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La metáfora de Sirius.
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Era un sábado, el primer sábado de este año escolar para ser exactos. La nieve predominaba en los jardines del antiguo castillo mágico, lastimosamente los muggles no podían apreciar aquella belleza. Ellos sólo podían ver un letrero de no pasar y unas ruinas antiguas. Jane se sentía completamente afortunada de estar ahí; donde le dieron la oportunidad de conocer personas increíbles: sus amigos. Tal y como se narró al principio, era sábado por lo que significaba que la pequeña chica de Gryffindor con cabello pelirrojo tenía su primera cita, algo que le disgustaba al resto de los merodeadores. Ahora mismo se encontraba en la habitación de sus amigos, arreglándose.
- ¿Puedes repetir por qué no podemos ir? -preguntó un Remus haciendo un pequeño berrinche.
- Porque es MI cita, no de ustedes -respondió la chica terminando de aplicar el brillo labial sobre sus labios.
- Pero somos tus amigos -habló esta vez Sirius, el cual estaba igual o peor que Remus.
- Y los amigos deben estar en las buenas y en las malas... -el azabache se posicionó detrás de la chica, cepillando su cabello.
Jane lo miró divertida.
- ¿Cuando uno de ustedes estén procreando, el resto tendrá que estar ahí? -se giró la castaña mirándolos seriamente.
-Nunca hace mal un poco de ayuda...
- ¡Qué asco, Canuto! -le quitó el cepillo a James, dejándolo en su baúl y salió de la habitación dando un portazo.
Los merodeadores se miraron entre sí, como si se comunicaran telepáticamente.
Miraron a James.
- Tu capa, James. La necesitamos.
El mencionado sonrió maliciosamente y sacó de su baúl la capa de invisibilidad que los había ayudado tantas veces.
- ¿Y el mapa? -el más pequeño de todos los miró confundidos.
- Sirius, tu baúl -el chico de gafas le sonrió falsamente.
- James, tú lo guardaste.
- ¡No, fue Jane! -jaló sus cabellos azabaches-, el destino quiere que cumplamos esta misión sin el mapa... ¡Pues hagámoslo!
Los cuatro chicos salieron junto a la capa y sus permisos para salir del castillo. Le entregaron así los pases a su jefa de casa, obviamente ocultando la capa del azabache.
