Guardián Erótico

Capítulo 18: Aceptando un nuevo "hermano" parte 2

Hola!!! De nuevo, casi me paso con las palabras, pero de alguna forma lo logré :D

Ahora, algunas aclaraciones:

- Seiza: Es un término que describe la forma tradicional de sentarse de rodillas. 

- Escarabajo sagrado: para algunos este símbolo egipcio significa reencarnación. Es además el símbolo de Belcebú, "Señor de las moscas" (satanás). Si los satanistas lo tienen puesto, significa que tienen poder y es (según ellos) fuente de protección.  

- Hexagrama encerrado en un círculo: Es uno de los símbolos más potentes usados en los poderes de las tinieblas. Usado en los trabajos de magia. Se confunde con la estrella de David, sin embargo ésta estrella está dentro de un círculo. 

- Cabeza de cabra: La cabra cornuda es el dios de los brujos. Es el modo satánico de burlarse del CORDERO (Jesús). Similar a la cruz invertida. 

- Campos Eliseos: El lugar sagrado donde las "sombras" ( inmortales) de los hombres y mujeres virtuosos y guerreros heróicos han de pasar la eternidad en una existencia dichosa y feliz, en medio de paisajes verdes y siempre floridos, bajo el sol, por contraposición al Tártaro  (donde los condenados sufrían eternos tormentos).

Fuente (símbolos): https://centinela66.com/2010/06/21/simbolos-illuminatis-masonicos-satanicos-que-debemos-conocer/

Esas son todas las aclaraciones, disfruten la lectura n.n

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Los tres estaban siendo rodeados por el resto del grupo, y viendo que tenían las manos llenas, no había muchas posibilidades de ganarles sin salir muy lastimados. Huir tampoco era una opción, pues la carga que tenían no les daba mucha velocidad que digamos, y aunque la dejaran, lo más probable es que al primer movimiento los tendrían prisioneros, pues Kuroko estaba algo aturdido en el suelo y Kagami no soportaba la idea de dejarlo solo con aquellos matones. Parecía imposible salir sin necesidad de una pelea a manos limpia, y eso si ellos no tenían una navaja en los bolsillos o alguna otra arma aún más peligrosa.

Kise, al ver la escena, tuvo el impulso de hacer algo, pero ¿qué? Era invisible para le gente normal. Las únicas personas que podían sentir su presencia eran Hyuga e Imayoshi, y ellos no estaban ni cerca del lugar. Podría ir por Akashi, pero no estaba seguro de que llegaran a tiempo para socorrerlos. Se sentía tan impotente al no poder hacer nada, tenía ganas de llorar, pero la mano de Aomine sobre su hombro de alguna forma logró calmarlo.

- Está bien – dijo sin preocupación en el rostro – Él no tardará en venir.

¿Él? ¿A quién se refería con él?

- ¿Cómo puedes decir que está bien? Están a punto de ser golpeados y quien sabe que más cosas les harán esos tipos, ¡tenemos que hacer algo!

- Kise – Aomine seguía sin sentir ni la más mínima preocupación, así que se aseguró de sostenerlo por los hombros y cubrirlo con sus alas, para evitar que hiciera alguna tontería – Te dije que él ya viene, no hagas nada para estropearlo.

- ¿Por lo menos podrías decirme a quién te refieres?

No fue necesario, él solo se presentó en el momento más adecuado.

El chico de cara alargado iba a golpear a Himuro, pero una mano gigante lo agarró de la cabeza y lo jaló para atrás con mucha fuerza, elevándolo sobre sus pies. Todos miraron al dueño de la mano gigante y se encontraron con el rostro de enfurecido de Murasakibara mientras apretaba la cabeza del universitario como si se tratara de una bola de papel.