La octava llave - Duelist Kingdom

Capítulo 29 - ¡Situación desesperada! Shadow of Temptation

La luz del día llegó más pronto de lo que esperaba y se levantó de la cama con un ligero quejido. Luego de un bostezo, restregó sus ojos para limpiar algunas gotas de agua y movió su vista en dirección del sillón morado frente a la cama, al otro lado de una mesa de madera, donde había dejado su mochila la noche anterior. Se acercó de forma lenta para tomar asiento y sacar su collar. 

Estuvo pasándolo entre sus dedos por un rato, jugueteando con el dije mientras su mirada permanecía en blanco hacia la ventana, hasta que emitió un resplandor que la sacó de sus pensamientos. Se había hecho tarde, por lo que se apresuro a guardarlo de nuevo y, aún con algo de duda, salió por la puerta dejando sus pertenencias.

No vio a nadie en el pasillo y pensó que todos los demás ya se habían ido a la Arena, así que aceleró el paso esperando alcanzarlos. Sin embargo, su suerte de la noche anterior decidió repetirse y cuando estaba a unos centímetros de la habitación de Yugi, la puerta se abrió de repente, esta vez por delante de ella, haciéndola detenerse abruptamente. Habría agradecido el hecho de que la puerta se abrió hacia el lado contrario y no se estampó contra la madera, si no fuera porque terminó chocando contra cierta persona.

—Lo lamento, ¿estás bien? —preguntó el Otro Yugi mientras la sostenía por los hombros.

(T/n) apenas consiguió asentir con movimiento entrecortado mientras intentaba esconder su cara completamente roja. 

—¡(T/n), por fin! Creí que tendríamos que ir por un balde de agua para despertarte.

—¡Jonouchi! 

Anzu reprendió al rubio con una mirada una vez salieron de la habitación del tricolor, al tiempo que (T/n) y el Otro Yugi se separaban. Jonouchi mostró en respuesta una sonrisa burlona a la castaña, quien prefirió ignorarlo y saludar a la joven. Honda y Bakura hicieron lo mismo mientras cruzaban la puerta hacia el pasillo.

—Bien, vamos —indicó el Otro Yugi cuando (T/n) respondió a todos.

Apenas dar un paso, la adolescente se detuvo cuando sus ojos captaron una leve sonrisa en el rostro del tricolor hacia ella antes de darse vuelta y avanzar; le pareció extraño viniendo de él, sobre todo porque esa sonrisa no parecía relacionarse con la escena anterior, incluso le daba la impresión de que era una sonrisa genuina de felicidad. Quizás se trataba de un simple truco de su mente conectado a sus emociones, aunque con suficiente realismo como para provocar un nuevo sonrojo.

Caminaron por los pasillos hasta una puerta que daba a un vestíbulo que, a su vez, llevaba al balcón inferior frente a la Arena.

—Yugi, Jonouchi, nos dirigiremos al balcón superior para animarlos —informó Honda. 

—Yugi, Jonouchi, esfuércense —animó Anzu.

Ambos asintieron luego de intercambiar miradas entre sí. Los espectadores continuaron avanzando rumbo a las escaleras del balcón superior, mientras que Yugi y Jonouchi se introdujeron por la puerta al vestíbulo, lugar donde Mai y Keith ya esperaban indicaciones.

Luego de un par de minutos, la puerta de los participantes, con un pegaso grabado en ella, se abrió para darles paso al escenario de Duelo. Apenas unos segundos después, una segunda puerta más alta, en el balcón contrario y detrás de una silla verde, reveló a Pegasus en compañía de Crocketts y Saruwatari. 

—¡Bienvenidos, orgullosos Duelistas, a este campo de batalla sagrado! —Pegasus levantó ambos brazos—. ¡La final del Torneo del Duelist Kingdom comenzará! ¡Aquel que sobreviva a este torneo recibirá un premio digno de un campeón! Y por supuesto, el ganador obtendrá el derecho de desafiarme.

—¡Ey! —Honda llamó su atención—. ¿Puedes contestar algo, Pegasus? ¿Qué ganará la persona que te derrote?

—El que me derrote a mí, el creador del Duelo de Monstruos, será reconocido como el "Rey de los Duelos" por Industrial Illusions. En otras palabras, el que me derrote obtendrá el título del mejor Duelista del mundo.