TWO GIRLS- [EDICION CACHE]

1.

POV POCHE.

No me permita llegar tarde al trabajo, siempre contenía la mejor energía para recibir a nuevos huéspedes y ver de nuevo caras conocidas y aunque no fuera el mejor empleo, me daba lo necesario, digamos que mas de ello... Para sostener a mi pequeña hermana de trece años, Vale y a mi.

Mis padres murieron hace mucho así que nuestros abuelos nos acogieron, pero el depender de ellos era algo fatigante, no quería causarle mas molestias así que lleve a Vale conmigo a lo que es ahora nuestro acogedor apartamento.

Cada día ella se dirige a su escuela y yo aquí, amo que cuente conmigo para decirme como estuvo su día, sus notas, algunas veces de sus compañeros... Los cuales si prosiguen coqueteando con ella les cortare la cabeza uno por uno, se que me encuentro bastante celosa pero ella es mi vida y quiero protegerla lo mas que pueda.

Al llegar, siempre a la hora justa, pude notar como todos organizaban cada parte del lugar, como: Las esbeltas guitarras que adornan las paredes y los blancos muebles que contiene la sala de espera, estaba totalmente desorientada y confundida de lo que sucedía.

Afortunadamente podía ver desde lejos a Juliana, la cual se notaba igual de estresada que los demás.

-¿Porque todos se encuentran de tal manera? -Juliana Velasquez, chica baja, cabello castaño, hermosa sin duda, mejor amiga desde los diez y re comendadora de lo que hago ahora.

-El gran empresario y dueño de cantidades de hoteles alrededor del mundo, incluyendo este, no tardara en llegar y todo tiene que mantenerse en perfectas condiciones. -Dijo ella, acomodando todo lo que yacía desorganizado en su recepción.-¿Que esperas, Poche? En pocos minutos llegara, tienes que estar en tu puesto de trabajo. -Poche: Desde pequeña siempre me habían llamado de tal manera, así que ahora todos lo hacían y sin decir mas, obedecí, dirigiéndome ahora a mi pequeña recepción, la cual se encontraba impecable. Sonreí.

Acomode por un momento mi ceñida falda negra que adornaba mi torso hasta mis rodillas e hice lo mismo con la ajustada polera blanca que contenía. Después de pocos minutos sentí vibrar mi teléfono sobre el mesón.

-¿Si?

-Hola amor ¿Como va tu día? -Dijo Mario detrás de el.

-Poche ¿Que crees que haces? En pocos segundos llegara el Sr. Calle, tienes que cortar, no puede... -Pero Juliana fue interrumpida por el sonido de la cristalizada puerta principal.

-Tengo que irme, llamare luego. -Fue lo único que pude decir a Mario entre susurros.