31.

2.2K 173 8
                                    

Justin's Point of View.

Salí de la habitación luego de haber dejado a la bebé en su cuna y sonreí. Esa pequeña bebé es mi hija. Me preocapaba la parte económica, pero quitando eso me sentía muy bien. No estaba en mis planes tener dos hijas prácticamente al mismo tiempo, pero no podía volver el tiempo atrás.

Suspiré y me encaminé hacia el ascensor. Descendí hacia la planta baja y salí hacia exterior para tomar un poco de aire. De paso llamaría a Beth.

Me senté en una banca que se encontraba allí y tomé mi celular. Marqué el número de Beth y lo pegué a mi oreja esperando que respondiera rápido, tenía muchas ganas de hablar con ella para saber como se encontraba ella y nuestra bebé.

-¡Justin! -Exclamó Beth con alegría cuando respondió y sonreí.

-Hola bonita. -Respondí. -¿Cómo te encuentras? -Pregunté.

-Bien. -Respondió. Sin verla podía sentir que estaba sonriendo. -¿Tú como estás? -Preguntó.

-Bien preciosa. -Respondí. -Tengo algo que contarte. -Dije y llevé mi mano a mi nuca.

-Déjame adivinar. -Dijo cambiando el tono de su voz y apreté mis labios. -¿La bebé de Jenna es tuya? -Preguntó.

-Así es. -Respondí y sentí mis ojos arder. Era tan raro.

-¿Te han mostrado el papel? -Preguntó. -Lo siento por preguntar eso, pero quiero asegurarme de que no lo hayan inventado. -Dijo y levanté mi mirada del suelo.

Allí fue cuando mi cabeza hizo un click. Yo no me hice ningún análisis con la niña como para saber si Riley era mi hija o no. Jenna y la madre aprovecharon de verme tan emocionado que me mintieron en mis narices sin que yo me diera cuenta.

-Mierda. -Respondí pasando la mano por mi rostro y me agarraron ganas de llorar. -Mierda y más mierda.

-¿Qué sucede cariño? -Preguntó preocupada.

-Me han dicho que Riley era mi hija y yo les creí porque estaba concentrado en la niña. Pero ahora recuerdo que no me hice ningún análisis. -Expliqué y fruncí el ceño al oír una carcajada. -¿Qué es tan gracioso? -Pregunté.

-Que te hayas olvidado que no te hiciste ningún análisis, lo siento bebé. -Se disculpó y tomó una profunda respiración. -Sube y reclama eso. Pero primero averigua con algún doctor. -Dijo y asentí.

-Eso haré preciosa, gracias. -Dije.

-No hay de qué. -Respondió. -Llámame luego, ¿si? -Preguntó.

-Claro. Oye, ¿cómo está Madison? -Pregunté antes de colgar.

-Por ahora está durmiendo, estuvo inquieta hasta tarde. -Respondió y sonreí.

-Bien, ya me voy preciosa. Recuérdale que la amo. -Dije.

-Lo haré. -Rió. -Adiós. -Saludó.

-Luego te llamo preciosa, adiós. -Saludé y corté la llamada.

Guardé mi celular en mi bolsilo e ingresé al hospital sintiendo como la sangre me hervía. Tuvieron el descaro de engañarme con una cosa tan importante comoe esa y yo fui un idiota que les creyó.

Subí hacia el piso donde estaba Jenna junto a su bebé, la cual ahora seguía sin saber si era mía, y comencé a buscar a algún doctor en el sector.

-¡Señor! -Exclamé cuando vi a un médico caminando por el pasillo y comencé a trotar hacia él. 

-¿Si? -Preguntó algo extrañado.

Rain ➵ j.bDonde viven las historias. Descúbrelo ahora