Eres el amor de mi vida.

Capitulo 26

Una semana había pasado desde esa noche que me quede dormida en brazos de Marcus, han pasado tantas cosas que siendo sincera creo que necesito un minuto de cero estrés.
Era sábado, específicamente eran la 4:50 AM, había decidido la noche anterior despertar temprano para ir a correr un poco, hace tiempo no lo hacía, pero recuerdo que siempre que hacía esto mi día pasaba más ligero, más tranquilo. No se para ustedes, pero eso pasa conmigo.
Me paré de la cama y fui directo a mi closet por ropa deportiva, pensé en llamar a Amanda pero en seguida me acorde que no le dije anoche, y llamarla para despertarla a esta hora, sería tenerla el día entero pegada a mi con su ánimo característico de un perro, y vaya que la entiendo, tampoco me gusta que me despierten.

Tomé lo primero que vi en el closet que me sirviera para correr, consistía en un conjunto Nike deportivo negro y tenis de igual color. Salí de mi habitación y me dirigí a la cocina a por una botella de agua, agarré la llave de mi apartamento dirigiéndome a la puerta.

Sali de mi edificio de apartamento dirigiéndome al parque más cercano, si! Para mí suerte tengo un parque cerca de casa, donde a esta hora la gente suele salir a caminar y hacer ejercicios, eso hace que este más confiada, pues a esta hora no es bueno estar sola.

Había pasado aproximadamente una hora, ya estaba dando mi última vuelta para dirigirme a casa, debo ir a cambiarme para llegar a trabajar. aún siendo sábado cuando eres dueña de tu empresa y más siendo un restaurante, debes estar consciente que no hay muchos días de descanso al menos por el momento, como no tiene tanto de estar abierto necesito ser yo quien este cargo de todo hasta que se estabilice y encuentre alguien sumamente de confianza que esté dispuesto a estar.

Llegué a casa e inmediatamente fui a darme una ducha, tras unos minuto salí del baño con mi bata y me dirigí a la cocina por algo de comer, aún era buena hora, podía desayunar tranquila.

Salí de casa faltando poco minutos para que el reloj marcará las 8:30 am, al llegar al restaurante, este ya había Abierto sus puertas y se encontraban unos que otros clientes tomando su desayuno, me dirigí a mi oficina y me senté en mi silla tratando de tener cabeza para unos asuntos que tenía atrasado del restaurante.

A decir verdad en esta semana no he hecho más que pensar que puede estar pasando, desde esa noche que Marcus y yo amanecimos juntos, después de quedarnos dormido viendo aquella película, no he sabido mucho de él, salió al otro día de casa estando un poco raro, ni siquiera se despidió como lo hacía siempre. Hemos hablado un par de veces pero lo noto distante, siento que lo hace solo por compromiso. A decir verdad no sé que me pasa, pensaba que cuando sucediera esto actuaría normal como si no me importara lo más mínimo, o quizás es así y estoy tratando de pensar y darle más importancia de lo que se merece. Total ni que fuera su responsabilidad tratarme como si fuéramos o le importara tener algo conmigo.

Carajos Galia concéntrate!! Me regañe para mí misma, tenía que por un momento dejar de tener mis pensamiento por esa vía, debía hacer mi trabajo. Prendí mi computador y empecé a llevar la contabilidad de esta semana, al decir verdad el restaurante ha estado muy concurrido en estas últimas semanas, no saben los Feliz que estoy, ver cómo mi sueños se está haciendo realidad poco a poco, hay veces que aún no me creo que todo esto esté ocurriendo. Hace un año y unos meses que me gradué de la universidad y ya tengo mi propio negocio.

Era tarde, así que decidí irme a casa a descansar, mañana sería otro día en que él debía levantarme a trabajar, como les dije, en mi trabajo no hay descanso. Llegué a casa y tire la cartera en el mueble dirigiéndome a la cocina por un sándwich, si! Se lo que están pensando, como yo siendo cheff siempre escojo un simple sándwich para cenar. Pues fácil!! Si, me encanta cocinar, pero no me gusta hacerlo para mí sola, no tiene la misma emoción, así que prefiero cenar algo rápido y delicioso y créanme un Sándwich es eso y más.

Me encontraba encontraba acostada en mi cama, en eso me llego rápidamente a la mente, mi madre cumplía años la semana próxima y aún no había quedado con papa y Juliette a ver qué le haríamos, el cumple de mamá es una fecha muy importante, y no nos gusta dejarla pasar sin hacerle algo, pero ya mañana abría tiempo para llamarlos y ponerme de acuerdo con ellos. Al pasar unos minutos caí en un coma profundo.

TIC TITI TIC, TIC TITI TIC (despertador).

Sonó el despertador eran las 7:00 am.
Si, puse la alarma un poco más tarde, hoy era domingo así que podía dormir solo un poquito más de lo común, me paré de la cama y fui directo al baño, como todos los días empezaba mi rutinaaa, cepillarme, bañarme, en fin todo lo que hace un ser humano normal antes de salir al trabajo. Trabajaría hasta las 11:00 am había quedado de salir con Amanda para ir a comer juntar al restaurante que tanto nos gustaba, lo descubrimos cuando estábamos en la universidad y desde ese entonces siempre que queremos comida italiana ( nuestra favorita) vamos allá.

Era Domingo y para mí, los Domingo eran los días de salir vestida decentemente a la calle como siempre digo, los Domingo no se vale salir con el piez izquierdo de tu cama, eso lo dejamos para el lunes, no se ustedes pero desde siempre he tenido una relación de amor y odio con los días lunes, no se el porque ni me interesa saberlo a decir verdad.

Me fui corriendo al closet y estuve cien por ciento de acuerdo que esto era lo que debía ponerme así que inmediatamente puse la ropa arriba de la cama, fui a la cocina en buscar de algo rápido que desayunar, opte por un yogurt con frutas y un vaso de jugo de naranja natural.
Volví a mi recámara luego de tomar el desayuno y me puse a cambiarme. Mi ropa consistía en un un pantalón de tela azul y un crop top blanco, combinado con unos zapatos de punta color canela y una chaqueta a juego con los zapatos, luego de vestirme opte por usar el pelo recogió atrás y deje dos flequillos afuera en la parte de adelante. Unos minutos más tardes me encontraba de camino a el restaurante

Eran las 11:55 am ya iba saliendo de mi restaurante  al restaurante donde comería con Amanda, tenía mucha hambre así que decidí apresurarme  lo más que pudiera, cuando iba saliendo por la puerta, de lejos lo vi, ahí estaba el con sus ojos puestos en mi, desmontándose de su camioneta y dirigiendo sus pasos hasta donde me encontraba yo parada.