Capítulo 17.

3.2K 96 4
                                    

-Te conviene hacerme caso-. dijo y se marcho de mi habitación como si no hubiera pasado nada.

¿Y ahora que hago? ¿Se lo cuento a Susi? ¿Hablo con los gemelos? Si es que no podía tener un mes tranquilo.

Necesitaba dormir, había sido un día bastante duro, primero los Jesúus y luego lo de Julio. No sin antes escribir una página en mi diario como hacia semanalmente.

Querido diario:

Ya estoy en Sevilla, en una casa bastante bonita y grande. No había venido con intención de encontrar a un chico, pero he encontrado a tres, mejor contarlos como dos. Jesús y Dani, los gemelos, hoy me han jugado una mala pasada pero algo ahí dentro que me sigue impulsando a quererlos, me gustan mucho los dos, y no quiero hacerles daño, pero si estoy con uno, jodo al otro. El "tercero " se hace llamar Julio, pero no estoy muy segura de que se llame así ni de que tenga nuestra edad, ya que me ha echo prometer dejar de hablar a los gemelos, cosa que veo imposible. Susi es una amiga, la única que tengo aquí, ha sufrido mucho, y sale con Julio, cosa que le va ha hacer más daño, no se cómo decirselo ya que se enfadara, por desgracia no decides de quien te enamoras, y eso lose mejor que nadie.

*Narra Jesús*

Me había visto, con esa chica. Sinceramente veo imposible estar con ella un día bajo la playa y decirle cuanto le quiero. Cojerla de la mano y presumir delante de mis amigos, levantarme antes que ella y escribirle esa frase de la película que tanto le gusta "¡Buenos días princesa!". Me sentía mal por la chica del parque por que la estaba utilizando para poder olvidarme de ella.

Decidí ir a su casa, nesitaba verla y decirle lo mucho que la quería, y por supuesto necesitaba un beso suyo diciendome que todo estaba bien, que ya me había perdonado.

Entré en su casa, en la llave de emergencia que tenia debajo de la planta al lado de la puerta, abrí la puerta y subí corriendo hasta su habitación. Estaba dormida, con un boli en la mano y un cuaderno en su regazo, sentí curiosidad por leerlo.

¿De verdad le gustaba? ¿Yo? ¿Y mi hermano? Yo estaba seguro de una cosa, iba a pelear por ella hasta el final, y mi hermano tambien, pero esta vez voy a ser yo quien gane.

Me senté al lado de su cama, le quité el boli y el cuaderno y los dejé en la mesa que tenía al lado, me tumbe a su lado y la abracé.

*Narra ______*

Me desperté. ¿QUE HACIA JESÚS A MI LADO? ¿ME ESTABA ABRAZANDO? Mierda, mierda, me quedé dormida escribiendo el diario, seguro que lo ha leido. ¿Ahora qué? ¿se lo contará a Dani?.

Amor compartido.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora