Capitulo 30

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Las quejas incesantes de Archie estaban poniéndome los pelos de punta. Amaba a Archie y sentía que debía protegerlo ante cualquier peligro, pero cuando se le metía en la cabeza algo era imposible hacerle cambiar de opinión, y las quejas que venían con ello no eran algo agradable ni algo que ayuden con mi corta paciencia. Mientras esperábamos en la comisaría, sentados en un asiento debajo de la cartelera repleta de papeles de personas desaparecidas (entre ellas, cuatro papeles con mi rostro) comienzo a darme cuenta de mi situación.
Me había ido corriendo aquella vez, sin ver hacia atrás ni un segundo. Había dejado a todos aquí. Mi padre había perdido rastro de mí justo cuando acababa de asesinar a quién alguna vez fue mi mejor amigo. Yo había logrado, en gran parte, poner esa escena de mi vida atrás pero nunca me detuve a pensar con claridad si mi padre lo había hecho. ¿Cual iba a ser su cara cuando me vea? ¿Estaría feliz de verme, o seguiría aterrado y decepcionado? No me consideraba capaz de aguantar que mi padre no pueda verme a los ojos, pero ya me encontraba allí y no volvería a correr. No esta vez, ya había madurado y debía enfrentar las cosas de frente.

-¿Como crees que se tomara tu padre que me tienes a tu lado?- habla Archie sacándome de mi trance y lo observo a los ojos. Me quedo en completo silencio, ya que eso era otra cosa que no tuve tiempo de analizar. Yo era pequeña aún para tener un beta, sin embargo, ahí estaba. Aunque no me arrepentía de nada, salvé a Archie aquella noche y lo volvería a hacer.

Mi único arrepentimiento hacia Archie es haber cuidado de él con demasiada concentración y dedicación. Lo he protegido cuando era innecesario protegerlo, y es por eso que él se había enamorado de mí. Me generaba ternura como me veía pero también me rompía el corazón cuando sufría por ello. Era un chico muy dulce y leal y se merecía mucho más en su vida. Por mi parte, no estaba segura de estar lista para experimentar ninguna clase de relación amorosa. Sacando el hecho de que nunca pude sacar al maldito Lahey de mi cabeza, debía primero recomponerme por completo para poder pensar en alguien más y en comprometerme a salir con alguien.

-No lo se Archie, solo esperemos, ¿de acuerdo?- contesto aunque el beta parece no estar conforme con la respuesta dada.
Luego de unos minutos mi paciencia ya comenzaba a llegar a su fin. Mi padre no aparecía y comenzaba a dudar de si lo haría.
-Okay levántate- le indico a Archie y ambos nos acercamos al joven oficial que, dulcemente, nos había llevado hasta allí -Disculpe, se esta haciendo tarde y tenemos mucha hambre. De verdad, ¿es esto necesario?

-Lo siento mucho pero es el protocolo que debemos seguir, usted es menor de edad y es necesario llamar a sus padres o tutor legal. -contesta él evitando cruzar contacto visual con Archie, y nos indica que tomemos asiento otra vez.
Al voltear, quejándome por lo bajo y pensando seriamente en escaparme, noto como la entrada de Scott McCall al establecimiento parece inquietar a Archie. Este se pone nervioso y se esconde detrás mío, observando hacia el piso y sudando. Lo observo extrañada.
-¿Que sucede?
-Ese chico.... e-es un Alpha- murmura mi pequeño beta con inquietud y traga saliva. Observo como su mandíbula se tensa y me desconcierto por completo. Vuelvo a posar mi mirada en Scott, pero esta vez es él quien me observa a mí con asombro. Dos segundos después se encontraba parado frente a mi, con la boca entreabierta, si saber que decir.

-Hola Scott- murmuro algo tímida y avergonzada, sin saber muy bien que decir ni cómo actuar ante él. Al tenerlo de cerca confirmo lo que Archie había mencionado, Scott McCall era definitivamente un Alpha. Eso me llenó de preguntas. -¿Donde esta mi padre? ¿Por que eres un Alpha?

