Amor compartido.

Capítulo 23.

Decidí darle una sorpesa a Jesús.

*Narra _____*

Bajé a la cocina a preparar el desayuno, para mi y para Jesús que seguía durmiendo en mi cama.

Corrí las cortinas de la ventana que había en la cocina y a lo lejos me pareció ver a Dani, aunque no estaba muy segura. Le subí el desayuno a la cama, supongo que esa era mi sorpresa.

Me senté en el borde de la cama esperando a que se despetara. Al poco tiempo alguien llamó a la puerta, asique baje corriendo a abrir.

-_____, ¿Podemos hablar?

¿Que hacia Dani aqui? Lo que me faltaba.

-Eh bueno, pasa.

-Te queria comentar algo sobre mi hermano, hoy no lo he visto todavía, me han dicho que esta con una chica y bueno...

-¿Y?

-Esta jugando con tus sentimientos, solo te aviso.

-*Suspiré* ¿y tú? ¿tu no estas jugando con mis sentimientos? eres un falso, Dani. Enfin, vete de mi casa porfavor.- Dije sin darle importancia a lo que me dijo, ya que yo era esa chica.

-¿A que viene eso? ¿ahora que he hecho yo?.- Me decia Dani, como si no supiera nada *Idiota* pensé.

-Dani, largate.- Y le cerré toda la puerta en la cara.

Subí corriendo las escaleras hasta llegar otra vez a mi habitacion, al entrar vi que Jesús ya estaba despierto.

-Buenos días wapeetona!

Me agarro de la cintura y me sento en la cama.

-Acaba de venir Dani, me ha dicho que estabas con una chica y que estabas jugando con mis sentimientos; no se que pasa que cada vez lo estropea más.

-Dani no es así, lo conozco.

-En fin. ¿Desayunamos?

-Mejor porque no ¿besayunamos?

-¿Qué? jajaja.- Le dije, y se lanzó a mis labios, besandome con amor y pasión, pero a la vez suave y con dulzura.

Le seguí el beso, hasta que ya no podia aguantar más, necesitaba aire y me separe de Jesús, lo miré y el me miró a mí. Nos empezamos a reir como tontos.

-Alfinal la sorpresa me la has dado tú a mí.- Le dije con una sonrisa en mi cara, hacia mucho tiempo que no sonreia de esa forma.

-¿Que?.- Decia Jesús tambien muy feliz.

-Pues veras*miré hacia donde estaba el desayuno que le habia traido* te habia preparado el desayuno y te lo habia subido hasta aquí, como agradecimiento y como una pequeña sorpresa, pero nada comparado con ese beso tuyo.- Le miré con cara picarona. Y otra vez nos hechamos a reir.

Las mañanas así, eran las mejores.

-Que pinta tiene este precioso desayuno, hecho por mi princesitaa, vén, vamos a desayunar, que tengo hambre jajaj.- Me dijo y le hice caso.

Nos sentamos bien, en la cama y desayunamos juntos.

Bajamos a el salon en cuanto terminamos. Nos sentamos en el sofa y llamaron a mi móvil.

-¿Mamá?

-_____, ya hemos denunciado a Julio, van a encargarse de el.

-Gracias Mamá.

-¿Quien era?.- Preguntó Jesús algo preocupado.

-Tranquilo, era mi madre.

-¿Y si nos vamos a la piscina? Hace tiempo que no vamos.

-Vale.

Subí a por el bikini y a por la toalla mientras Jesús iba a su casa a buscar todas sus cosas. Me llegó un mensaje desconocido.

*Desconocido*

Ey, ¿No piensas venir a despedirte? Gracias atí voy a estar un tiempo encerrado.

Tenía mas que claro que era Julio, me calme un poco y salí fuera, ya que Jesús me estaba esperando.

Puse la toalla en el suelo y empecé a recordar todo lo que habia pasado en esa piscina, no pude evitar que me cayera una lagrima, entonces empece a pensar, Igual Dani no se merece todo esto, ¿Y Susi? Necesitaba hablar con ella.