VG|¿Quién diría que un simple intercambio de teléfonos cambiaría de tal forma la vida de estos dos seres?.
Aunque contando con la suerte que tiene Valeria todo puede pasar.
Acompáñame a ver esta triste historia.
➳Historia completamente mía, prohibid...
Dormí como un bebé en mi cama nueva, y desperté pasado el mediodía.
¿Que esperaban?, si me acuesto casi a la media noche echando chismes con Paola no pretenderán que madrugue.
Fui directo a mi baño personal a hacer lo mio, sí, personal.
Luego corrí hasta la cocina porque olía a panquecas, vaina pa buena.
- Chicos, su cumpleaños está cerca, ¿cierto?- habla Paola entrando a la cocina con su celular en la mano.
- Así es, el mes que viene finalmente tendremos 18 años- dice ahora Ángel con cara de triunfo.
- ¿Que les parece si vamos a un club?.
- A mi me parece una grandiosa idea, podríamos rentar una mesa en el club para que solo estén ustedes, John los llevaría y... ¿Valeria, estás bien?- pregunta mi madre preocupada mientras me veía, por más que intenté que la situación no me afectara lo hizo del peor modo, extraño a Mariana, extraño mi antigua casa, mi perro, extraño todo.
- Emm, si mamá, estoy bien, solo que extraño mi vida en Venezuela, pero lo superaré, tranquila- digo secando las lagrimas que ni siquiera sé cuando empezaron a caer por mi cara. Mi madre me abrazó fuerte.- con respecto a lo del club me encantaría, sería chévere salir.
- Hoy saldremos a recorrer la ciudad, así que comen y se arreglan para irnos- dice mi papá abrazándome.
Termino mis panquecas y voy a bañarme, me cambio con un simple jean y un sueter porque hace mas frio que ayer, unas vans y borralo.
Aprovechando que saldremos vamos a ponerle la línea a nuestros celulares.
Pasamos primero por el Cetral Park, una belleza total.
Luego fuimos a un centro comercial para la vaina del celular y luego nos separamos de mis padres para ir a comprar algo de comer.
Agradezco a dios que mis padres nos inscribieron desde pequeños en una escuela de idiomas y que los últimos años estuve en openenglish.
Dejamos de caminar en frente de un puesto de pollo frito, mejor dicho KFC.
Aprovechamos que no hay cola y pasamos directo, El chamo detrás de la caja nos regala una sonrisa y mira fijamente a Paola.
- A menos que se te halla perdido una igualita deberías bajarle dos a tu mirada loco- dice Ángel, yo empiezo a reir por la cara de confusión del chamo, este ahora está un poco avergonzado.
- Vamos a querer seis combos de tres piezas, preferiblemente muslos, siete raciones de papas fritas y seis refrescos medianos, mejor que sea coca cola, por favor y gracias- termina pidiendo Paola, nos sentamos en una mesa cercana al local y aprovechamos el wifi para usar nuestros celulares, total esto es el imperio #highclass.
Entro a instagram a entrepitearle la vida a la gente.
Y sobre todo encontré algo sumamente interesante.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.