Mire a Jeff tratando de asimilar lo que había pasado entre nosotros y la canción. Él no decía nada pero con su mirada lo decía todo. Mire a mi alrededor y todos los invitados nos estaban observando expectantes. Genial, era lo que me faltaba. Mis ojos rápidamente viajaron hacia Alfredo, quién aún seguía en la esquina con su vaso en mano. Sus ojos literalmente estaban perforando los míos y al igual que los demás, estaba esperando por mi siguiente movimiento.
Volví mi visión hacia a Jeff y tome el único coraje que tengo.
—Necesito salir un momento.—Odie al mismo instante sonar tan débil. Sabía que todos me habían escuchado porque estaban todos aún en la espera de algo que contar después.
Estudio mi rostro tomando su tiempo. Y luego jugó con su mandíbula mientras pensaba en algo que decir.
—Tomate tu tiempo.—Fue lo único que dijo.
Asentí e inmediatamente camine hacia Alfredo, quién al solo verme camino en la dirección contraria hasta llegar a la entrada del departamento y finalmente salir al exterior.
Lo seguí tratando de que en segundos pudiera analizar el tema. Pero al momento de salir, Alfredo fue más rápido y hablo primero.—Estas libre.—Murmuro mientras botaba el vaso que antes tenía en mano.
—No entiendo.—¿Que se supone que quiere decir?.
—Es obvio, Ruth. Jeff está locamente enamorado de ti. Lo supe desde el primer momento en que los vi.—Se encogió de hombros sin ninguna gracia.— Y no quiero estar en medio de esto. No continuaré con esto, siento algo por ti, y por eso mismo me alejaré.
Solté una respiración que no sabía que tenía contenida. Escuchar aquellas palabras en voz alta lo hacía realidad. Siempre quise escucharlas pero nunca imaginé que fuera real. Y no podía negarlo y hacerme la tonta luego de esto. Después de lo que Jeff trataba de decirme a través de la canción, y ahora que otra persona me lo dijera, lo hacía definitivamente muy real. No podía dejarlo pasar. Pero aún que sabía que era cierto, no quería que Alfredo terminará algo que no alcanzo ni siquiera a empezar, al menos no de esta manera.
—No. Eso es imposible. Jeff y yo solo somos amigos.
Alfredo río con un tono de gracia poco creíble.
—Eres dulce, Ruth, enserio. Pero no puedes negar algo qué sientes. Todos allí adentro se dieron cuenta de la fuerte relación que sienten el uno hacia el otro. Todos saben...Yo sé qué sientes algo por él. ¿Como es que no te das cuenta?. El chico prácticamente te lo dice solo con mirarte. No quiero continuar con esto. Eres la chica más hermosa que conocí pero no quiero destruir una amistad o un amor que es más fuerte que nosotros.
No sabía si era una estúpida sentimental o era la situación tan repentina que me tenía sensible, pero de repente sentí mis ojos húmedos. No era así como quería que fueran las cosas. Alfredo era un buen chico, pero de cierta manera tenía razón. Fui una egoísta al tratar de tenerlo cuando en realidad sólo quería tener a Jeff. Intenté con todas mis fuerzas quererlo de alguna forma en que él merecía, pero no pude, nunca pude.
—Lo siento mucho. Yo...Yo no quería que esto fuera así. Realmente me gustabas. Pero tienes razón, no puedo negar lo que siento. Y siempre sentí cosas por mi mejor amigo. Pero también quiero confesar que eres un buen chico y que en algún momento si pensé quererte de alguna forma. Pero también sé, que mereces algo mejor. Gracias por todo el tiempo en que me hiciste feliz.
Asintió y me dio una sonrisa triste. Me acerque hacia él y lo abrace. No quería perder su amistad, pero sabía que era algo muy apresurado de pedir. Me devolvió el abrazo inmediatamente y susurro en mi oído.
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Un amor poco amistoso
Storie d'amoreRuth Lee y Jeff Wood son amigos de infancia. Ruth es una chica alegre y centrada. Se dedica a vivir la vida de una perspectiva más sana. Todo lo contrario a Jeff, quien no hace más que vivir a su manera, con desordenes y sin ningún objetivo claro...