TWO GIRLS- [EDICION CACHE]

16.

Desafortunadamente mis palabras no se escucharon ante los estruendos que seguía causando Calle.

-Bebe, esta bien. -Dije tratando de acercarme para detenerla y calmarla una poco, pero de nada sirvió ya que no paraba de tirar objectos por todo el lugar sin ningún objetivo. -Cariño, Cariño. Para por favor. -Murmure tomando sus muñecas frente nuestros rostros, encontrando unos ojos café intenso llenos de lagrimas que miraron a los míos con un tanto de miedo pero a la vez paz al reconocerme. -Tranquila, soy yo bebe. -Susurre para así tomar su cabeza y abrazarla contra mi pecho, mientras daba cortos y detallados besos a su cabello y frente sudada, tratando de calmarla aun mas de el histérico suceso. El dolor invadía mis muñecas dándome corrientes inmensas de tortura, pero eso no importaba porque después de tanto tiempo sentía que hacia algo bien, la protegía, la hacia sentir salva y hacerlo era el mayor privilegio.

-Lo siento. -Susurro temblando entre mis brazos. 

-Tranquila, no pasa nada.-Dije sin saber de que hablaba precisamente.

-Es que moje todo tu suéter con mis lagrimas. -Murmuro haciendo que embozara una sonrisa llena de tristeza al verla de tal manera.

-Es solo un suéter. -Susurre despegandola un tanto para así mirar su tenue y lastimada piel, cubierta con la tersa luz de las farolas de la avenida, evidentemente noto que observe sus heridas resplandecer desde sus pómulos hasta la comisura de sus labios. -Y recuerda, tu eres mas que un suéter. 

-No quiero que pierdas tu trabajo por mi culpa.

-Eso, no pasara bebe. - Murmure abrazándola sobre mi pecho una vez mas, para sentir su calor, sentir palpitaciones contra mi.

-¿Y si pasa? Yo acepte su amenaza pero y si no cumple lo que dijo. 

-¿Te amenazo? -Grite haciéndola dar un saltito de exaltación al oír mi tono de voz. -¿Que te dijo ese hijo de puta?

-Solo dijo que si yo le comentaba algo a mi padre, tu trabajo se iría a la basura y eso es lo menos quiero. -Susurro entre lagrimas, ella estaba realmente asustada, en realidad no sabia lo que pasaba, su vida pasaba tan rápido, la comprensión de todo lo que estaba transcurriendo en su vida se poso en mis entrañas, rompiéndome, no había pensado en como la hacia sentir todo esto, no había pensado en como se sentía ante toda esta situación, no podía imaginar cuantas cosas pasaban por su cabeza pero su corazón que latía desenfrenado contra el mio, me demostraba que estaba llena de terror. 

-¿Porque haces esto por mi? No te merezco. -Murmure y si, así era, yo no la merecía.

-No lo se, solo siento la necesidad de hacerlo. Es como si mi alma me lo pidiera. -Al escucharla la abrace mas contra mi pecho, esto me dolía mas que las heridas que me acompañaban desde la entrada. -¿Es cierto? -Susurro después de varios segundos.

-¿De que hablas?

-Sobre lo que dijo Sebastian, en realidad ¿Eras mi novia?

-Quizá. -Dije sonriendo, mientras acariciaba sus cabellos entre las yemas de mis dedos.

Los minutos pasaron acumulando hora tras hora hasta que se adormeció entre mi busto. al saberlo la tome entre mis brazos cautelosa mente evitando que se despertara llevándola hasta cama.

-Aun así el nunca te creería. -Susurre cabizbaja dándole un beso a su frente y era cierto, aunque Calle le contara a su padre sobre lo que paso, el nunca pensaría que fuera cierto, como en toda su vida, siempre a sido ateo ante sus palabras.

POV CALLE.  

Me desperté asustada al no sentir las manos de Poche recorrer mi cabello y me invadía el terror al pensar que no pasara una vez. Así que de inmediato palpe mi cama en busca de su tacto, en busca de su calor.