí que haría.

No quería hablar sobre todo ésto que estaba pasando, justamente no con él porque, a veces creo que es capaz de hasta saber lo que pienso, y mis pensamientos son un desastre últimamente, sabemos eso. Luego dirá cosas que son ciertas y me preguntaré cómo fui tan imbécil de no saberlas yo mismo...

—¿Ah no? Pero dijiste que la ciudad tiene "algo que te hace hacer cosas estupidas", si, eso dijiste—levanta su mentón para mirarme desde arriba, porque la tablet o laptop que está usando se encuentra en sus piernas, supongo.

—"Te hace" no a mi—hice una mueca—Solo hablaba de Jayden, Brend.

—Oh, vamos, deja de jugar, ya abriste la boca y ahora tienes que escupirlo todo sin hacer que te saque las palabras, hermano—rezongo arrugando su cara con descontento—¿Quién más hizo una tontería? Tú haces muchas, no es al...

—Cállate—gruñí.

—Uh, bien, definitivamente no estás de humor—rió irónico—Llámame cuando...

—No—lo interrumpí soltando un bufido—Solo sigue hablando.

Si, estaba de mal humor pero quería hablar, no quería quedarme mirando la televisión y perderme en mi confusa mente o terminar llamándola, porque siento que caeré en la tentación de aquella propuesta indecente que me hizo. Esa propuesta que es justo como la que yo le hice hace meses atrás en casa de sus padres y no aceptó hasta días después en el jet de mi padre. La diferencia ahora es que está vez fue ella quien lo preguntó y fui yo quien se negó.
Como cambian las cosas en tan poco tiempo ¿eh?
Y no creo que tengamos la oportunidad de viajar otra vez en algún avión para terminar aceptándola.

Brend ladeó su cabeza—Muy bien...—comenzó un poco inseguro—Cuéstame como ha estado todo con Amber, entonces.

Parpadee—¿En serio?