¿Qué pasaría si te dijeran que tus 7 primos vienen para el verano que entra?
Sí, siete. No dos ni cuatro. Siete
Amber, enloqueció al enterarse de aquella noticia; pues sabía que la llegada de ellos pondrían la casa patas arriba, con su maleducad...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Gracias señor, por darnos alimento y bebida en esta mesa aunque no la merezcamos. Bendice las manos que han hecho de estos alimentos y dales a los que no tienen para comer.
—Amen.
Dicho las gracias, comenzamos a comer del espagueti rojo que tanto nos gusta.
—¿Me pasan la salsa de tomate por favor? —pide Bridget. Alex se la pasa.
—¿Me pueden servir agua? —pide Henry y mamá le vacía agua de mango natural a su vaso.
La mesa familiar estaba constituida para sólo ocho personas. Tuvimos que bajar sillas de escritorios y traer las del patio para que todos cupiéramos completos en la mesa.
—¿Dónde se ha metido Emilia? —le pregunta de repente la abuela a papá y él se atraganta con el agua que estaba tomando—. ¿Qué? ¿A caso dije algo malo?
—En su oficina de trabajo —se apresura a responder mamá. Ella asiente pero al igual que todos nosotros, la abuela no se confía mucho de ello.
Al primero que veo con angustia es a Brad. Que aunque esté comiendo, su cara no señala la tranquilidad. Ally se para de la mesa y camina hasta donde la abuela. Ahí le susurra algo al oído. La abuela ríe tapándose la boca y asiente.
—Amber, ¿me acompañas? —alzo una ceja pero me encamino a ella.
Cuando las dos llegamos a la cocina, ella me tiende la salsa picante. Creo que ya sé a dónde va esto. La miro sonriendo con malicia. Luego, va hasta donde están las galletas con chocolate y ahí les pone canela de más. Aparta las que no tienen el exceso de canela en otro plato y de ahí vamos a la mesa nuevamente a comer.
—Dylan, Brad, ¿qué tal la escuela? —veo que la abuela está haciendo distracción para nuestra broma.
Ellos comienzan a platicar con la abuela sobre sus experiencias escolares y me río en silencio al ver que ellos caen como ratones en la trampa. Veo que las demás han empezado a platicar con cada uno de los chicos y aprovecho para vaciar la salsa picante sobre los espaguetis más cercanos que tengo. Empezando por el de Dylan, luego el de Brad. Termino con Alex y Liam y me paso de largo a Henry que él está entretenido con su comida.
Todos dejan de hablar y agacho la mirada evitando ser vista por los demás y que noten mi sonrisa. El primero a quien veo es a Alex que está en frente mío. Mastica de su espagueti con comodidad pero deja de hacerlo poco a poco y abre los ojos como platos. Lo mismo sucede con Brad, luego Liam y al final Dylan. Suelto una risa que viene desde mi garganta y las demás reímos acompañadas de la abuela. Creo que la que ríe más es Bridget que aplaude como una foca con retraso. Abbie también ríe como ella.
Cada uno de ellos se abanica con su mano, me parece ver a Liam tomar agua hasta empaparse la cara y luego sigue papá que se le queda viendo a todos y luego empieza a dar señales de que se ha enchilado. Río con mi mano en la boca y Ally voltea a verme con interrogación.