"¿Cómo conseguiste mi nuevo número?"
Es la respuesta que rápidamente envío, mas los minutos pasan y no obtengo ningún texto de vuelta.
-¿Pasa algo?- cuestiona Sangwoo-. No paras de ver tu móvil desde hace un rato.
-No pasa nada- me acerco a él, pues sin darme cuenta me había distanciado.
-Aww, ven aquí- envuelve sus brazos alrededor de mi cuerpo, proporcionando con ellos una capa de tranquilidad que me hace olvidar la preocupación anterior.
Me dejo acurrucar disfrutando el calor de su cercanía y, pensando como esta podría ser de la últimas veces que esté junto a él.
Sacudo la cabeza alejando esos pensamientos.
-Tengo sueño- me acerco a su cara.
Sangwoo pone cada una de sus manos en mis mejillas y besa mi frente, para después pasar a cada uno de mis párpados y por último a mis labios. En un beso delicado que, poco a poco, se transforma en uno más apasionado.
Mis manos van hasta sus hombros, en una caricia a lo largo de sus brazos. La manos, antes en los lados de mi rostro bajan a mi espalda, impulsándome a acercar nuestros cuerpos.
Sin dejar de besarlo, me muevo hasta sentarme sobre él, mientras, a su vez, Sangwoo se recuesta sobre el sofá.
Rápidamente él empieza a acariciar mi abdomen por encima de la ropa, mas en un parpadeo mete sus manos debajo de mi camiseta. Un escalofrío me recorre por el contacto, e imitándolo, toco la extensión de su torso, sintiendo en cada toque los músculos bajo mis manos.
Sin previo aviso Sangwoo se levanta del sofá, conmigo en sus brazos, cargándome tal princesa.
-Vamos arriba- corriendo sube las escaleras, sin que yo represente una molestia para él.
Una vez en su habitación, me deja sobre la cama, y empieza con el juego de besos y caricias nuevamente.
Tomando valor, me aparto de él, para sacarle la camiseta. Mi respiración casi se corta al verlo así frente a mí. Estiro el brazo hasta alcanzarlo.
Hincado sobre la cama llevo mis manos desde la base de su pantalón hasta sus anchos hombros, para después enlazarlas detrás de su cuello. Mi boca reclama la suya, él me la entrega sin reserva, y comenzamos un beso que nos lleva a ambos a otro nivel de emoción.
-Mi turno- Sangwoo susurra en mi oído. Empieza a levantar mi camiseta, sacándola con facilidad por mis brazos levantados.
Bajo la mirada un poco avergonzando, pero él levanta mi cara y deja un montón de besos por toda ella.
La cama se hunde bajo una nueva carga sobre ella. Es Sangwoo, acostándose sobre mí, sostiene todo el peso en sus brazos, lo que, a la vez lo deja indefenso. Con una sonrisa pícara, paso las yemas de los dedos, lentamente, por todo su cuerpo, desde el cuello hasta donde se encuentra el botón del pantalón, el cual le queda bastante apretado. Me detengo un segundo, no muy seguro de seguir.
-Hazlo- dice como si lo estuviera torturando con la espera.
Desabrocho el pantalón, mas sigo sin atreverme a tocarlo más allá de la ropa.
"No seas un cobarde ahora. Has estado esperando mucho por esto, ¿no es así?" Me digo a mí mismo.
Permito a mis manos hacer lo que tanto desean, tocando y repasando cada centímetro inexplorado de su cuerpo. El chico sobre mí cierra sus ojos disfrutando de la sensación que jamás creí poder provocar en él.
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Matando Viviendo |Killing Stalking|
FanfictionYoonbum es un chico con algunos problemas que lo llevan a realizar acciones que otros tildarían de raras, para él solo son muestras de amor. A pesar de su extraño comportamiento, alguien lo acepta tal y como es. Le enseña a sonreír mostrándole las p...