No Juegues en las Fauces de un Lobo

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Mis tres obsesiones

Mi historia comenzó en junio 22. Debía entrar al grupo de bailarines Serene's, en mi escuela de danza. Se llama Serene's porque hay una chica llamada Serene que es la mejor bailarina de todo el mundo. Bueno, no exageremos. Es muy buena bailarina y siempre baila con Brieg Orci por todo el mundo. Y muchas veces han ganado. Muchas.
En fin, aquí estoy, apretando los labios mientras observo a varios bailarines de mi clase así como de otros lugares audicionar para Serene's. Asusta. Asusta porque ahí está el profesor que tanto se ve en la televisión que acompaña al grupo. Todo debe ser demasiado perfecto. ¿Y si no entro? Mi carrera estaría acabada y moriría de hambre debajo de algún puente sucio y tendría algún amigo sin casa como yo. Estoy tan asustada que hasta estoy preguntándome por qué estudie danza.
Pero antes de que pueda arrepentirme y salir de la clase, me llaman por mi nombre.
Dios, no.
—Eh... — susurro y el profesor Thompson eleva una ceja. —Estoy... enferma...
—¡Usted no me hará rogar! — me alega, entonces yo decido pararme y ponerme en posición en medio de la clase.
Bien, yo soy hermosa, puedo hacerlo.
Alguna canción de Ellie Goulding comienza a sonar, como ya lo estaba haciendo tantas veces antes de mi y comienzo a bailar la coreografía de la canción.
Odio que tengamos que bailar siempre lo mismo ya que siento que no podríamos expresarnos igual pero a pesar de eso nunca cambio la coreografía y la sigo a la perfección. Arriba, abajo, movimiento sexy...
Mi corazón se acelera cuando veo a Brieg Orci afuera de la clase, en la calle, fumando un cigarrillo y viendo hacia adentro.
No sé qué me pasa después.
Simplemente me vuelvo extraña. Comienzo a bailar con más éxtasis, mis movimientos siendo mejor y más liberados.
No sé, tal vez me avergüenza admitirlo pero quiero impresionarlo. Él no muestra ningún signo de impresión mientras fuma su cigarrillo pero puedo sentir que lo estoy haciendo bien. En mis huesos. En mi corazón.
Cuando acabo de bailar simplemente observo al profesor sonreírme y guiñarme un ojo y luego salgo de la clase, sonriendo ampliamente y aspirando aire con fuerza. ¡Qué idiota!
Doy un pequeño salto rápido y me topo con una chica con un café, que me frunce el ceño pero ni eso me hace quitar la sonrisa de la boca. Por un reflejo me miro y veo una sonrisa grandísima y me sonrojo al darme cuenta lo idiota que puedo verme.
Pero no me importa tanto.
¡Le mostré al fin a Brieg Orci cómo bailo! Es mi fantasía... y de todas aquí.
Te lo describiré.
Él es simplemente perfecto, fin de la historia.
Cada chica aquí quisiera bailar con él, ya que es tan sexy cuando baila. Exuda sensualidad cuando baila, su mirada se vuelve carnívora y todo él...
Suspiro y luego sonrío. Espero haber entrado. Sé que nunca bailaré con él, ya que él tiene a Serene pero el simple hecho de que estaremos en una misma habitación y ganaré un concurso hace mi mente volar alto.
Ojalá entre, ya que aquí está mi vida.

Esa noche con mi mejor amigo Daniel, estoy jugando póker y tomando chocolate caliente. Él me dice que tiene problemas de nuevo con su prometida y yo lo escucho, más opción no me queda.
Te contaré un secreto. Daniel tiene 22 años y es mi mejor amigo desde que me pateó el brazo cuando tenía 12 años. Estuve enamorada de él toda mi vida. Y siempre pensé que seríamos la pareja perfecta, ya sabes, mejor amigo y amiga... él me conocía de todo. Sabía todo acerca de mi y escuchaba cada historia que yo contaba acerca de mi y mis padres. Me entendía más que a nadie. Y todo era perfecto en mi mundo; un día estábamos en una fiesta cuando me besó. Estaba borracho. Él simplemente me besó y luego yo me fui a casa. Al siguiente día hizo lo peor que pudo haber hecho en todo su universo. Me contó que tenía novia. Se llama Katheryn Dunne. Él no recordaba que me había besado, ni tampoco recordaba que yo le había dicho que estaba enamorada de él desde la escuela. Me dijo que estaba iniciando algo serio con ella. Y yo asentí y jamás le dije que nos habíamos besado. O que él me había dicho hermosa. Claro, yo creí que le gustaba y estaba enamorado de mi como yo de él.
Pero no era así. Él me veía como a su hermanita y yo no lo supe nunca. Eso fue hace tres años. Y como que poco a poco se me fue quitando. Aún me pregunto qué pasaría si me amara pero ya no tan fuerte como antes. Seguro lo sigo amando, de eso no hay duda, pero poco a poco se fue acabando esa obsesión y el sabor de sus labios fue desapareciendo hasta que encontré dos nuevas obsesiones.
Una de ellas es Brieg Orci, claro está, él seguro es crush de cada chica en la tierra con sus hermosos ojos y brazos fuertes. Y esa forma hermosa en la que se mueve, sensual y... y tan Brieg Orci. Sólo de pensar en eso, mis dientes agarran mi labio superior y los dedos de mis pies se aprietan.
—Ella me dijo idiota, Blair. A veces me cae tan...
Y otra de mis obsesiones es Bastian Reynolds.
Mi teléfono suena interrumpiendo las imágenes de Orci moviendo su perfecto sensual cuerpo al compás de la música y observo el número. Es el profesor Thompson.
—¿Hola? — Daniel niega con la cabeza hacia mi, ya que sabe que no he escuchado nada.
—Entraste, pequeña. Mañana es la primera reunión de Serene's en el teatro. Te veremos ahí a las ocho y cuarto de la mañana.