Daddy's kitten' |h.s|

t r e i n t a y d o s

Me había levantado emocionada, hoy al fin saldría a un conocido pub con mis tres locos amigos. Harry seguía sin aceptar. Quería que saliera con nosotros para que despejara un poco su cabeza, últimamente ha habido irregularidades en la empresa y eso lo tenía desganado.

Realmente lo entendía, las últimas tardes me las pasaba con él, tratábamos de ver por donde comenzar, él simplemente señalaba a Aiden, aunque por una parte tenía razón, desde que él llegó a la empresa los problemas habían comenzado. Pero no quería darle la razón por si al final no tenía razón.

A pesar de mis suplicas sus palabras fueron claras: "Emily no puedo salir, debo estar enfocado en esto" y a pesar de mis caprichos dijo: "Te amo, pero a veces eres insoportable" dicho con una sonrisa de lado y dejando un pequeño beso en mi nariz.

Acto que me hacía morir.

En esta semana no lo había visto mucho, y realmente lo extrañaba. A pesar de que se encontraba a tan sólo veinte pasos de mi casa, no he podido salir mucho de esta. Stella, últimamente había estado atrás mío. Sabía que debía de tener cuidado por la conversación que había escuchado que tuvo con mi padre, trataba de hacer lo posible para llevarme bien con ella y levantar la menor sospecha posible, pero estaba tan pendiente de mi, que se le pasó de largo mi padre. Luego de su discusión, por mi, se habían mantenido un poco alejados, a pesar de que ambos están metidos en sus empresas, estas últimas semanas ella se encontraba trabajando en casa. Lo cual era malo.

Hoy debía juntarme con Matt para producirnos y luego pasar a buscar a los demás para irnos al pub. Tome un bolso y metí al menos dos outfits, y obviamente mi neceser. Al bajar las escaleras, tomé las llaves y me fui hacia la entrada de casa.

—¿Dónde crees que vas? —escuché detrás de mi.

Giré mis ojos y me di vuelta con una gran sonrisa falsa.

—Me parece que no tengo que darte explicaciones ¿o si? —cruce mis brazos.

—Debo avisarle a tu padre que sales, ¿con quién lo haces?

—Me parece que estoy lo bastante mayorcita como para dar explicaciones a alguien. —mire mis uñas — no lo hago con mi padre o madre, no lo haré contigo.

—¡Merezco un poco de respeto como mujer de tu padre y dueña de esta casa! —

Su mano golpeó fuertemente mi mejilla, mi cabeza se movió ligeramente hacia la izquierda. No lo podía creer.
Con la palma de mi mano toqué mi mejilla que se encontraba adolorida, la miré por unos segundo con mucho rencor y sorpresa. Ella me miraba asombrada por lo que acababa de hacer. Tocó su mano sin poder creerlo, yo tampoco hubiera imaginado que ella me golpearía.

Trató de acercarse a mí pero rápidamente me alejé dando tres pasos hacia atrás. —Ni se te ocurra volver a tocarme —dije claramente.

—Emily... yo-yo n-no quería hacerlo —dijo acomodando su pelo desesperadamente.

—¡Métete tus palabras por el trasero zorra! —dije yéndome como había dicho que haría. Tome mi bolso que se encontraba tirado y fui directamente a mi auto.

Una vez subida en él, pude suspirar y verme en el pequeño espejo que guardaba acá, se encontraba una marca roja con sus dedos marcados. Si que tiene buena mano la bruja. Seguramente quedaría marca. Luego cerré el pequeño espejo y comencé a ir directamente a la casa de Matt. No fue largo él trayecto y eso lo agradecía, algunas veces me sofocaba estar adentro del auto estando sola. Matt vivía en la misma zona que yo, por lo qué habré tardado unos 15 minutos en llegar. Luego de bajar, agarrar mis cosas y cerrar el auto, me encamine hacia a la casa de Matt. Era grande y simple, nada que ver a Matt.