Guardián Erótico

Cap 16: Por fin una cita.... en grupo

Antes que nada, hay algo que quiero decir: Gracias por las 1k leídas! Me siento muy feliz de saber que al menos toman en cuenta mi fic, siento ganas de llorar T.T 

No pensé que llegaría tan lejos con esta historia de Kuroko no Basket, pensé que moriría luego de 15 capítulos, pero luego de ver como se desarrolla, simplemente me es difícil terminarlo rápido. Quiero que se desarrolle lentamente y no dejar huecos en la trama, pues cada personaje tiene derecho a contar su historia. Además, se me ocurren otras ideas que podría ir agregando siempre y cuando no hagan que se pierda el hilo original. 

Les agradezco su constante apoyo, sin sus comentarios dándome ánimos no sabría como seguirla, porque a veces me dan buenas ideas n.n

Okey, mientras me seco las lágrimas de alegría, los dejo con el capítulo.

Disfrútenlo (esto se pondrá bueno)

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En los días siguientes, Kuroko estaba un poco más animado. Le hizo bien tratar de dejar ir el pasado, y Furihata estaba contento de saber que su amigo ya estaba haciendo un progreso. Por su lado, Kagami trataba de ser un poco más atento con él, procurando hacer que se olvide por completo de la molestia que surgió hace unos días, aunque él era el único que se preocupaba por eso. Lo invitaba al Magi Burger, iba a visitarlo a su casa después de clases y los fines de semana, e incluso llegó a invitarlo a una salida grupal con todo el equipo para ir a los juegos en su día libre.

Kise, quien veía todo desde la distancia, sentía mucha pena cuando Kuroko se emocionaba por una invitación de Kagami que terminaba siendo grupal.

- Kagami idiota – decía siempre entre suspiros – Kurokocchi quiere una cita, no una salida con todo el equipo.

- ¿Y por qué simplemente no haces que Kuroko lo diga? – respondió Aomine, quien estaba cansado de escuchar a Kise quejarse cuando no hacía nada.

- ¡No es lo mismo! – replicó - ¡Kagami se tiene que dar cuenta!

- ¡¿Bromeas cierto?! ¡El idiota no se dio cuenta de los sentimientos de Kuroko a pesar de ser más obvios que tu teñido! ¡¿Cómo rayos esperas que se dé cuenta y tome la iniciativa?!

- ¡Mi cabello no es teñido! ¡Es rubio natural!

- ¡A otro perro con ese hueso!

- ¡Ya paren los dos! – Momoi los separo con las palmas sobre sus narices, exasperada por tanto ruido – Este no es momento para insultarse o algo así, miren.

Los tres dirigieron la vista a Kuroko, quien terminaba de cambiarse después de la práctica. Kagami estaba saliendo ya de las duchas y lo único que le faltaba era su ropa. Entre sus cosas dentro de la mochila, tenía un par de entradas para un concierto de rock independiente que se iba a dar en Kioto, y a juzgar por su mirada inquieta sobre Kuroko y los nervios con los que agarraba sus cosas, parecía ansioso por querer invitarlo. Kise sonrió ampliamente al igual que Aomine, pues las entradas eran para dos personas nada más y en un concierto, cualquier cosa podía pasar.

- ¡Finalmente! – dijo Kise entre saltos y gritos - ¡Tendrán una cita!

- ¡Al fin Bakagami se pone los pantalones!

- Sí, es un alivio – dijo Momoi con una sonrisa – Pero será mejor que se apresure, pues las entradas son para este sábado.

La emoción que embriagó a ambos seres se desplomó con las últimas palabras de Momoi. Este sábado se supone que tendrían una práctica matutina, y si Kagami no invitaba a Kuroko ahora mismo, era imposible que fueran juntos ese día. ¡Ya era viernes, por todos los cielos!