TE JURO QUE VOLVERÉ A VERTE (Gemeliers)

CAPÍTULO 23

*Narra Cristina*

Hablo animadamente con mis primos, no los veía desde el verano y los echaba muchísimo de menos.

-Eres una mala amiga.- la fulmino con la mirada.- Sabías que venían y no me has dicho nada.

-Era una sorpresa.- ríe Andrea sarcásticamente.- No me mires así.

-Ya nos ha dicho lo de la fiesta de cumpleaños de los gemelos.- dice Marta.

-Te ayudaremos si lo necesitas, los dieciocho no se cumplen todos los días.- interviene mi primo riendo.- Y más si son de los gemelos.

-Joder, Jesús tiene que...

-¡Cris!- una voz masculina interrumpe mi frase a unos metros de distancia y me giro.

Veo la cara que se le ha puesto a Jesús cuando ve quiénes están detrás mía.

-¿Marta?- pregunta dudoso.- ¿Alberto?

-¡Jesús!- gritan los dos al unísono.

Mis dos primo se miran sin saber qué decir y se acercan a él para darle un fuerte abrazo cuando los ojos del gemelo mayor contactan con los míos.

-¿Los conoces Cris?- pregunta al separarse.

-Mmmm...- miro hacia todos los lados.

-No, se los acabo de presentar yo.- me corta Andrea.- Pasábamos por aquí y nos hemos encontrado con ella.

-Íbamos a visitarte ahora, queríamos darte una sorpresa para tu cumpleaños pero ya...- sigue Alberto.

-¡Sorpresa!- sonríe su hermana.

Los tres vuelven a reírse y hablan entretenidos de éstos últimos meses que no se han visto.

-Menos mal...- ruedo los ojos y suspiro.

-¿Ahora también soy una mala amiga?- pregunta Andrea sarcástica y le pego un pequeño empujón.

-¿Vamos dentro?- digo segundos después en voz alta.

Todos asienten y entramos en el Starbucks.

-No te he hablado apenas.- comenta Jesús detrás mía depositando un beso en mi mejilla.

-No pasa nada.- sonrío y miro hacia mis primos los cuales están con Andrea en la primera mesa que han encontrado libre.- Son muy majos.

-Lo son.- asiente y la chica del mostrador nos pasa las bebidas.- Cóbrate también el de ella.

Le doy las gracias y nos disponemos a ir hacia la mesa donde están todos y al sentarnos comienzan a transcurrir varios temas.

-¿Entonces quién es esta chica tan guapa? No nos habías dicho nada.- dice Alberto terminando la conversación que hace minutos habíamos empezado.

-Es una amiga como otra cualquiera.- dice seco.

Miro a Jesús y le da otro sorbo al batido de chocolate desviando la mirada hacia cualquier rincón del local.

Sus palabras me han dolido, ya no sé ni lo que somos pero yo diría que amigos solamente no. Me molesta mucho que se refiera a mí con ese nombre delante de la gente porque no es del todo verdad.

Pero... ¿En serio me ve una amiga como otra cualquiera?

-Yo creo que me tengo que ir, tengo que hacer cosas.- digo levantándome de mi silla algo incómoda.

-¿Ya?- pregunta mi amiga.- Todavía no te has terminado el cappuccino.

Cojo la bebida y pongo la pajita entre mis labios dando un último trago fingiendo una sonrisa pero ella me mira raro.