-Wow wow wow- mueve las manos Scott y procede a tomarme del brazo, aunque Archie le gruñe y esto hace que la quite enseguida. -¿Quien es él? ¿Donde has estado? Derek té buscó por todos lados _______, ¡desapareciste! Muchas cosas han pasado desde que desapareciste.
Observo a Archie. No era el mejor momento de presentaciones.
-Pues... ya estoy aquí, ¿de acuerdo? Necesito que mi padre venga aquí, me quiero ir.
Scott suspira, podía oler lo estresado que se encontraba. Él asiente con la cabeza y me mira.
-Le dire al padre de Stiles que te deje ir, él entenderá.- me observa por un momento y sonríe un poco -De verdad me alegra que te encuentres bien.
Me encojo en el lugar sin saber que hacer con aquellas palabras y me limito a sonreírle y calmar los nervios y celos de Archie. Cuando Scott se aleja, largo un suspiro y observo el piso. En el fondo me alegraba ver su rostro y ver que estaba bien, aunque aún me comía la incertidumbre. ¿Por que Scott era un Alpha? ¿A quién había asesinado?
-¿Quien es él?- gruñe Archie y se cruza de brazos enojado -Le permitiste que te tocara, no le permites a nadie que te toque, solo a mí... ¿por qué?
Ruedo mis ojos con algo de molestia, no estaba de humor para lidiar con los celos infantiles de mi beta. Le explico brevemente quién era Scott y luego de unos minutos, este último aparece y nos indica que podríamos salir de allí.
-_______ espera- me toca el hombro antes de que nos vayamos y me observa a los ojos -¿Podemos hablar un segundo?

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-¡No lo entiendo! ¿A donde vamos?- masculla Archie con irritación en la voz y esta vez mi única respuesta es una mirada hostil de mi parte. Este al verme se calla y sigue conduciendo.
Mi cabeza estaba funcionando a mucha velocidad, intentando asimilar todo aquello que Scott me había resumido en tres minutos. Mucho había pasado, en eso estaba en lo correcto. Lo más importante por el momento era el hecho de que Stiles había sido "poseído" por una especie de zorro maligno, kitsune o algo, no logré entenderlo muy bien. Estaba haciendo destrozos y había lastimado a personas. Se alimentaba del caos, y por ende, lo estaba creando. Me costaba mucho imaginarme aquella escena, al dulce y sarcástico Stiles generando caos y lastimando gente.
Por otra parte, mientras Scott demostró ser un auténtico Alpha debido a sus fuertes convicciones y su fuerza de voluntad, sin tener que haber asesinado a nadie, mi padre era ahora un beta debido a que usó su energía para salvar a su hermana. No podía entenderlo, mi padre siempre fue tan fuerte, mucho más fuerte que yo desde ya. Y ahora ya no. Mientras mi padre renuncio a ese poder para salvar a Cora, yo había asesinado a mi mejor amigo y me había fugado. No podía evitar sentirme mal, culpable por no haber estado allí para él. Para todos ellos.
Y si bien intentaba engañar a mi mente, desviar los pensamientos solo a mi padre, una sola pregunta lograba distraerme y fijarse. ¿Donde estaba Isaac? ¿Que sucedió con él? ¿Estaba bien?
Ahora mismo estaba yendo otra vez hacia la bóveda, pero decidí hacer que Archie tome otro camino para pasar por la lado de la escuela, solo para ver si podía cruzarme con alguien en el camino. Alguien con algún rostro familiar. Pero pasamos por al lado del establecimiento y no reconocí a nadie.
-Archie.... puede que conozcas a mi padre ahora- le comento y juego con mis dedos de forma nerviosa, manteniéndolos sobre mi regazo -El... no es un Alpha, ya no. No le va a agradar esto, así que intenta no hablar tanto. ¿Si? Están en una situación complicada...-
-Si, lo escuché- admite y ante mi mirada enojada se encoge de hombros y agrega -Te olvidas que también soy lobo y puedo escuchar cosas.

Llegamos a la bóveda luego de unos minutos más y bajo de forma apurada. Ya no me importaba toda aquella incertidumbre que sentía al estar sentada en la comisaría, solo necesitaba abrazar a mi padre. Necesitaba verlo y necesitaba estar allí para él, como él lo estuvo tanto tiempo por mí. Tomo la manija para abrir pero Archie me detiene. Lo observo.
-¿no hueles?
Confundida, pongo suma atención a mi instinto de olfato y puedo oler a desesperación. Ese olor fuerte provenía de adentro del lugar. Mira a Archie.
-Preparate- le comento.
-¿Para que?
-Posiblemente para luchar.

Hija de Derek HaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora