TWO GIRLS- [EDICION CACHE]

3.

-Buenas tardes.-Le dije elevando una ceja.

-Buenas tardes, este pedido es para la Sra. Calle. -Dijo alzando la notable caja, di un hondo respiro y la tome sintiendo lo valsuda que se encontraba. -Por favor, podría firmar aquí. -Concluyo, para entregarme una pluma y firme rápidamente.

-Gracias. -Dije mi ultima palabra y me dirigí de nuevo hacia el Hotel.

***

-Tienes que llevársela. -Escuche la sensible voz de Juliana a mis espaldas.

-Pero, ella puede... -Fui interrumpida al excusarme.

-Es nuestra mayor huésped. -Dijo y rodé mis ojos, aun así obedecí de nuevo, ella tenia la fuerza de obligarme a hacer lo que quisiera. -Gracias.

Me dirigí hacia su apartamento, curiosamente en cada paso que daba me encontraba nerviosa y no sabia el porque.

Toque el timbre y di después un paso hacia atrás. Ella aun lucia con su asombroso vestido y su perfecto cuerpo, lo único diferente en ella es que sus pies ya no lucían con los espectaculares zapatos de hace unas horas, y ahora ella lucia mas natural, sus ondas ya se habían caído dando a su cabello un tono real, no entiendo como es que esta chica luce hermosa en todos los ángulos y en cada aspecto existente, como es que hace muy pocas horas la conocí y mágicamente hace temblar mis piernas en estos momentos.

-Buenas. -Dije, me faltaba extrañamente el aliento.

-Hola. -Ahora no contenía ego en su voz, ahora se sostenía con una torturante voz seductora.-Que grata visita. -Me observo de pies a cabeza, sin dejar caer su provocadora sonrisa.

-Tengo este pedido para usted señorita. -Dije concentrada en su vestido.

-¿Te gusta? -Dijo observándose. -Y por favor, dime por mi nombre, creo que el ''Señorita''es muy formal. -Su confianza y seguridad de si misma me sorprendía.

-Claro. -Dije embozando una sonrisa mientras posaba por fin mi mirada en su rostro. -Este es el paquete. -Se lo alcance y ella lo tomo con detallada fragilidad. -Creo que eso es todo, nos vemos señorita.

-Daniela. -Corrigió, mientras su labio inferior yacía atacado por sus dientes, haciéndola ver jodidamente sexy.

-Si, Daniela... Claro. -Dije volteando para ir hacia el ascensor, tenia que sentir nuevamente el aire invadir mis pulmones, lo necesitaba.

-No contesto mi pregunta.-Me voltee para mirar de nuevos sus admirables facciones.

-No entiendo señorita.-Dije y ella se poso frente a mi, nuestras respiraciones se sostenía en una batalla.

-No me dijo si le gusto mi vestido. -Su respiración caliente en mis labios me hizo tragar saliva. -Y es Daniela. -Corrigió una vez mas y guiño su ojo, mientras se sumergía de nuevo en su gran apartamento.