Capitulo 24

946 63 6
                                    

-Imposible. No.. no puedo estar muerta, no.. no... - la desesperación se apodera de mí y siento que me tiembla todo el cuerpo, quiero gritar, quiero llorar pero mi cuerpo no reacciona. No siento nada. Me toco, mis manos están muy frías. ¿Estoy muerta?
Me acerco a Isaac y toco su frente, pero él no reacciona, solo sostiene mi... cadáver en sus brazos y llora desconsoladamente. ¿Que sucedió?
- ¡ISAAC! ¡NO! ¡NO ESTOY MUERTA POR FAVOR!- grito tratando de que me escuche, pero no lo hace. Mi voz perdió vida...

Pasaron horas. No se cuantas exactamente. Isaac dejó de llorar pero se quedó tieso aun sosteniendo mi cuerpo, esta mirándolo fijamente. Traté de tocarlo o que me escuche pero es absurdo. Nathan se fue, desapareció, no se a donde fue. Siento mucho enojo. Voy a matarlo.
Estoy sentada frente a él. ¿Que me pasó? No debería haber muerto, no me merecía esto. O tal vez si... la verdad es que no lo se. ¿Que hago? ¿Estaré en este especia de limbo para toda la eternidad? ¿Observaré como sobrellevan mi muerte y trataré hasta que mueran de que me escuchen?
Quiero a mi papá. Tengo miedo. No quiero estar así. No quiero.
Un muy familiar jeep aparece en la escena y siento como las lagrimas nublan mis ojos al ver que del vehículo salen papá, Stiles, Scott, Allison y Lydia. Todos parecen en shock, pero la cara de papá rompió cada parte de mi alma. 
Se acercó a mi cuerpo, Scott ayudó a que Isaac me suelte. Costó, Isaac gritaba que no quería soltarme, pero al final lo hizo. Papá no lloraba, no hablaba... y dudo que respirara. Estaba pálido, más de lo normal. Las lagrimas que llevaba en mis ojos luchan por salir pero es imposible.
-No esta muerta- susurra Scott y todos voltean hacia él. Corro rápidamente y me coloco frente a él, en sus ojos se veía confusión y también olía a extrañes.  No.. no lo estoy... no estoy muerta.
-Si lo está... su cuerpo está frío... esta muerta- susurra Isaac con voz temblorosa y varias lágrimas caen de sus ojos. Quiero abrazarlo y decirle que aquí estoy pero... ¿estoy en realidad aquí?
-No- responde con firmeza Scott -Concéntrense. Usen por completo el oído. Tiene pulso, débil, pero lo tiene-
Isaac y Papá se concentran. Una sonrisa sincera aparece en el rostro del segundo y presencio que algunas lagrimas amenazan con salir.
-Esta viva- susurra y se para conmigo en brazos -Vamos... hay que ir con Deaton-

El camino fue extraño. Nadie hablaba, pero todos olían a alivio. ¿Alivio? ¿Porque? Tal vez no este muerta pero... ¿porque puedo ver mi cuerpo? No.. no estoy muerta... pero tampoco estoy viva.
Isaac no dejaba de acariciar mi cabeza. Papá lo dejaba. Quería sentir sus caricias, me hacen falta, pero no puedo. No siento nada.
Llegamos y Deaton nos abre con rapidez la puerta de su veterinaria. Me recuestan sobre la mesa de metal. En otras circunstancias sentiría frío, pero no ahora.
Deaton solo me examina, camina de allá para acá, prueba cosas, habla con sigo mismo, lee un libro extraño. Todos estaban inquietos. Allison sentada al lado de Lydia, papá movía la pierna de forma persistente, Stiles se "arreglaba" el cabello, Scott ayudaba como podía a Deaton e Isaac caminaba de un lado a otro en la habitación.
-Derek...yo... nunca pasaba hace años- susurra el doctor y papá parece perder brillo en los ojos, sabiendo que se venía una mala noticia. -Esta... en una especia de coma... su espíritu esta luchando, tal vez hasta este aquí escuchando, pero su cuerpo.... su cuerpo no es nada sin el... No se que sucedió,pero su espíritu se separó de su cuerpo... ella es quien debe encontrar el camino devuelta-
Me paralicé. ¿Yo? No se que esta sucediendo, tengo miedo... tengo mucho miedo, no puedo sola, no puedo.
-¿¡ESTAS JUGANDO!? ¿¡No puedes hacer nada!? ¡Haz algo! Es mi pequeña... mi pequeña- susurra papá y quiebra en llantos, nunca antes vi que papá llorara en público.
No. Esto no esta sucediendo. ¿Como vuelvo a mi cuerpo? No puedo sola. No me importa si no me escuchan, empiezo a gritar.
-¡Papá ! ¡Papá estoy aquí! ¡Papá por favor tengo miedo!- grito desgarrada, me duele la garganta, no puedo parar de llorar. Me desespera saber que no me escuchan, estoy sola, nadie puede oírme. Quiero ayuda. Tengo miedo. No quiero morir... no quiero.

Hija de Derek HaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora