Sentada en la mesa, la comida hiba a llegar pronto, cuando una escena de la tarde paso por mi mente... ella...
Esta tarde habia pasado por mi mente un instinto arrasador y apasionado.
El abrazarla por detrás fue la manera más sincera y sencilla de demostrarle todo eso que sentía. La calidez de su fría espalda era deslumbrante. Tener su cabello en mi rostro, sentir su perfume, olerla, olfatearla cual sabueso. Inhalar su perfume y sentir como mi pecho bajaba y subía detrás suyo. Fueron uno, quizás dos minutos o menos, pero para mi fueron eternidades.
En ese momento sentía la vibración de su agudo hablar en mi. Tomo mis manos y entrelazo sus dedos con los míos, como si de nubes se tratase. Como vapor, humo, niebla quizás...
Un ruido me saco de mis pensamientos, el timbre de mi hogar sonó y rápidamente fui a atender. Pague la comida y volví a la mesa.
Comí, lave y seque, pensando en esa sensacion. La de tu espada contra mi pecho.
ESTÁS LEYENDO
Poca Cosa
ŞiirPoca Cosa. Eso es lo que soy. Este es un recopilatorio de mis pensamientos, mis escritos, mi yo. Vuelco aquí lo que siento, pienso, vivo. Al leer esto estarás entrando en una pequeña parte de mi mundo. Conocerás una pequeña porción de todo lo que...
