d i e c i s é i s

12.5K 400 112
                                    

Hoy empezaría a trabajar en la empresa de mí padre, necesitaba hacer todo lo posible por demostrarle a Harry, lo que realmente era. No podía creer todavía lo que me había dicho Chloe, espero que sea todo una farsa, porque sé que a Harry lo lastimaria este plan que estoy haciendo. Pero era necesario.

Durante toda la semana lo estuve ignorando, no contesté ninguna de sus llamadas ni respondí ninguno de sus mensajes, vino varias veces a mí casa, pero me encerraba en mí habitación o me iba durante en tiempo que él estaba. Me había hecho un cambio de look, ya lo necesitaba había recortado mí pelo, ahora me llega a un poco más abajo de los hombros y me lo aclaré, ahora estaba rubia en las puntas, como un degradé. También quise cambiar mí ropa, Matt y Devon me acompañaron, y luego Jackson se unió. Ahora era más provocativa mí ropa, lo que volvió loco a mí padre al verme entrar por la puerta.

Tenía que vestirme de manera profesional, y para eso tenía a Stella que me estaba ayudando con mí vestuario.

—Creo que esto funcionará —dijo sonriendo.

Un top negro bastante lindo con tiras de cola de ratón y una pollera tubo negra también, y no hay que olvidarse de los estiletos negros que hacían que se completara mí perfecto vestuario. Planche mí pelo para que estuviera más lacio y me coloqué el maquillaje necesario para este vestuario.

Abracé a Stella —Me ayudaste mucho —.

—No hay que agradecer, me encanta hacer esto, es mí trabajo, además debes de apresurarte seguro Matt te espera abajo.

—No —negué —hoy iré en mí auto.

Tomé todo lo necesario y salí volando de mí casa, tenía que llegar en 30 minutos pero el tráfico siempre se ponía pesado.
Primero tenía que ir a una junta de mí padre, quiere que conozca a todos sus empleados y socios para ir ambientando me al lugar.

Al llegar, estacione el auto y salí entrando por la puerta principal. Saludé a las chicas de recepción, que se sorprendieron al verme ahí. No era normal que yo estuviera.

Tenía que tomar el ascensor, ya lo estaba tratando con unas pastillas que me dio mí papá, él tenía lo mismo, y eso le ayudó. Toqué el piso 30. Al llegar me encontré con toda la gente trabajando, eran muchos, Cameron estaba ahí, al verme vino a abrazarme.

—Por favor, hacía mucho que no te veía —dijo sonriendo y sin dejar de abrazarme.

Reí —¡Ay es verdad! Pero tranquilo me veras todos los días, bueno la mayoría.

—No lo puedo creer preciosa, me alegro mucho, luego iremos a tomar un café ¿te parece? —pregunto interesado.

—Puede ser —sonreí de lado y me retiré de ahí. Debía llegar a la junta y eso era en 3 minutos.

Necesitaba mostrarme de la forma más madura posible, dejaría de lado ese comportamiento de nena de doce años, a pesar de ser todavía una adolescente, necesitaba este cambio... O por lo menos, por el momento.
Entré por la gran puerta negra, sentándome en una de las tantas sillas, ya había varías personas, pero no tantas como lo había imaginado.

Se me acercó el gran amigo de mí padre, el Señor Smithsonian, si bastante raro el nombre, pero yo le decía Smith.

—Que grande estás muchacha —dijo abrazándome, era más como un tío, porque era muy amigo de mí padre, lo que lo conocía desde que había nacido.

—Gracias tío Smith —reí —¿Como está Lauren?

—Bastante bien, anda con dolor de cadera, nada grave.

Seguí conversando con él, era un hombre bastante amable, y tierno con su grande panza y barba blanca. Cuando era pequeña pensaba que era Papá Noel.

Daddy's kitten' |h.s|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora